Capítulo 135: Los planes de la iglesia

En el pequeño puedo de Falcognana a varios kilómetros de Roma, el grupo de Lucas se refugia en un pequeño hotel a la esperar de poder contactar a alguno del gremio.

Varias horas pasaron desde que salieron a recorrer las calles y fueron apresados sin justificación. El agotamiento y el hambre causan que se debiliten y la angustia de no poder contactar a nadie los mantiene a la deriva. Claustro propone regresar, pero Lucas rechaza eso porque indudablemente serian apresados de nuevo y quizás no vuelvan a ver la luz del sol con la intención de que no escapen de nuevo.

Daniel apoya lo que dice Lucas al igual que Macarena, quien está muy asustada y no es para menos, resulta ser su segunda misión después de la Antártida y aún sigue siendo una novata.

Octavio descansa junto a una ventana cerrada y con las cortinas cubriendo la vista. En un instante siente como algo camina en su brazo, una pequeña araña de extraña forma que se le queda viendo. Levanta su mano para aplastarla, pero mirándola detenidamente la encuentra realmente extraña, como si fuera una especia inusual en el territorio o ese mundo. Sus ojos son rojos y una extraña figura se adorna en su abdomen de color blanco. ¿Venenosa? ¿será un monstruo? Son algunas de las preguntas que se hace Octavio hasta que recuerda algo muy importante.

Así que se dirige a sus compañeros con cierto entusiasmo:

Octavio: “Prepárense”

Lucas: “¿Prepararnos? ¿para qué?”

Octavio: “Esto” —les muestra la araña que está en su brazo sin moverse ni nada

Claustro: “¿Una araña? ¿y eso que tiene como para que nos preparemos?”

Macarena: “No se mueve, pero aun así está viva…espera un segundo ¿podrá ser que es…?”

Octavio: “Apartémonos del centro”

Un portal se abre y allí salen los familiares de Martín, que son recibidos con cálidos abrazos y lágrimas al verlos después de mucho tiempo. Macarena salta para abrazar a su amigo Lorkamos. Desde que ambos se conocieron no pasaron mucho tiempo separados por lo que estar varios días sin verse les resultó insoportable y hasta imperdonable.

Octavio le devuelve una de sus hijas a Arakneida, y sonriendo ella le acaricia la cabeza al joven mientras lo felicita por darse cuenta de que posee espías de varias patas en todo el territorio y que constantemente le envían información para que el gremio puede vencer en sus misiones. A nadie la causa intriga ni malestar, todo lo que hace y hará la soberana del veneno es para defender a la humanidad y apoyar a su señor siempre que pueda y se le permita:

Arakneida: “Me alegro que estén todos bien, sobre todo tu Maca”

Octavio: “Sabes que me esfuerzo por protegerla junto con Lorkamos”

Arakneida: “Lo sé, por eso no me sorprende que estén bien”

Cromana: “¿También fueron apresados?”

Lucas: “Es una larga historia, pero en resumidas cuentas sí, nos apresaron sin siquiera darnos el motivo”

Daniel: “¿Saben que está ocurriendo aquí?”

Kargroot: “Creemos que todo esto fue para separar al gremio. Ustedes, nosotros, inclusive Julio y María también fueron separados”

Arakneida: “No podemos contactarnos con Martín y si no fuera por mis espías, jamás podríamos encontrarlos a ustedes. Esto es realmente extraño”

Octavio: “Hasta lo que sabemos, la iglesia tiene planeado algo desde hace tiempo y se notó por el nivel de su operación. Mantenerlos encerrados en un hotel todo el fin de semana. Apresarnos lejos del vaticano. ¿Saben dónde están Julio y María?”

Arakneida: “Según me informaron mis espías, fueron detenidos cuando buscaban a Martín y Estela. No pude siquiera comunicarme. No sabemos cómo están ellos cuatro, es realmente frustrante”

Macarena: “¿Creen que la iglesia necesite algo de Martín?” —dice de manera misteriosa

A nadie se le ha ocurrido que quizás la Iglesia pretende algo del mismo Martín y la situación presente es idónea para arrebatárselo fácilmente. Es decir, todo lo que viene sucediendo desde que arribaron al país los ha estado sofocando al punto de que nadie está relajado y por lo que han notado, sus niveles de poder mágico se han reducido considerablemente. Sospechan que algo relacionado a la marca imperial puede estar detrás:

Macarena: “¡Si ellos quieren hacer algo con Martín no podemos permitirlo!” —exclama preocupado por quien es considerado por ella como su hermano mayor

Arakneida: “Opino igual pero todavía no sabemos la naturaleza de las catacumbas de Roma. Por lo visto está protegido de todo y hay una fuerte tormenta de energía mágica que impide poder avanzar más allá de la puerta de madera. Salvo algún humano que sea mayor a rango S+”

Lorkamos: “Entonces ¿Qué hacemos?”

Lucas: “Irrumpir solo hará que haya problemas diplomáticos. Estos malnacidos supieron aprovechar eso desde el principio”