Al llegar al hospital, Paul me conto que fue lo que paso, mas dicho lo que la policía sabia, no era un robo porque todas las cosas, el dinero todo estaba ahí, se notaba que era venganza, no sabia si hablar, porque se que Joshua se metería en problemas, más porque irían a investigar en el barrio.
—¿Sabes algo hermana? —Paul me pregunto, ya que Vilma no tenía enemigos, sus padres necesitaban respuestas.
—No, solo ella debe saber quién la ataco.
—Los atacantes tenían guantes, porque no hay ni una sola huella. —Dijo el detective a cargo del caso.
—Debe encontrar a los que le hicieron daño a mi hija. —Reclamaba la madre de mi amiga, quería decirle, pero tenía miedo por Joshua, no quiero que me odie.
—Debes decir lo que sabes. —Me dijo Paul, el me conoce muy bien y sabe que estoy mintiendo, esa es la consecuencia de no saber mentir.
—Señor detective, en el barrio que queda cerca del centro, yo trabajo ahí, la otra noche Vilma me fue a ver, porque se me hizo tarde, y unas chicas me estaban atacando, Vilma las arrollo con el auto apartándolas, nos les hizo ningún daño, pero ellas dijeron que se iban vengar, Vilma solo me ayudo a defenderme de ellas.
—Ese barrio es muy peligroso, vive gente que se dedica a robar. —Dice el detective.
—Creo que ellas son las que le hicieron daño a mi amiga.
—¿Cómo se llaman las chicas?
—Silvia, la otra no sé, pero ella es la que le hizo daño.
—Gracias. —El detective se fue, y los padres de Vilma me agradecen por colaborar, ahora no voy a poder ir a trabajar, ellas me van a matar, y Joshua estará decepcionado por haber confesado eso sin estar segura, aunque sé que ellas fueron.
Pasa el rato y me dejan entrar, los doctores dicen que el golpe en la cabeza fue muy fuerte, que entro en estado de coma, pero si hay posibilidades de que se recupere.
—Amiga, lo siento, es mi culpa, no debí haberte metido en esto, pero ellas lo pagaran, de es tenlo por seguro.
Me fui a mi casa a descansar, le escribí a Don José, el motivo por el cual no iría a trabajar más, el comprendió, sabe como es Silvia y no quiero tener más problemas con ella.
Pasan los días y no se nada de Joshua, Alan me ha estado llamando y escribiendo, pero lo ignoro, no quiero nada con él, al único que extraño es a Joshua, aunque al que debería extrañar es a Alan, por otro lado, Paul es muy comprensivo, me acompaña a ver a Vilma, ya que el esta muy alterado me acompaña a todos lados por miedo a que Silvia me haga algo.
El detective dice que fue a buscarlas, pero no las encontró, buscaron en todos lados y el líder de ellos le comento que no sabía dónde podían estar, me imagino que hablaba de Joshua, las esta encubriendo, pero era de suponerse, es la madre de su hijo.
Estoy en mi casa, pensando mientras veo una película, estoy un poco aburrida porque no tengo nada que hacer, Paul, no me deja salir sola, y yo tampoco quiero salir, escucho que tocan la puerta, me aterra saber que el Silvia, abro y es Alan con un gran ramo de flores y un oso de peluche enorme.
—Hola, mi amor. —Como se le ocurre llegar como si nada.
—Vete Alan.
—Me enteré que estabas sin trabajo, vine animarte, ya terminaste con esa cosa que tenías por novio.
—No tengo tiempo para tus estupideces Alan, vete.
—Te vengo a ofrecer trabajo, conmigo vas a estar segura.
—No necesito de ti.
—Tampoco de ese, solo te ha traído problemas, hasta tu amiga salió perjudicada. —No entendía porque el, sabia eso.
—¿Tu como sabes eso?
—Cariño, somos del mismo circulo social, nos enteramos de todo, pero eso no es el punto, aceptas trabajar conmigo. —En parte tiene razón, necesito trabajo, pero no voy a regresar con él.
—Mira Alan, voy a trabajar en tu bufete de abogados, pero no pienso volver hacer tu novia.
—Tranquila, solo quiero ayudarte, pero eso sí, no te vuelvas a juntar con esa gente de baja categoría. —Mi hermano llega y se altera.
—¿Qué haces aquí maldito? —Alan regresa a verlo con su risa burlona que lo caracteriza.
—Vine ayudar a mi exnovia, necesita trabajo y aquí estoy para ayudarla.
—Ella no necesita nada de ti.
—Pues ella piensa lo contrario, me voy Irma, guardas las cosas que te traje, sabes que te quiero, el lunes te espero a primera hora en la oficina. —Alan se fue y mi hermano me fulmino con la mirada, sabia que no iba a estar de acuerdo.
—¿Me podrías explicar?
—No hay nada que explicar, por querer valerme por mi misma, mira como termino Vilma.
—Esa no es culpa tuya.
—Si lo es, Silvia me ataco porque sabe que le gusto a Joshua, si no me hubiera dejado en paz y Vilma no estuviera en esta situación.
—Pero no para que regrese con él.
—No he regresado con él, voy a trabajar en el bufete de abogados de su familia, pero no voy a regresar con él.
—¿Y eso? —Mira las flores y el oso.