Al sentarme en la cafetería por primera vez sola comencé a ver con detenimiento a todos los grupos.
Por un lado estaba el grupo de los chicos, su líder era Sam Williams, Sammy para sus amigos. Era un buen chico, algo pesado pero en el buen sentido. Siempre me había gustado su sonrisa, y su mirada de loco. Y ni siquiera hablen de sus hermosos ojos color avellana. Era un sueño, pero le pertenecía a alguien. Era el chico de Bonnie. Jamás podría hacerle eso a mi amiga. Aunque ahora actúa como una maldita perra que me ignora. Ni Archer ni yo entendimos a qué se refería con su pregunta. ¿Cómo podía yo no ser yo misma? No había respuesta lógica. Al menos eso era lo que pensaba.
Después, estaban las chicas lindas o lo que se llamaría "populares", su líder era obviamente Emma Hunter, Em para sus amigas. No tenía mucho que decir sobre ella, más que lamentaba haberle causado un trauma psicológico, pero además de eso, no había mucho que contar. Ella era "perfecta" en todos sentidos, su familia estaba unida y se amaban realmente, sus padres la adoraban, todos la querían, ella actuaba de forma amigable con todos y ella... tenía a Daniel.
Daniel era…
Él es… no importa quien es.
Me había hecho una promesa a mi misma. Cuando salga del hospital, no volvería a usar mis poderes en su contra nunca más.
Por el otro lado estaban las "normales", ellas eran con las que mejor me llevaba. Eran chicas con las que podía hablar y escuchar chismes. Aunque no eran mis amigas. Y, por último, está el que solía ser mi grupo. Archer, Bonnie y yo. Ninguno destacaba, los tres éramos como los mosqueteros, todos para uno y uno para todos.
Me sentí algo patética al ser la única en toda la cafetería que estaba sentada sola, hasta que lo vi. Dragomir estaba a tres mesas de distancia de mí, también se encontraba solo, únicamente con una manzana roja la cual veía mientras pensaba. Me preguntaba a mi misma que era lo que estaría pasando por su cabeza. Estaba a punto de dejar de verlo hasta que vislumbre como el cuerpo Caitriona se acercaba de él. La curiosidad me mató. Sé que está mal, pero tenía que escuchar esta conversación. Acomode mi cabello y prestando total atención en su conversación, use mis poderes de audición.
— Hola, tú debes ser Velkan.
La respuesta de Velkan no fue nada más que un suspiro de cansancio seguido de una rápida mirada de frialdad. Lo que hizo que la sonrisita de Cat se perdiera durante unos segundos.
— Sé que seguramente estás muy ocupado, y no voy a quitarte mucho tiempo. Solo vine a disculparme por lo de hace un rato. Tal vez pienses que soy una perra chismosa por decirle al profesor Connelly que debes sentarte junto a la rarita de Smith, pero no lo soy.
— ¿Ah, no lo eres? — murmuró sarcástico.
— No lo soy — negó con una sonrisa falsa —. Me apena mucho que tengas que lidiar con ella por lo que quede del año. Así que he decidido que como eres nuevo debes necesitar alguien que te ayude a adaptarte aqui. Sé todo sobre todos, por lo que si quieres saber algo solo debes preguntar. No tengo problemas en ayudarte.
No pude evitar reírme de su "no tan" desesperado instinto por conseguir su atención. Caitriona no era fea, de hecho era muy bonita. Tenía unos rulos magníficos que todos siempre le ponderaban, una piel hermosa de chocolate y era una chica esbelta. Era una lástima que ningún chico con medio cerebro quisiera salir con ella por su "exigente personalidad".
Ante mi risa Dragomir me miró de reojo. Definitivamente me había escuchado. Debía intentar ser más discreta cuando espiaba.
— ¿Qué sabes de ella? — preguntó tomándome desprevenida.
— ¿Selene Smith? — resopló Cat para luego tirarme una mirada de asco — Bueno, ella pertenece a una de las familias más antiguas del pueblo. De hecho, su tatarabuelo es uno de los tres fundadores originales, por lo que su familia es dueña de gran parte de la ciudad. Podría ser un buen partido, pero su familia es... bueno, solo digamos que es algo complicado.
— ¿Qué es lo complicado?
— La historia que todos saben — comentó con una sonrisa — Su padre huyó del pueblo con su secretaria después de haber engañado a su madre por más de 10 años. La familia está prácticamente rota. Nadie del pueblo se relaciona con algún Smith, a menos que sea para pedirle favores a su madre. Qué entre nosotros, no es una mujer muy... demostrativa de afecto si sabes a lo que me refiero. Luego está su hermana mayor, Isabella, solía ser la chica más popular del pueblo. Era novia del nadador estrella de la escuela, tenía las mejores notas y era muy linda, de verdad. Era una chica perfecta.
— ¿Que le paso?
— Cayó en depresión luego del asunto del padre y dicen que ahora anda en las drogas. Una pena real. Y la más pequeña de ellas es Selene Smith. Es muy rara, y no de la forma habitual. Antes de ayer, sus únicos amigos aquí eran Lee Jackson y Amelie Dumont. Les decimos Archer y Bonnie.
— ¿Ayer?
— Ah, es verdad. Tú llegaste en la segunda ahora. Mi mejor amiga Emma Hunter sufrió de un ataque por parte de fuerzas misteriosas. Fue realmente extraño, ¿entiendes que pudo haberme pasado a mí? Gracias a dios, no fue así, pero todos dicen que Smith es la responsable.
— ¿Quieres decir que Selene controla fuerzas misteriosas? — investigó Dragomir.
— Selene quedó en ridículo por sí misma como es lo normal, y entonces, mi amiga Emma, voló literalmente como dos metros y luego cayó, las luces del auditorio explotaron y toda la sala se llenó de un aura muy extraña. Ocurrió frente a todo el mundo. Después de eso tuvo un ataque en el que ella se tiró al piso a hacer movimientos raros. Parecía que estábamos viviendo una película de terror, estaba super asustada. La buena noticia es que perdimos una hora entera de clases por eso — se alegró mientras aplaude-
— ¿Dices que tuvo un ataque de epilepsia?
— Llámalo como le quieras decir, pero yo sé lo que vi. La mitad del colegio tiene miedo de Selene por creer que es una bruja satánica, pero yo sé que fue actuado a más no poder.