Capítulo 4

Elara

Desperté de golpe, y corrí lo más rapido al salón principal con mi corazón latiendo con fuerza y Garrick detras. El caos me rodeaba, una pesadilla hecha realidad. El salón principal, antes un lugar de secretos y conspiraciones, ahora era un campo de batalla.

Oficiales armados, sus rostros fríos y decididos, llenaban la habitación. En el centro, una mujer de pelo corto, con una mirada gélida, observaba la escena con una calma aterradora. Liam y Sloane lloraban y gritaban, tratando de liberarse del agarre de los oficiales.

Intercambié una mirada de pánico con Garrick. Algo terrible estaba sucediendo.

—¿Qué está pasando? —preguntó Garrick, su voz temblando ligeramente.

—¡Se los están llevando! —gritó Liam, sus lágrimas corriendo por sus mejillas—. ¡A papá, a mamá!

La verdad me tocó como un puñetazo. Mis padres, los padres de Liam, todos habían sido descubiertos. Su traición, sus planos secretos, expuestos a la luz.

—No puede ser... —susurré, mis ojos llenos de incredulidad.

—¡Es una trampa! —gritó Garrick, su voz llena de rabia e impotencia.

La mujer de pelo corto se acercó a nosotros, su mirada penetrante.

—Lamento informarles que sus padres han sido arrestados por traición —dijo, su voz fría y sin emociones.

—¡Es mentira! —grité, tratando de liberarme del agarre de Garrick.

—¡Debemos hacer algo! —gritó Liam, luchando contra los oficiales.

Pero éramos impotentes. Los oficiales nos sujetaban con fuerza, impidiéndonos acercarnos a nuestros padres. La desesperación me invadió, un dolor punzante en el pecho. ¿Qué haríamos ahora? ¿Cómo podríamos sobrevivir a esto?

Garrick

Desperté de golpe,y viendo como Elara corria me levante y corrí destras de ella con el corazón latiendo con fuerza. Al salón principal, antes un lugar de reuniones secretas, ahora era un caos absoluto. Corrí hacia allí, y lo que vi me heló la sangre.

Oficiales armados, con rostros fríos y decididos, llenaban la habitación. En el centro, una mujer de pelo corto, con una mirada gélida, observaba la escena con una calma que me dio escalofríos. Liam y Sloane lloraban y gritaban, tratando de liberarse del agarre de los oficiales.

Intercambié una mirada de pánico con Elara. Algo terrible estaba sucediendo.

—¿Qué está pasando? —pregunté, mi voz temblando ligeramente.

—¡Se los están llevando! —gritó Liam, sus lágrimas corriendo por sus mejillas—. ¡A papá, a mamá!

La verdad me tocó como un mazazo. Mis padres, los padres de Liam, todos habían sido descubiertos. Su traición, sus planos secretos, expuestos a la luz.

—No puede ser... —susurré, mis ojos llenos de incredulidad.

—¡Es una trampa! —grité, sintiendo la rabia y la impotencia crecer en mi interior.

La mujer de pelo corto se acercó a nosotros, su mirada penetrante.

—Lamento informarles que sus padres han sido arrestados por traición —dijo, su voz fría y sin emociones.

—¡Es mentira! —gritó Elara, tratando de liberarse de mi agarre.

—¡Debemos hacer algo! —gritó Liam, luchando contra los oficiales.

Pero éramos impotentes. Los oficiales nos sujetaban con fuerza, impidiéndonos acercarnos a nuestros padres. La desesperación me invadió, un nudo en la garganta. ¿Qué haríamos ahora? ¿Cómo podríamos sobrevivir a esto?