La vida de Yudith

¿Celos Extremos?

Yudith rápidamente volteó a ver, levantándose de la banca, y con gran sorpresa vió a Erick.

 

Conversación:

Yudith: Erick, viniste, pensé que no vendrías por lo que pasó la última vez.

Erick: No me quedaba de otra. -riendo- Después de todo, había una doncella en apuros.

Yudith: Espero que puedas disculparme por mí tonta actitud de la última vez. Odio admitirlo pero tenías razón al enojarte.

Erick: Tranquila Yudith, eso ya es cosa del pasado, acuérdate siempre de nuestra frase favorita;

"No puedes cambiar el pasado, pero con la actitud correcta, podrás recuperar en el futuro más de lo que perdiste en el pasado"

Yudith: Gracias Erick, extrañamente siempre sabes que decir. 
Al parecer te gusta mucho filosofar -riendo-.

Erick: Losé, soy único -riendo-.
Bueno, ahora me dejarás acompañarte a tu casa?

Yudith: No te quiero seguir molestando, pero si así lo quieres está bien.

Erick: Si no te acompaño puede pasarte algo, ¿no crees? está todo oscuro por estás calles.

Yudith: Aunque no lo creas me puedo defender sola, pero tienes razón está todo muy oscuro, así que es más peligroso.

Luego de un buen rato, Erick y Yudith caminaron por la nieve continuando con su charla.
Erick se portó como un caballero toda la noche, y gracias a él Yudith regresó a su casa, sana y salva.

A la mañana siguiente Yudith se despertó radiante, desayunó, y se alistó para ir a la universidad, pero al agarrar su celular vió que tenía varias llamadas perdidas y mensajes de Mark, así que decidió no responderle.

Entrando a la universidad, Yudith se encontró con Mark en la puerta del salón, y ella trató de ignorarlo, pero él le frenó el paso poniéndose delante de ella.

 

Conversación:

Yudith: -enojada- Mark déjame pasar, tengo clases, no me obligues a empujarte.

Mark: Yudith necesitamos hablar, déjame explicarte las cosas.

Yudith: Ya te lo dije Mark, no tenemos nada de que hablar, tus acciones me dijeron todo ayer.

Mark: -dejándola pasar- Cuando termine tu clase te estaré esperando aquí afuera, por favor, quiero que me escuches.

Yudith ignoró a Mark, y entró a su salón, pero en todas las horas de clase no se pudo concentrar pensando si debería, o no, escuchar a Mark.

Al terminar la clase, Yudith salió del salón, y afuera le esperaba Mark. Al verlo Yudith nuevamente lo ignoró y se dirigió a la puerta de la Universidad para irse, pero Mark la detuvo agarrándola de la mano por detrás.

 

Conversación:

Mark: Quieras o no, quiero explicarte todo aunque no me escuches, así que vamos a nuestro lugar favorito.

Yudith: Está bien Mark, pero suéltame, puedo caminar sola, ya te lo dije la última vez, no soy una niña.

Mark soltó a Yudith, y ambos caminaron hasta la Torre Eiffel, allí subieron hasta el segundo piso, como de costumbre, y se quedaron mirando el cielo por unos minutos incómodos, sin decirse ni una palabra, hasta que Mark soltó un gran suspiro, y decidió hablar.

 

Conversación:

Mark: No quería que te enojaras ese día, es solo que solo intentaba darte un poco de celos. No esperaba que las cosas pasaran así. Lo siento.

Yudith: Mark, no entiendo porque querías ponerme celosa, además ¿no tenías una mejor manera de ponerme celosa? -riendo-.

Mark: -riendo- Sabes que soy muy malo en esas cosas, y creo que ya es tiempo de decirte que me gustas.
Contigo pasé los mejores momentos de mí vida, y aunque fueron pocos, me dejaste conocer lo que más te encantaba, y siempre que no estás conmigo te extraño. Creo que realmente te quiero.

Yudith: Mark, lo dices en serio? No puedo creerlo, pero aún así no puedo corresponder a tus sentimientos, lo lamento.

Mark: Pero Yudith sólo dame una oportunidad de quererte, y demostrarte cuanto me gustas.
¿Ni siquiera podemos intentarlo?

Yudith: En mí vida tuve muchos problemas, y no confío mucho en los hombres, es muy difícil abrir mí corazón hacia los demás.

Mark: No te apresures en responderme, solo tomate tu tiempo, y respóndeme en un mes.
Mientras tanto salgamos a citas, así puedo demostrarte que solo te quiero a ti.

Yudith: No losé Mark.

Mark: Yudith, déjame intentarlo solo una vez, y siempre ten esto en mente;

"No mires hacía atrás por un pasado que no va a volver, porque te puedes perder mil nuevos caminos por recorrer"

Así que piénsalo, y no te dejes llevar por los fantasmas de tu pasado.

Mark abrazó a Yudith, se despidió de ella, y se bajó de la torre, mientras ella se quedó pensando, y mirando esa hermosa vista.

Luego de unas horas se hizo de noche, y Yudith regresó a su casa, pensando en la propuesta de Mark, pero por alguna extraña razón aún se sentía un poco insegura con Mark. 
Yudith seguía pensando en lo que había pasado con la otra chica en la Universidad, y lo que escuchó en el baño de mujeres sobre Mark.

Esa noche Yudith no pudo dormir mucho, y se la pasó dando vueltas en la cama, por lo que sólo pudo dormir algunas horas.

Al día siguiente Yudith amaneció con grandes ojeras, por lo que se puso un poco de maquillajes para taparlas, luego se alistó, y salió a la Universidad.
Al llegar, Mark la esperaba en la puerta del salón con una flor, por lo que muchas chicas la miraban al pasar, cuando Mark le entregó la flor.

 

Conversación:



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En el texto hay: soledad, juventud, sociedad

Editado: 24.04.2020

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