Continuas aquí, gracias, la desición que tomaste te llevará a un mundo extraño pero curioso.
Tal vez te da curiosidad el nombre de este libro, la vida de un monstruo, bueno, poco a poco iremos descubriendo el por qué de ese nombre. Descubriremos, ¿Quién es el monstruo?, por ahora déjame contarte, de vez en cuando, parte de mi vida.
Cuando era niño tenía un sueño, ser alguien importante, es curioso cómo se puede interpretar ello, pero resulta que siempre quise resaltar en algo, en un punto, en un aspecto. No quiero ser el mejor en todo, ni hacer todo bien, tan solo ser importante en una cosa, la que sea.
Un grave error, sabes amigo o amiga, eso fue destructivo para mí. Vivir atormentado por no ser importante, hacer, deshacer, luchar, pelear con tal de sobresalir y siempre ser opacado por alguien más. Creer que todos están por encima de ti y que por más que lo intentes nadie es capaz de valorar tu esfuerzo y creen que te da igual y que no te tomas las cosas en serio.
¿Te has sentido de está forma?, Si la respuesta es si, entonces comprendes perfectamente lo anterior escrito.
Amo dibujar, soy buen dibujante, me costó mucho admitir por mi propia cuenta de que soy buen dibujante, y aún teniendo esa habilidad, creía que era mal dibujante y que siempre habría alguien mejor que yo, y es cierto, siempre habrá personas mejores, pero no estamos compitiendo, no son carreras, lo que vale e importa, es tu visión de las cosas, los demás podrán ver superficialmente, pero tú sabes todo lo que hay interno y externo. Solo tú sabes el esfuerzo que has dado.
No te preocupes si los demás son incapaces de ver tu sudor y lágrimas por conseguir algo, tus mejoras, tus logros, tus progresos. Al mundo le falta empatía y no conozco a nadie que la use eficazmente.
Pero la empatía es solo una excusa para ser un "intento de buena persona". Nadie comprende a nadie, es imposible, a nadie le importa nadie, no hay nadie para nadie. Y sé que dirás, yo sí tengo a alguien que me entiende, déjame decirte algo, ¿te entiende o dice entenderte?, Y si pasó por algo similar... Es en lo único en lo que podrá entenderte, cada persona pasa por diferentes experiencias, y aún en las que son similares, se quedan en eso, similares.
Ofrecer.
Aquello que supera la empatía por mucho, es el ofrecimiento.
Lo que una persona puede ofrecerte, sin pedir nada a cambio, sin pedirte que le des lo mismo, eso es lo que el mundo necesita conocer más.
Las personas siempre nos podrán ofrecer, aquellos que no puedan ofrecerte nada más, es por qué jamás fueron ofrecidos, no tienen ese corazón para ofrecer algo, de corazón.
Y no te equivoques, no se vale ser ofrecido(a) por conveniencia, por qué ya le toca a esa persona, por qué hace días me ayudó y necesito volver el favor, eso no es ofrecer.
Hacer cosas por otras personas sin que te lo pidan, sin recibir nada a cambio, o como yo prefiero decirlo, recibir aunque sea, las gracias.
Cuando dejas de buscar la empatía, que es un concepto extraño y sin sentido, y ves el ofrecimiento, es cuando algo cambia y cambia mucho.
Quiero que pienses las veces que te has ofrecido voluntario, que has ofrecido ayuda aunque no sepas que hacer, que has ofrecido de tu tiempo, que has ofrecido tus sentimientos, incluso tu vida. Las personas actualmente ya no quieren hacer eso, entiendo esa parte de no hacerlo por todo el mundo, pero ofrecerte a alguien importante sin importar que, es algo maravilloso. Pero ojo, también puede ser destructivo si no sabes medir tus prioridades.
Quiero que estés donde estés, te detengas un momento, levanta la vista y observa, ¿Lo vez?.
Espero que hayas visto algo distinto esta vez, si no puede que me rinda en intentar que veas aquello que está ahí.
¿Recuerdas cuando eras niño(a)?, Desearías poder regresar, ¿Verdad?, ¿Por qué?, ¿No te gusta donde estás?. De segura piensas lo que todos piensan, "era feliz y no lo sabía", "las cosas eran mejores", bla, bla, bla. Deja un momento el pasado, ya no vivas ahí, eres feliz ahorita solo que no lo ves, cuando eras niño(a), no pensabas si eras feliz o no, solo lo eras y ya, punto, no hay más. Ahora no paras de pensar si eres o no, feliz.
Te diré un secreto, no seas feliz, no busques la felicidad, busca la calma. Ser feliz es un estado de emoción, un estado, dejas de estarlo como cada emoción, como cada sentimiento. La calma perdura y es el estado base donde nada es tan alegre ni tan triste. Ser feliz no te llevará a nada, estar triste tampoco, solo son distractores, estar feliz la mayor parte de tiempo hace que no pienses en las cosas tristes, más sin embargo no las hace desaparecer, y de la misma forma al contrario.
Es como una "peda", muchas personas buscan alcoholizarse para "olvidar las penas", eso es tan estupido ya que solo ignoras el dolor pero no lo hace desaparecer. Afrontarlo si lo sana. Es como una anestesia de la vida.
Rodeate de personas que no hagan esto, no valen la pena, no te juntes con tipos que hacen esto, refugiarse en estas cosas es algo que debes de evitar, si lo vas a hacer que sea por gusto, por diversión, para divertirte y ya.
Y si eres uno de ellos, puedes largarte ahora mismo de este lugar, o puedes cambiarlo por qué personalmente, me repugnan las personas así. No valen nada, ya que su solución más fácil es está y sabes, el mundo no necesita de esas personas.
Y regresando al tema, de niño eso quería, ser alguien importante. Ahora no quiero ser importante, lo soy, siempre lo fuí, y todas las personas son importantes. Todos somos importantes, también tú el que está leyendo esto.
Buscaba llamar la atención de una forma u otra, pero ahora solo quiero transmitir. ¿Y tú que querías ser de niño(a)?, Y no quiero que la respuesta sea bombero, doctor o algo laboral.
¿Que querías ser de niño(a)?