#3

-Hola- se escuchó la vos de papa

-Hola papi- dijimos todas a la ves

-Hola mis princesas- respondió el con una vos dulce que solo usa con nosotras

-Padre- dijo Maciel con un tono serio y muy respetuoso

-Hijo- respondió papa con el mismo tono… pero la seriedad no duro mucho y todos nos reímos por la forma de saludarse- ya me preguntaba yo porque aún no me habían llamado, esto es un nuevo record-

-Las chicas están preocupadas por ti- dijo Maciel

-Todo está bien, disfruten sus vacaciones si algo pasa yo las llamare de inmediato-

Maya- Esta bien papi-

Mia- Cuídate-

Melany- no salgas de casa-

Malina- Aumenta la seguridad en la manada-

Maciel- cualquier cosa nos llamas-

Yo- sin importar la hora-

Todas hablamos una después de la otra haciendo de que papa se riera por nuestra sobreprotección, pero él es lo único que nos queda, se despidió de nosotras y pude sentirme más tranquila al saber que está bien, y por sus rostros sé que las chicas piensan igual… dígannos locas pero nuestro mundo es peligroso y aún más por ser la manada que somos

-Bien chicas que hacemos- pregunto Melany

-Yo estoy aquí, porque dices chicas- refuto Maciel

-Somos mayoría por eso generalizamos, hasta papa lo hace- respondió Mia haciendo un gesto de aburrimiento

-Lo sé pero no es lindo que me digan chica siempre- dijo cruzándose de brazos

-Eres gay cuentas como chica, así que cállate a menos que tengas algo bueno que decir- respondo aburrida de esta charla pues la hemos tenido ya muchas veces y siempre acaba igual

-Las odio- respondió haciendo un puchero

-Awww él bebe se enojó- dijo Maya

-Solo soy el menor por unos cuantos minutos- respondió haciéndose el enojado

-Aun así eres el menor así que te aguantas- responde Malina con una sonrisa

-yo aún tengo sueño, así que me voy a dormir- digo subiendo las escaleras

Llego a mi habitación, tomo una ducha, me coloco un vestido semitransparente y aplico crema corporal, cierro las cortinas y me recuesto en mi cama para dormir lo que resta del día.

Despierto por unos toques en la puerta, todo está a oscuras, pero gracias a nuestra excelente visión voy hasta la puerta sin tropezar para abrirla

-Aremos una fogata en la playa, ¿Vienes?- pregunta Mia

-Claro-

Da media vuelta y se va, cierro la puerta y enciendo la luz, veo el reloj que está en mi mesa de noche, siete treinta de la noche, rayos dormí bastante, me coloco un traje de baño blanco  un vestido de playa del mismo color, voy descalza pues no necesito sandalias de playa, bajo las escaleras  no escucho a nadie en casa, salgo por la puerta trasera y escucho música y la risa de las chicas a lo lejos, camino hacia ellos todas visten de blanco, y sonrío por la conciencia

Hablamos por horas recordando nuestros días de niñez y juventud, siendo las sombras y todo lo que conlleva, también hablamos de cosas tribales y sin sentido, cantamos, bailamos, disfrutábamos cada segundo, la luna brillaba en todo su esplendor iluminado todo causando que el momento sea mágico

-Vamos a nadar- Propone Maya, todos asentimos y caminamos a la paya quitando nuestros vestidos de palaya, pero el sonido del teléfono de la casa al sonar llamo nuestra atención

-¿Quién puede ser a esta hora- pregunto Mia, pues casi es media noche

-¡oh por la diosa Luna!- exclámanos todos a la vez y corrimos a la casa, llegamos antes de que sonara por última vez gracias a nuestra velocidad, Maciel coloco él alta voz

-Hola- dijo un poco temeroso

-¿Maciel?- dijo una voz que reconocimos como la de Arnold, pero se escuchaba bastante agitado además del ruido a su alrededor- espero que las chicas estén contigo, escucha muy bien pues no tenemos tiempo… la manada fue atacada- la preocupación me invadió por completo- fue destruida por completo, el alfa gano tiempo para que los miembros de la manada escaparan… pero secuestraron al alfa- juro que escuche corazones romperse y uno de ellos es el mío- vuelvan inmediatamente, pero no como los hijos del alfa, necesitamos a las sombras, hay un infiltrado, para cuando vuelvan ya sabremos quien es y lo tendremos listo para que lo interroguen- la llamada termino y yo aun no puedo moverme, papa secuestrado, la manada destruida

-Nos vamos- dijo Maya con vos fuerte