Pues entonces mátame. Es mejor morir en el anochecer de la libertad que estar vivo en el amanecer de la tiranía. Ojalá el Rey Brujo me conceda mi última voluntad: que mi espíritu permanezca lo suficiente en este lugar para reírme cuando tu Imperio decadente y sin fe se desmorone por fin..... La muerte les llegara, y mi risa retumbara en sus cielos ennegrecidos... Cuando nuestro padre retorne todos morirán, y tu Leblanc, conocerás el significado del terror.
Nevathae.
fiel seguidor del Rey Brujo,momentos antes de ser ejecutado por los aliados de Leblanc.
No existe señal más clara de deterioro en un país que ver cómo se desprecia su religión y el fervor de sus seguidores.
NIKOLLO.
antiguo filósofo de Piltover.
Parte I
Falso Imperio.
¿Que pasaría si viera Noxus a arder? ¿Que ocurriría con sus poderosos muros? ¿Se escribirían historias? ¿Odas? ¿Poemas? No, la verdad que no. Quizás abría una especulación vaga, que después eclipsase con el derrumbamiento de un Imperio...... Esa es justo la historia de los Portadores de la Verdad..... Yo estaba ahí.... Yo estaba ahí el día en el que el Imperio nos traiciono, a nosotros que eramos mas leales... Si, lo recuerdo, lo recuerdo como si fuera ayer.
Recuerdo el día del juicio Final.
¿Te lo puedes imaginar? ¿Te puedes imaginar como seria una invasión? ¿Te puedes imaginar como una lluvia de fuego cae sobre la ciudad que te vio nacer? No, claro que no puedes imaginartelo, como podrías imaginarlo.
No hablo de la guerra. No hablo del penetrante olor a sangre o el hedor químico procedente de las llamas producidas por una explosión. Olvídate del simple dolor producido por el combate en batalla y el asalto que supone una andanada de flechas, o de las aflicciones que los humanos infligen a otros humanos.
Hablo del juicio Final.
La ira de un Imperio que contempla los actos de toda una isla y al que aquella visión enfurece el alma. Invadido por el desagrado, envía a los noxianos para que lleven la condenación. Invadido por la rabia, siembra el cielo de fuego y hace llover la destrucción absoluta sobre los rostros vueltos hacia arriba de seis mil millones de almas.
Y ahora dime que puedes imaginar ver caer la muerte del cielo. Dime que puedes imaginar al propio cielo lanzar fuego contra la tierra que se extiende bajo tus pies, y que puedes ver una ciudad arder con tanta intensidad que su luz te arrebata la vista de los ojos mientras contemplas cómo muere y mientras sientes que las rocas te aplastan.
Noxus me quitó la vista, pero todavía soy capaz de iluminarte. Lo recuerdo todo con claridad. ¿Por qué no habría de hacerlo? Fue lo último que vi.
Vinieron a nosotros desde el mar, armados con acero oscuro y de fuego negro.
Se llamaban a sí mismos la Legión Trifariana.
Nosotros no los llamamos así. Mientras nos echaban de nuestros hogares, mientras aniquilaban a todos aquellos que se atrevían a enfrentarse a ellos, y mientras lanzaban la aniquilación contra todo aquello que habíamos construido…
Los llamabamos el "Falso Imperio".
Has venido a preguntarme cómo es posible que mi fe sobreviviera al Día del Juicio Final. Te contaré un secreto. Cuando los noxianos nos despedazaron, cuando los mares hirvieron y la tierra ardió, mi fe no murió. Fue entonces cuando comencé a creer.
Noxus era real, y nos odiaba.
Extracto del Peregrinaje, de Dannae Valantion.