Capítulo 34: Preludio de una masacre anunciada Parte 3

Mientras el daño ya está hecho en Buenos Aires, con varios heridos entre ellos Estela y Octavio del gremio de cazadores recién creador, Victory, en Santiago de Chile se produce una reunión muy importante entre maestros de los gremios más importantes de Latinoamérica, para decidir el curso de una de las expediciones más importantes de la historia.

La reunión se encuentra precedida por Gonzalo Ramírez, maestro de Fuerza Roja, uno de los gremios más fuertes después de Brasil en Sudamérica. Cada maestro es acompañado por un cazador o su vice maestro, a lo largo de una mesa en el palacio presidencial de la capital donde discutirán como se afrontará la situación con la misión de alcance histórico para los cazadores:

Gonzalo: “Bienvenidos sean todos. Espero que sus respectivos viajes hayan sido cómodos, a algunos ya los conozco y es un placer volverlos a ver, y a otros es la primera vez por lo que también es un gran placer conocerlos, por favor tomen asiento”

Una vez que todos los presentes se ponen cómodos en sus sillas, mozos entran al salón para servir té y galletas, algunos cazadores piden de preferencia cerveza y otros, agua, mientras se aprovecha el tiempo para hablar de algo que no sea relacionado al oficio de cazador.

Gonzalo observa a cada uno de los invitados, percatándose de que faltan dos gremios y curiosamente son de los más numerosos de la región, ambos de México:

Gonzalo: “Al parecer los gremios Whiplash y Jaguares no se han presentado”

Josué Baquedano: “Evidentemente les cuesta permanecer en la multitud, jajaja” – bromea a la vista de todos, dejando una mala impresión de su gremio

Dorian Layme: “Josué, ten más respeto por esos gremios, son los que contienen al gremio más fuerte del mundo”

Josué: “¿Disculpa? Hablo con el jefe, no contigo. Gonzalo, ve directo al grano ¿quieres? Mi tiempo es valioso, ahora que los yankis tienen interés en las mazmorras del caribe”

Dorian: “Si que eres despreciable”

Josué: “Si, si, di lo que quieras”

Gonzalo: “Ya, dejen de pelear, esto es importante”

La discusión entre maestros de otros gremios resulta ser algo normal, siempre en términos de cortesía los cazadores nunca entablan al comienzo, una conversación civilizada, por lo que en lugar de saludarse acaban por maldecirse o burlarse de alguien. Claro está que no es en su mayoría, muy pocos son los que no acatan la educación y buena intensión.

Gonzalo se toma de la cabeza, al recordar lo mal que se lleva el maestro del gremio boliviano y el cubano, pero la reunión debe continuar, por lo que continua la reunión:

Gonzalo: “Este 27 de octubre se cumplen diez años desde que el portal en la Antártida se ha abierto, y como algunos saben, se han hecho varias misiones, acabando todas en fracasos monumentales don la muerte de cientos de cazadores” – les cuenta a todos los presentes, pero también informándole a los más jóvenes y que no conocen la historia

Michael López: “Esas misiones fueron más que un horrible fracaso, desde hace 10 años que no podemos entrar al continente, y lo que es peor, nuestras fuerzas perdieron más del 90% de sus unidades. Si existe algo peor que fracaso, entonces eso significa lo que ocurrió allá” – interrumpe contando su experiencia y como aun las muertes no han sido olvidadas en su país

Gonzalo: “Gracias por tus palabras, maestro del gremio peruano de Justicia Inca, Michael”

Michael: “Por supuesto, agradézcanme luego, ejem ejem”

Todos los demás cazadores miran la actitud tan extravagante de Michael, casi con rechazo al ver tan poco serio y buscando ser el centro de atención, pero su experiencia habla por sí mismo, y lo que ha vivido en las tantas misiones en la Antártida ha causado una gran carga en su espalda desde que regreso a su gremio luego del desastre:

Dorian: “Disculpen” – levanta la mano

Gonzalo: “Cedo la palabra al maestro del gremio boliviano de Gracia de la Paz, Dorian”

Dorian: “Gracias Gonzalo. Como sabrán, no hace mucho que soy maestro de mi gremio, y soy consciente de que me falta mucho por aprender, y honestamente ha escuchado cosas horribles sobre la mazmorra helada que existe en la Antártida. No tengo miedo, en lo absoluto, y quiero saber todo lo que sepan sobre las misiones, deseo ayudar en todo lo que pueda”

Gonzalo: “Buenas palabra Dorian. Y todo lo que sabemos estará aquí en el día de hoy, aunque somos pocos los que estuvimos al menos una vez en la misión y…” – se detiene al ver que, en el fondo de la mesa, una delicada mano con uñas largas pintadas de color rojo es alzada sobre las cabezas – “Si, señorita Krismailyn, maestra del gremio panameño de Tauro”

Krismailyn: “Al igual que Gonzalo y Michael, yo estuve en la última misión a la mazmorra helada, y ciertamente me preocupa que no estemos lo suficientemente preocupados para afrontar una nueva expedición”