Capítulo 1
Esa puta zorra
14 de febrero de 2004 14:30pm Barcelona
Turu Turu Turu!
Era el teléfono de Alex que sonaba mientras él conducía
- Tío, Tom como vas?
- Nada tío, que llevamos casi un año sin hablar. - resalto él.
- Ya ves.
- Y como va todo? - pregunto descaradamente.
- Peor que la mierda
- Por?
- ¿Recuerdas a Laura?
- Si, tu mujer.
- Ya no.
- ¿Por qué? Si hacéis una gran pareja juntos, seguro que os podéis recon…
- …No creo, ya que yo la dejé. La muy zorra llevaba tres meses tirándose a un abogado ricachón.
- Y… como lo sabes?
- Ya ves, me los encontré después de dejar a la niña en repaso e ir a comprar, supongo que llegué antes de lo esperado - se explicó él.
- Joder tío, pues vaya mierda.
- Encima la sinvergüenza me culpa por su aventura.
- Me cago en la puta. Y qué pasó después, la niña como se lo ha tomado?
- Pues ni puta idea. Perdí el juicio.
- ¿Como?
- No me dejan verla.
- Pero…?
- Los hijos de puta del servicio social consideran que soy incapaz de cuidar adecuadamente a una niña de esa edad. Además, la zorra me lo quitó todo.
- ¿Como?
- Digamos que en estos últimos tres meses me empezó a insistir descaradamente que usaramos cuentas compartidas, y yo como el bobo que estoy hecho, lo hice. Por eso no pude pagarme un buen abogado y me tocó uno que un poco más y se piensa que matar es legal.
- Que zorra!
- Ya - dijo Alex mientras sollozaba.
- ¿Estas llorando?
- No.
- Tío, ella no se merece tus lagrimas.
- Lo se, lo se.
- Bueno…
- Venga tío…
- ¿Estás bien como para que cuelgue?
- Si, si, no le des más vueltas, lo hecho, hecho está - dijo Alex para despreocuparlo.
- No necesitas dinero ni nada?
- No, ahora estoy ahorrando para reabrir el caso y recuperar a mi hija.
- Anda, pues mucha suerte, recuerda que si pasa algo me puedes llamar.
- Gracias, lo tendré en cuenta.
- Ya hablaremos.
- De Acuerdo, adiós.
Trás esa emotiva conversación, Alex encendió su radio portátil para llegar hasta su casa tranquilo. Sonaba “Don’t stop me now”.
El camino se hizo un instante grácias a la música.
Ya en casa Alex, había un hombre con un traje esperándolo.
- ¿Usted es Alex Sanchez (apellido)?
- Si, ¿porque?
- Me envían a darle esto.
- ¿Quienes?
- Si no lo sabe, lo descubrirá.
- ¿Como?
El hombre se montó en su moto y se fue. Alex abrió el sobre, el cual decía:
40.000€
20/2/2004 12:00 am
Hospital de la esperanza (azotea)
Alex no comprendía el porqué de la carta, pero decide acudir, para poder recuperar a su hija. Él todavía no sabe ni mucho menos lo que se le vendrá encima.