Ella lee nuevamente la carta y estaba demasiado emocionada que no sintió la presencia de su hermana cuando encontró a su recámara hasta que de repente la vio y lo primero que hizo fue guardar su carta
Jade: nuestros padres me acaban de decir que acabas de romper tu compromiso y sobre todo que te vas a ir de la cama. Porque lo que menos que quiero es que mi futuro esposo tenga remordimientos contigo cada vez que te vea.
Mariana: las cosas quedaron demasiado claras entre nosotros y así que ahora debes de preparar tu boda. Además, quiero que sean feliz.
Jade: no te creo absolutamente nada y tampoco que se te haya terminado ese amor que sientes por él, pero no sabes el gusto que me da que te vayas a vivir con nuestra tía solterona.
Mariana: deberías de guardarle respeto a ella. Ahora debes de salir de mi recámara, porque necesito preparar mis cosas, aunque no son muchas las que me llevare.
Ella cuando estaba a punto de salir ve el hermoso ramo de flores y se preguntaba quien se las había obsequiado y esperaba que no fueran de su prometido, Mariana suspira y saca de su clóset su maleta, ella la pone arriba para empezar a buscar lo que iba a guardar
En la empresa McGregor
Dastan: no entiendo porque después de que se fue siento un vacío en mi corazón y sobre todo no dejo de recordar sus palabras. Nada más que Mariana siempre ha sido diferente, pero nunca la iba a llegar.
Leónidas: simplemente te hizo un favor al romper contigo. Seguramente en un futuro conocerá a una persona que la ayude a olvidarte o tal vez ya lo conoció y eso explicaría muchas cosas.
Dastan: en su corazón no puede existir nadie más. Porque yo siempre seré el único y nadie se atrevería a mirar la mujer de un McGregor y el que lo hace le va mal.
Leónidas: entonces quiere decir que es cierto el rumor que circula en tu familia y es que ellos son demasiados posesivos con lo que consideran suyo, pero te recuerdo que ella nunca fue tuya.
Dastan: eso no importa, además yo siempre la he considerado mía. Nada más que ahora necesito aclarar mis propios sentimientos antes de seguir cometiendo más errores.
Leónidas: no puedo creer que ahora estés confundido. Siempre habías querido que pasara esto y sería imposible que la recuperaras, si ella tomo la decisión de dejarte.
Dastan: nosotros tuvimos de acuerdo en romper. Solamente que es de sabios cambiar de opinión y ahora necesito decidir con quién casarme.
Leónidas: sería un error que la buscaras. Debes dejarla que siga con su vida, estoy seguro que te lo agradecería y tú deberías de hacer exactamente lo mismo.
Dastan: siento que habrá algo que me impedirá hacerlo. No me casare con nadie hasta saber qué es lo que quiero y la respuesta la sabré muy pronto.
Leónidas: cometerás una equivocación si eliges a la persona que no amas. Solamente que las palabras de ella te dejaron pensando, porque desde que se fue has tenido ese mal carácter que te caracteriza y tus empleados no tienen la culpa de lo que paso.