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Realizaré un paréntesis, en ese lapso de tiempo desde que no nos veíamos hablé con mi anterior ex, después de todo era más consciente de que no analice nuestra situación al terminar. Me disculpe y hablamos con normalidad, pero con el paso del tiempo, me di cuenta que ya no encasillada en su novia. Irónicamente comenzó a salirme con la charla de venir a mi casa, no le di alas nuestra conexión no era lo suficiente.
También uno de mis amigos se me declaró (no falta el que ve oportunidad al estar soltero) empezó hablándome de que los clicks con personas no era lo que yo creía, era imposible ver a alguien y sentir que estarían juntos; qué te enamorarías de esa persona al menos. Mi amigo me dijo que lo mejor era besar a esa persona y saber. Por supuesto, lo rechacé asqueada.
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El 11 de junio, nos volvimos a ver, irónicamente la chica que pasaba como zombie, volvió a saltar al escuchar el timbre y saber que “él” volvería a pasar por esa puerta. Tímidamente nos reímos de la situación tan extraña, pero esperada por mi parte, ese día recuerdo que hablamos de cómo nos había tratado el tiempo.
Con el tiempo sin aún saber lo que ocurriría dejando de vivir en el pasado, ambos dijimos que haríamos lo posible para estar juntos. Esta vez, antes de avanzar en la lluvia sostuve el paraguas. Mi decisión no hizo que me arrepintiera, podía volver a estar en sus brazos, hablar con él y jugar con él, disfrutar lo que amaba (su canal-su trabajo); a diferencia de antes, su calidez me embriagaba por completo, podía sentirlo en cada parte de mí.
Nos tocó replantear nuestro andar, pero fue divertido cómo parecíamos tan felices como antes. Cumplimos muchas cosas juntos y nos tocó pensar en más adelante, nuestra relación estaba mucho más estable, comenzando a disfrutar él uno del otro.
Pero, el pasado no es algo que puedas sacar tan fácilmente, cuando una persona te lastima eso se ve reflejado con el tiempo, nos pasó a los dos. A mi con mis traumas de abuso sexual y a él… será un misterio.
A pesar de eso, amé el tiempo de volver a empezar, trajo momentos nuevos a nuestra vida y ya, finalmente, avanzabamos a la par. El tiempo se acortaba con tantos deberes y viviendo en casas separadas, pero por lo menos nos veíamos una vez a la semana y pasábamos el tiempo con el otro, incluso en estos momentos, con un corazón herido veo es Miércoles y pienso en qué haremos el sábado.
No va al caso, hay que seguir con el relato.
El compromiso que tuvimos hizo que por fin estuviéramos comprometidos con el otro, sabía que casamiento sería una locura para nosotros, pero el compromiso demostraba que estábamos listos para seguir avanzando. Digamos que luego de pensar “nunca más usaré un anillo” pensaba “¿Qué clase de anillo será? ¿Será que lo presumiré todo el tiempo”, me hacía sentir risueña.
Entonces, nuestro compromiso o vivir juntos no pudo pasar. La situación actual en el país demandó más de nosotros, más de él. Me sentí una carga y de forma justa, realmente ser una estudiante y perseguidora de hobbies, te hace creer que eres una basura.
Continuará
Editado: 25.04.2024