Libro 2. No te dije adiós, el diario de Susan

14. Terapia II

Terapia II 🤍
 


Gary me ha llamado está mañana, antes de salir de casa, su madre, la Sra. Bermúdez vendrá está tarde a recoger a Mathias, quiere conocer a la mujer culpable de que su hijo ya no esté tanto tiempo en casa, bueno, al menos así lo ha dicho Gary "Mi madre quiere conocerte, dice que quiere saber quién es la culpable de tenerme tan distraído, sonriendo por las mañanas, cantando por las tardes, y con tanto tiempo ausente de casa, estás en problemas señorita" me hizo reír mucho, la verdad. Aunque no miento, estoy nerviosa, completamente de punta los nervios, cómo es que esa señora me pone de esta manera, me la he pasado desde que llamo pensando, en como presentarme, no quiero verme distraída y que piense que soy una mal educada, eso jamás. Mis padres han hecho un buen trabajo, si no, que lo diga mi madrina.

Ahora mismo me siento como cuando tenía 16 años, que llegue aquella noche tarde a casa debido a la lluvia, llegue con el agua que escurría hasta de mis orejas, papá y mamá se molestaron tanto, juro que nunca antes y luego de eso los había visto así, querían conocer al joven que para ese entonces fue mi primer novio, sonrío al recordar, la verdad esa noche no pude dormir, no quería ni que llegara el día siguiente, estaba tan nerviosa, justo como lo estoy ahora.

-Susan, cariño.

-Madrina, dime.

-Cariño deja de morder ese lápiz, mira como lo llevas ¿Qué es lo que te tiene tan nerviosa?

-¿Por qué sabes que estoy nerviosa?

-Te pasa lo mismo que a tu madre, cada vez que la atacaban los nervios, buscaba algo que pudiera morder. Ahora dime, ¿sucede algo?

-Es la madre de Gary, viene por Mathias y quiere conocerme.

-Cariño -toma mis manos y me quita el lápiz, al mirar como lo he dejado mordisqueado por todos lados, acepto, es un mal habito- Eres una mujer inteligente, sensible, además de muy guapa, y ya sus dos hijos te adoran, le vas a encantar a esa señora.

-Sé que no debería ponerme así, pero quien le explica eso a mi cabeza, a este corazón que late de la manera más dramática que consiguió hacer, y por supuesto a mis manos temblando.

-Todo estará bien cariño. Mientras ve al cuarto de maternal, Mathias no quiere dormir.

Sonrío, ese pequeño cabeza dura y consentido, le gusta que lo mimen a la hora de ir a dormir, eso habla de lo muy consentido que lo tienen en su casa, y no los culpo, es el más pequeño, si tuviera un hermanito tan pequeño como él, fuera igual de consentido o hasta más, con tantas mujeres a su alrededor.

-Ire con él, yo me ocupo madrina.

Llegó al cuarto de maternal, y ahí está el pequeño cabeza dura, me encanta verlo ahí con su peluche de dragón y su dedo pulgar en la boca, esperando que yo llegue a mimarlo, a consentirlo entre mis brazos, me ve y al instante viene rápido a buscarme.

-Hola guapo.

Sonríe, le encanta que le diga guapo. Pequeño coqueto.

Lo tomo entre mis brazos y lo acomo entre ellos y mi pecho para arruncharlo, no suelta por nada del mundo su dragón, dice que se lo dió su hermano Gregory, seguro lo trajo de uno de sus viajes.

-Eso es, duerme mi niño, duerme.

Amo esto, verlo dormir, se parece tanto a Gary.

. . .
 


"Tic Tac - Tic Tac"
El reloj de pared.

-Desde que papá murió, es como si le huyera a todo aquello que puede lastimarme, a todo aquello que pueda abrir mis heridas, el amor era una de las cosas que más me negaba... Es que el amor si te destruye, aunque no es solo eso, busco complacer a los demás, le tengo miedo al rechazo, tengo miedo a estar sola, y a la vez a que alguien me acompañe, se da cuenta lo contradictorio que es eso.

-Tienes miedo, Susan, y en algún momento de nuestras vidas todos lo padecemos.

¿miedo? Toda nuestra vida hemos escuchado mencionar esa palabra, la hemos sentido, no creo que haya alguien caminando por las calles que jamás lo haya experimentado. Nacemos temiendo algo, o mejor dicho, desde pequeños nuestros mismos padres nos enseñan a sentirlo. Si te subes ahí, te caerás. Entonces empezamos a temerle a las alturas, si corres rápido o andas rápido en la bici te golpearas, y le agarramos miedo a la velocidad, no lo toques porque muerde, en la orilla ya que te hundes, y no sabes. No sabes, no sabes. Y la idea como sociedad es que aprendas a tener miedo, y así evitan que hagas algunas cosas.

- ¿Está bien sentir miedo? Es eso lo que me quiere decir.

-Es natural sentirlo, solo que no debes dejar que te controle.

Y de adulto te quieren enseñar todo lo contrario, te quieren cambiar el patrón. Si eres niño y sientes miedo, escúchalo, te ayudará a evitar problemas. Si eres adulto, y tienes miedo debes afrontarlo, si huyes, eres un cobarde.

-Pues ahora me controla, aunque...

-¿Aunque? Dime, Susan.

-¿El amor ayuda, no?

-El amor nos hace ver las cosas de la mejor manera, si, si ayuda.

Tic Tac - Tic Tac. 
El reloj en la pared.
Me causa ansiedad su ruido, tan molesto, no debería ni estar en cuarto de terapia, al menos ya ha acabado.

Luego de salir de Terapia me he antojado de caminar e ir a la cafetería de Don Pacco, hace rato no paso por ahí y me hace falta sus tazas de cacao, aunque está vez no iré por una caliente, iré por un vaso de malteada bien fría de puro cacao, con fresas y mucha espuma, que rico.

Caminando unas cuantas calles recuerdo mi impresión al ver a la sra. Bermúdez está tarde, aunque me ha dicho que la llamé Leonor, es una mujer tan agradable y sencilla, aunque su ropa diga todo lo contrario, es la elegancia en persona, tacones altos, vestido hasta por debajo de las rodillas y un gaban tan fino. Los hermanos Bermúdez no se parecen tanto a ella, quizás al padre. Bueno, al tal Gregory no lo conozco aún, quizás él si sea como su madre.

Me ha invitado a cenar a su casa de la manera más cordial y amable, me ha pasado una pequeña invitación donde deja la dirección y la hora exacta, no sabía que aún se hicieran este tipo de cosas, digo, no es una invitación a un cumpleaños, una boda o un bautizo, es a cenar, y me ha dejado una invitación, ¡por Dios! Será que van más personas y por eso la invitación, ¿cómo se supone que deba vestir? que nervios.



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En el texto hay: diario, romance, drama

Editado: 16.03.2023

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