Querido Lega...
Te conocí cuando mi mundo era oscuro y lleno de temores.
Una parte de mí siempre confiada ciegamente con qué una sonrisa tuya me alegraría el día.
Muchas personas te amaron en viva y otras aun te siguen amando en tu lecho de muerte. Al principio todo era confuso, a veces cuando veía una fotografía o leía algo acerca de ti mis ojos se me llenaban de lágrimas y no era capaz de contenerlas, fue algo diferente, algo extremadamente extraño sentir que conocías también a quien estaba detrás de la pantalla que a las que conoces del otro lado. Yo simplemente había conectado perfectamente contigo aun teniendo en cuenta que eras un personaje artístico con imperfecciones pero que siempre sabia como sacarme una sonrisa.
Después de siete de febrero de dos mil diecinueve, fueron meses duros en los que ver edits me provocaban quererme poner a llorar de la impotencia de recordar que por una bala perdida realmente perdimos a un personaje icónico de la música urbana, no tan famoso como los demás, pero si con un gran potencial de ser mejor que cualquier otro sin importar la fama, las vistas, los seguidores. Si a mí Fabio Andrés Legarda me cambio la vida cuando dijo: "Aprende a estar sola, también aprende a estar acompañada y amar con respeto, no te desesperes por saber si él es el amor de tu vida. Solo da lo mejor de ti, es lo mejor que puedes hacer, no dejes que nadie te diga como debes vivir tu sexualidad, escucha a tu corazón, tú corazón es la brújula. Si no tienes pareja es porque la vida te está preparando para lo mejor, eres hermosa, nunca olvides eso, cree en ti, no hay nada más sexy que una mujer que se ama a sí misma. No dejes que la presión social te contamine, tener una pareja o no, no define el ser humano que eres".
El personaje de Luke nació mucho antes de que Legarda falleciera. Luke siempre estaba dentro de mi cabeza como algo especial, alguien que me conectada con la vida dentro de la música, pero Legarda me dio la inspiración, la fuerza y la confianza de comenzar "La última canción" en abril del año pasado. Fueron demasiados borradores, demasiado estrés por querer que fuera perfecta para mí, que incluso me perdí dentro de la presión social de ver que existían historias demasiado buenas que yo también quería que la mía fuera igual de perfecta que las que leo, pero entonces lo escuche hablarme al oído y decirme: deja de pensar en lo que otros tienen y explota lo que tú tienes para darte a ti misma, yo confió en que harás lo que te gusta y no lo que le gusta a los demás. No quería terminar la historia, no quería darle fin a Luke, pero tienen razón cuando dicen que debemos dejar descansar a los personajes.
Dejar ir está historia significa mucho para mí ya que me hizo reencontrarme conmigo misma, afrontar problemas del pasado que venia evitando desde que pasaron y diciéndome que pasarían hasta que el día que abrí el documento en blanco y esa voz de Luke me decía siempre: "tú puedes yo confió en ti, no eres perfecta, pero expresas lo que sientes con palabras escritas en historias". No solo me encontré a mí misma también me reencontré con la música, con la verdadera razón del porque empecé a escribir está historia, darme cuenta de que siempre estaré conectada de cierta forma con la persona que siempre está apoyándome desde el cielo, mi estrella brillante que se apago mucho antes de seguir sus sueños y que sin estar presentes siempre está presente conmigo cuando abro un nuevo documento y comienzan a surgir las palabras. Sobre todo, es los días malos, en los días que la soledad me golpea y me tira.
Gracias Lega: gracias a ti por enseñarme que primero debo de aprender a amarme a mi misma antes de amar a alguien más, pero sobre todo por mostrarme que el camino puede cambiar si debemos dejar de lado todas las cosas que amamos, a las personas por las que llegamos a sentir y por las que no logramos expresa todo lo que sentimos por ellas y cuando queremos hacernos el tiempo se nos termina y debemos de resignarnos a que debemos dar un paso atrás para que ellas sean felices con alguien más.
Gracias hermanos: gracias hermanos por demostrarme que sin importar lo rotos que quedemos después de un accidente siempre existirán personas que nos motiven a querer seguir, pero también a aceptar cuando alguien decide irse antes de tiempo, han pasado demasiados años desde la última vez que decidí que escribirte mensajes de texto era patético, ahora escribo historias en donde te encuentro siempre que pierdo la esperanza. Gracias por escogerme como tú hermana, tú mejor amiga, pero sobre todo gracias por mostrarme que en la música podemos encontrar la felicidad que a veces no queremos aceptar.
Gracias por ser mi estrella que siempre brilla cuando la mía se apaga.
Gracias por dejarme contar está historia que me dolió desde mucho antes de comenzarla a escribir.
Gracias por ser mí última canción...
"Cuida lo que amas porque los recuerdos no se pueden abrazar".