Austin
No había llegado a tiempo, entre mi indecisión y el tráfico que había, llegué tarde al aeropuerto. Claro que estaba triste, dos de las personas más importantes en este momento se habían marchado a la otra punta del mundo sin haber tenido la oportunidad de desearles un buen viaje —aunque me costara costará asimilar su partida, sabía que era la mejor para ambos—.
Resignado y con toda la rabia que aguardaba en mi interior, puse en marcha el auto y salí del aeropuerto a toda velocidad. La suerte de ese instante, si es que se la puede llamar así, la autopista no se encontraba tan saturada; habían muy pocos autos circulando, eso me permitía descargar todo mi enojo en la carretera. Conducir sin límites de velocidad era la mejor forma de evitar pensar en lo que estaba sintiendo, sé que no puedo huir de la realidad pero al menos puedo evitar pensar en ella durante un rato.
A pesar de que aún era temprano ya habían pocos empleados en la Blue Diamond, entre sin ningún problema y fui a la barra —Kyle ya me había comentado que estaban en el bar y que podía ir, además me iba a esperar para tomarnos algo—. Lo saludé y me senté en uno de los taburetes que había delante de la barra, Kyle me sirvio un poco de Wisky, lo acepte sin pensarlo dos veces.
«Hace muchos meses rompí la promesa de no volver a beber ni una gota de alcohol, pero este año ha sido donde he roto todas mis promesa. Sí, me he llegado a sentir mal por haberlo hecho, pero… ¿de qué sirve sentir remordimiento, si las cosas ya están hechas?»
—¿Qué te ha puesto tan mal para que bebas de esa forma? —Kyle salió de detrás de la barra y vino a sentarse a mi lado, la botella de Whisky seguía encima de la barra.— La última vez que te vi así fue cuando nos contastes ha Logan y a mi tus sospechas.
—Se han ido —fueron las únicas palabras que pude formular—, las personas que en tan poco tiempo se han ganado un lugar en mi corazón se han marchao y no pude despedirme de ellos.
—Pero de seguro vendrán para vacaciones o algo, además como me has dicho ella tiene a toda su família aquí.
El Whisky iba haciéndose cada vez más presente entre nosotros, mientras intentaba olvidarme de todo lo que pasaba en ese instante, y para eso Kyle era la persona idónea. El tiempo se nos pasó volando entre alcohol y las peleas —o eso es de lo último que recuerdo.
El pub se empezaba a llenar con mucha rapidez, hacia un buen rato que Kyle me había dejado solo en la barra —según él porque tenía que atender algo muy importante—, así que me encontraba solo en la barra. La bartender se encargaba de escuchar mis penas, sentía pena por ella, porque de seguro cada día ha de soportar a algún borracho y las penas que les comparten.
—Sabes, te recomendaria que fueras a buscarla. Después de todos si esa chica es tan importante para tí haz algo para demostrarle tus sentimientos, aunque sea irte a Liverpool.
Ella tenía razón, si yo la quería a ella y a Liam, tenía que hacer algo para mostrarle mi interés; una idea pasó fugaz por mi mente, agarre el móvil y llamé a Jensen —el secretario de mi abuelo—.
“Mmmm...”
“Jen...sen, ne..ce..si...to el Jet.. —las palabras me salían muy lentas y me costaba mantener la coherencia— ee...ss ur..gent...”
“Claro que sí Austin, le llamaré por la mañana para confirmarle a que hora saldrá el vuelo”
Asentí con la cabeza y colgué la llamada. Mi atención volvió a la bartender, quien tenía dibujada una amplia sonrisa en su rostro.
—Espero que todo te salga bien con esa chica, por lo que me has comentado se nota que es muy importante en tu vida.
—Lo es.
La puerta de la habitación se abrió con brusquedad, haciendo que me sobresaltara; por impulso intente ponerme de pie, pero fracasa en intento así que acabé besando el frío suelo y con un tremendo dolor de trasero y espalda ―no puedo decir de cabeza me empezó a doler en el instante que me caí porque ya me dolía desde el primer instante que me desperté―. Las luces de la habitación se abrieron de la nada, dejándome ver a la castaña de mi hermana junto a mi mejor amigo.
―¡Es hora de despertarse dormilón! ―un gran chillido por parte de mi hermana fue lo que aumentó mi dolor de cabeza, me incorporé de seguida y me llevé las manos a la cabeza― No puedo creer que te hayas emborrachado, por Chelsy.
―¡No me grites! No ves que tengo resaca y tus gritos me producen más dolor.
―No seas tan cruel con tu hermana, ella solo se ha preocupado por ti ―Logan se encontraba enojado por cómo había tratado a April, pero es que no veo ni medio normal lo que han hecho. A pesar de que los dos son mi familia, especialmente April, no les iba a perdonar que se colaran en mi departamento y lo peor de todo que me despertaron de una forma tan brusca―. Si no hubiera sido por April, hubieras cometido una estupidez muy grande. Kyle me comentó que estabas por hacer un GRAN trato con uno de los hermanos Sorrentino, estoy demasiado seguro para decir que ese trato te hubiera jodido la vida o peor aún, te podía haber costado la misma vida.
―Deja de decir semejante...―me vi interrumpido por la llamada de mi móvil.
Contesté la llamada sin siquiera mirar quien era la persona que se encontraba en la otra línea.