Capítulo 55

Lucas: ahora lo entiendo perfectamente, pero ya no es necesario que evites mostrar tus verdaderos sentimientos y como quiero verte sonreír llego el momento de darte tu obsequio de bodas.

Mariana: no me digas que me lo vas a dar aquí. Seguramente debe de ser una hermosa joya y estoy lista para recibirla, porque ya puedo aceptar los regalos que me des al ser tu esposa.

Lucas: tienes razón, mi princesa. Nada más espero que con la boda religiosa me veas como tu amado esposo y esta noche dejaras que te ame.

Mariana: definitivamente eres una persona diferente y nuestras almas no se equivocaron a enamorarse y ese era precisamente nuestro destino.

Lucas: nunca antes había creído en el destino hasta el día en que te conocí, pero ahora mismo te daré tu obsequio como el primero de muchos que te pienso dar en nuestra vida juntos.

Él saca dentro de su bolsillo un pequeño estuche de joyería para después abrirlo y en el había una pulsera de Esmeraldas. Mariana se sorprende al verlo y a los pocos minutos el se lo había puesto en su mano. Ella se lo agradece y al momento de hacerlo se da cuenta de que habían llegado y al momento de hacerlo, él se baja de su limosina para ayudar a su esposa a bajarse, pero cuando lo hace el no pierde la oportunidad de cargarla entre sus brazos y de esa manera entran a su casa. Solamente que los sirvientes se les quedan viendo y él se sube las escaleras para poder dirigirse a su recámara y cuando llegan la baja con mucho cuidado de entre sus brazos

Mariana: me sorprende ver como esta arreglada nuestra recámara. Esta vez las sirvientas hicieron un buen trabajo y esto lo hacen con la intención de agradarme.

Lucas: ellas saben perfectamente como deben de tratarte y si no es así serian despedidas por no saber tratarme con su debido respeto.

Mariana: así que eso se debe el cambio tan repentino que tuvieron conmigo a los pocos días que llegamos a nuestra casa, pero te pido que no las despidas sin que tengas ninguna justificación.

Lucas: no quiero seguir hablando de temas que podemos seguir hablando el día siguiente y si no te sientes lista para estar conmigo seguiré esperando. Porque el verdadero amor se puede demostrar de diferente manera.

Mariana: mi silencio hace que pienses de esa manera, pero yo quiero estar contigo. Además, no es necesario que sigas esperando más tiempo.

El sonríe para después empezar a besarla con mucho amor y esta seria la primera vez que se iban amar y todo tenía que salir perfecto. Ellos se entregan a su amor hasta que al fin caen rendidos

Lucas: hacer el amor por primera vez con la mujer que amas es algo maravilloso y por esa razón decidí respetarte hasta que fueras mi esposa por la iglesia.

Mariana: ahora entiendo cuando dicen que es mejor esperar al hombre indicado. Porque el sería el único que me podría amar de esta manera incondicional.

Lucas: lo que pasa es que yo era el único que tenia el derecho de amarte y muchas gracias por permitir hacerlo, ya que siempre nos hemos amado.

Ella besa la mejilla de su esposo y Mariana no puede evitar cerrar sus ojos y el como siempre la observaba dormirse entre sus brazos. Lucas estaba feliz de haber esperado y el tiempo después se queda profundamente dormido