CAPÍTULO XXV "El huevo de Dragón-Parte 3" (Sin editar)

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Legendhill, año 1946

Ya en el hospital Robert y Elizabeth se encuentran sorpresivamente con Valentín y corrieron a saludarlo, Valentín con un poco de recelo los miro algo confundido, notaron que su ropa estaba en muy mal estado y se notaba que últimamente no había comido bien, ya no tenía el pergamino y su mirada estaba un poco más dispersa de lo normal, lo tomaron y lo llevaron a una de las salas del hospital y le preguntaron cómo es que había llegado hay, pero, Valentín solo los miraba sin decir una palabra en evidente estado de shock, Robert se quedó con Valentín mientras Elizabeth bajaba a la morgue del hospital, entre las frías habitaciones de hospital Elizabeth debía encontrar el cuerpo perfecto para su hermana, ya había soñado con él, al igual que sabía qué hace unos dias un grupo de personas había destruido la casa de los Anderson y que en ese incidente hubieron bajas de brujas poderosas, en aquel sueño logro divisar algunas pistas importantes, pero no quiso alarmar al grupo y guardo silencio. Ya en la sala de autopsias Elizabeth camino lentamente, el olor a muerte se hizo cada vez más intenso, cientos de espíritus comenzaron a acosar a Elizabeth para lograr comunicarse con ella, ella camino directo al lugar que había visto en su sueño, aquella mujer morena de pelo crespo con tatuajes en el cuerpo era perfecta para personificar a su hermana, pues la eligió mientras Robert aun intentaba cruzar palabras con un perdido Valentín, Elizabeth mando un mensaje a Robert y le dijo que bajara a la morgue, que ya había encontrado el cuerpo perfecto y que ahora debían ver como robárselo de ahí, Robert siempre fue astuto por lo que utilizo un hechizo de invisibilidad que les permitiría salir de ahí sin problemas y de esa manera poder rescatar a su hija, salieron con el cuerpo y se dirigieron nuevamente a la cueva desde donde habían llegado, al estar de vuelta Katrina noto que Valentín tenía un problema, por lo que le sirvió un café que Valentín ni siquiera miro, él era como un muerto viviente, caminando lentamente por las paredes de aquella cueva mientras Andrew y el vampiro Ian volvían con el alimento para la semana, Elizabeth preparaba lenta y confiadamente aquel lugar donde se realizaría el conjuro para devolver el alma de Annia a un cuerpo, cuerpo que fue elegido por los ancestros a través de un sueño de Elizabeth, Valentín seguía muy raro, por lo que mencionaron que debía ir a descansar y lo llevaron a una de las rusticas habitaciones de la cueva, por desgracia nunca sospecharon que aquel Valentín, no era nada más, ni nada menos, que su hermano gemelo Darío.

Así dieron vueltas y vueltas por el túnel entre el tiempo y el espacio, Emriss había tomado la decisión de conocer a su padre biológico en un pestañeo, no sabía la difícil decisión que tendría que tomar más adelante, menos aún donde estaban en ese momento, no sabía que había ayudado de cierta forma a forjar su destino y el de aquellos que lo rodean.

6 días después del ataque a Safira.

Darío llego al pueblo de Salem, estando allí convoco a poderosas criaturas sobrenaturales, incluyendo a brujas, brujos, vampiros, hombres lobo y mundanos con grandes habilidades especiales, ofreciéndoles poder y riqueza a cambio de sus servicios, los que le permitían a Diario fortalecer a su ejército de destrucción, enfocado en eliminar al heredero de la profecía del coven de la media luna, la que afectaba directamente a la familia Clutterbuck y los dejaba fuera del libro de la sabiduría y la magia, desterrados para siempre en la oscuridad y el mismo dia logra llegar todos estos seres a Legendhill.

Luego de que Emriss y Kendra se fueran la noche del ataque a Safira y viajaran en aquel bucle hacia la piedra de luna con la Hamadríade, pasaron 6 dias para su regreso, la primera parada al salir de la casa de Kendra fue la mansión Anderson, en busca de Valentín, Kendra no sentía la magia que normalmente rodeaba el lugar, era como que hubiesen eliminado los residuos de magia de sus amigos, ella y Emriss buscaron incesantemente al joven vampiro por todo el lugar y se percataron de que no estaba, había desaparecido y Darío Anderson le buscaba para terminar con lo que en 1837 había comenzado, el pergamino aún no se había abierto, pues Kendra tenía una conexión especial con la magia en el aire y no la sentía, y no sabía que aquel trozo de papel desapareció con Valentín sin dejar un rastro. En un momento Emriss y Kendra se percataron de la presencia del hermano de Valentín a las afueras de la mansión, Darío ataco primero esperando que su buen hermano apareciera, mientras que Emriss y Kendra se refugiaban dentro, mientras Darío destruía todo fuera, Él y todo su clan estaban fuera de la mansión aguardando que las personas dentro de la casa se rindieran, Darío no sabía que el pergamino aun no podía ser leído y dio la orden de quemar la mansión a los brujos, lobos y vampiros que acudieron a su llamado en Salem, el clan de los Clutterbuck y los Morphy trabajaban junto a Darío y no dudaron en prenderle fuego al patrimonio de los Anderson, estando los chicos dentro, Kendra conjuro un campo de fuerza mientras Emriss custodiaba aquel huevo de dragón perteneciente a la orden y que por error le habían arrebatado a Aiden Duffy, era raro, nadie sabía el valor incalculable de aquel fósil y aun así lo protegían como un brujo a su familiar, Darío reventó las ventanas a puñetazos, su poder aun no era el óptimo para traspasar un hechizo de protección de bruja, por lo que las Clutterbuck tomados de las manos conjuraron un hechizo global, para evitar que Emriss y Kendra salieran físicamente de la propiedad, Emriss aun no recuperaba la memoria a un cien por cien, por lo que pequeños destellos de recuerdos iban y venían en su mente, la que inconscientemente conjuraba hechizos que salían de la varita de roble blanco que encontró en la regresión, de la que no sabía la procedencia ni quien era el dueño, y así sin pensar lograba desarmar a los brujos de los Clutterbuck, mientras Kendra oponía resistencia a la fuerza y agilidad de los lobos con hechizos que salían desde sus manos en dirección a las bestias, en un momento aquel huevo resbalo de las manos de Emriss, el que sin dudarlo lo teletransporto a otro lugar sin saber aun como lo había hecho, Kendra en medio de la acción felicito una vez más a Emriss, el que en un acto reflejo cambio su vestimenta a una túnica negra, como aquel warlock que en el primer bucle de tiempo habían visto, Darío entro a la mansión y encontró la forma de llegar hasta donde Emriss y Kendra se resguardaban, comenzó a golpear la puerta, mientras el humo hacía difícil la labor de Kendra y Emriss que se ahogaban con el paso de los minutos, el gas de la cocina estaba a punto de ser alcanzado por las llamas, Darío estaba enfermo de poder, Kendra debilitada comenzó a perder el conocimiento, Emriss tuvo una idea que los sacaría de ahí, pero, perderían la primera batalla sin haberla empezado, Emriss tomo la mano ya inconsciente de Kendra y sacándose su medallón lo amarro en aquella varita, en un momento todo lo que estaba cerca de ellos desapareció y entraron a un vacío en el cual no existía el peso, alrededor de Emriss diversas esferas giraban mostrando etapas de la historia de su vida, mientras Kendra inconsciente no podía ayudarlo para tomar la decisión, en muchas de estas esferas él se veía feliz siendo un niño, mientras que en otras observaba el cariño que su madre y padre le brindaron de pequeño, en un momento una voz entro en la mente de Emriss y le dijo.