Legalmente enamorados

CAPÍTULO 2

—James Thomas, acusado de asesinato en primer grado. Corre el riesgo de ir a la cárcel con una pena mínima de 40 años —exclamó el señor Craig mientras entraba a la habitación. Todos estábamos a espero de su llegada en la oficina.

—¿Cuáles son los detalles del caso? —Preguntó Chad.

Era un chico alto de pelo rizado, éste era castaño al igual que sus ojos. Nunca había tenido el placer de involucrarme con él, pero durante toda la carrera obtuvo la fama de ser extremadamente bueno en los caso analíticos y matemáticos.

—Lea usted misma señorita Smith —dijo el señor Craig mientras le daba un documento a Cassie y tomaba asiento en su escritorio.

—James Thomas, productor y director de la famosa saga de películas "El tirador", mató accidentalmente a la jefa de fotografía mientras probaba un arma con balas de salva. Las balas de salva se utilizan en la industria del cine para imitar la munición real, la razón por la que son tan convincentes es que son esencialmente balas reales modificadas. La jefa de fotografía María Escobar murió instantáneamente luego del impacto en su pecho —leyó Cassie—. ¿Entonces fue un homicidio involuntario? —preguntó ella.

—Touché —exclamó el señor Craig levantando su dedo índice.

—Entonces fue un acto accidental, no implicó un nivel criminal —escuché a Harry decir.

—Lo cuál significa que según el artículo 40 del código penal, la sentencia máxima podrían ser 10 años —dije.

—Ambos están en los correcto —Harry y yo cruzamos miradas—. Sin embargo, el esposo de María insiste en que fue intencional. Quiere que James tenga la pena máxima y le de 20 millones de dolares por daños.

—¿El señor Escobar tiene evidencia que sustenten sus palabras? —preguntó Chad.

—Tiene mensajes de texto entre su esposa y el señor James que prueban que habían tenido malentendidos en el pasado —se puso de pie—. Pero esto no afirma nada, necesito que investiguen toda la información concerniente al caso.

Parados frente a él, vestidos de manera formal solo afirmamos con la cabeza.

 

(...)
 

Unos minutos después de la breve introducción, fui al librero del señor Craig a buscar los libros de derecho penal que necesitaba para investigar este caso y me encontré con Harry.

—Necesito ese libro, ¿podrías dármelo? —le pregunté amablemente.

—¿Que? Tanto dinero y buenas calificaciones —sonrió—. Pero, ¿sin modales? —preguntó sarcásticamente mientras sostenía un libro de tapa dura en sus manos.

—¿Disculpa? —fruncí el ceño.

—Ni siquiera dijiste por favor —respondió con amabilidad.

Dejé salir un gran suspiro.

—Por favor, ¿podrías darme ese libro? Lo necesito. —dije.

—No —se limitó a decir sin gesticular, para luego caminar unos centímetros y sentarse en un sillón de cuero negro.

Que diablos le pasa. Me dice que le pida el libro con amabilidad para luego dejarme parada hablando sola. Era insoportable. No sabía como iba a aguantarmelo toda una temporada.

Me dirigí a la biblioteca del pueblo para  buscar un libro de derecho penal. Los libros en la casa del señor Craig eran limitados. Cassie me acompañó. Ella también tenía que hacer su propia investigación. A pesar de que eramos mejores amigas, eramos muy independientes.

—Sabes, el señor James fue arrestado. Eso quiere decir que si estamos en lo correcto, él fue arrestado erróneamente, por lo tanto, podría presentar cargos por esta razón —dijo Cassie sin levantar la mirada, hojeando un libro.

Salí de mis pensamientos y analicé su puntos por unos segundos para luego secundar su idea. Se veía concentrada y ansiosa. Su pelo rubio combinaba con la portada del libro que leía, era color azul al igual que sus ojos.

—Debemos irnos —cerré el libro—. El señor Craig nos va a presentar ante el señor James Thomas. 
 

(...)
 

Minutos después fuimos a la comisaría donde retenían al señor James para conocerlo.

—Señor Thomas, este es mi equipo. Ellos son quienes me estarán ayudando a llevar su caso —dijo Craig al entrar a la sala acompañado de James.

—Un placer señor Thomas, soy un gran admirador de su trabajo y de sus películas —exclamó Harry dando un paso al frente y estrechando su mano con la de él.

Rodeé los ojos.

—Encantado de conocerle —dijo Chad imitando el movimiento de Harry.

—Mucho gusto señor —musitó Cassie.

—¿Qué? —lanzó una carcajada—. No, no he cierto. Si te escuché. El placer es mío —bromeó James.

—Me alegro conocerlo señor Thomas —dije amablemente mientras tomaba su mano para agitarla.


 

———————————————–———

¡Hola! Espero que te haya gustado este capítulo. ¿Que te pareció? Muchas gracias por leerme y elegirme para sacarte de este mundo aburrido, lo aprecio con todo mi corazón. ¡Un beso! (recuerda que actualizo todos los días)

 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.