Capítulo 47

Chelsy 

Me encontraba agotada, el viaje había sido demasiado largo pero no había dormido mucho porque estaba nerviosa por la universidad y todo lo que me podía esperar en mi nueva vida. Por lo contrario Liam desde hace un par de horas se encuentra durmiendo plácidamente en su cuna, estaba acostumbrada a tenerlo cerca, así que no se encontraba en mi planes que Liam durmiera en otra habitación completamente solo.

Con el insomnio apoderándose de mí le escribí a Erick, para preguntarle sobre el sobre que había guardado en mi maleta; no sé cuando lo hizo pero tenía tanta curiosidad por saber lo que aguardaba en su interior,no me aguantaba las ganas de abrirlo, pero no podía hacerlo porque segun la pequeña instrucción que había escrito ―pude adivinar que era él por su caligrafía, tiene una forma muy peculiar de terminar las “r”―.

“Antes de leer y ver lo que hay en el interior del sobre tenemos que hablar.”

Miré la hora en el móvil y reste la diferencia horaria para ver si lo podía llamar, viendo que para él aún era de día me decidí a marcarle. Salí de la habitación y me encaminé a la terraza, para no molestar a nadie mientras tenía la videollamada con mi amigo, tres pitidos después y al fin me contestó.

“¿Qué tal ha ido el viaje?”

“Agotador, pero que te puedo decir no es nada fácil viajar con un niño pequeño es muy duro.”

Una sutil pero cálida risa se escuchó al otro lado de la línea ―me encantaba verlo reír, es que lo hoyuelos que se le formaban eran únicos y adorables―, su risa era tan contagiosa que hasta yo me acabé riendo.

“Quería preguntarte por el sobre, me estoy muriendo de intriga por saber el contenido ―mi voz se asemejaba más a un suplica para que me spoileara―, sabés que no me gustan las sorpresas, así que estoy dando lo mejor de mi para no ir por el sobre y abrirlo” 

“Pues ves por el sobre, el portátil y los auriculares ―la intriga iba aumentaba con cada segundo que pasaba―. Te llamaré en 10 minutos, me falta un pequeño detalle. Recuerda que no puedes abrir el sobre, si lo haces la sorpresa quedará completamente arruinada.”

Los 10 minutos ya habían pasado, hace más de media hora, me encontraba en la terraza contemplando las vistas que me ofrecía de la ciudad. Hice uno de mis mayores esfuerzos para contenerme y no abrir el dichoso sobre, mi mano derecha pulsaba el botón de encender y apagar ―con la única intención de ver si tenía una notificación o alguna llamada por parte de Erick o de Austin―, y al no ver ninguna de esas dos cosas me enfurecia y a la misma vez me daba tristeza. Para evitar la tentación del sobre, encendí el portátil y empecé a buscar datos para un proyecto que se me había ocurrido en durante el vuelo; era algo de lo que no estaba segura pero si que me afectaba.

Me encontraba tan absorta en la búsqueda, que ni siquiera me había dado cuenta de que tenía dos videollamadas pérdidas por parte de Erick. Así que dejé el portátil de lado y le devolví la videollamada, no tardó mucho en contestar pero ahora los nervios se habían vuelto a hacer presente; de nuevo el contenido del sobre se apoderó de mi mente.

“Creí que te importaba saber lo que contienen el sobre, al menos que ya sepas lo que contiene ―su mirada era acusadora, pero a su vez me causaba ternura porque eran pocas veces que él ponía esa mirada conmigo―”.

“¡Claro que quiero saber su contenido! Aunque no me creas el sobre sigue completamente cerrado y se encuentra al lado de mi ―con la mano derecha cogí el sobre y se lo mostré, dando a entender que aún seguía intacto―, me distraje con una cosa que me vino a la mente y me olvide completamente de todo”

“Perdón por tardar tanto en llamar, me distraje con mis hermanos, esos dos diablillos se pusieron a discutir por una tontería y acabaron tirándose de los pelos ―no me podía imaginar esa escena, los mellizos eran tan unidos que pocas veces los podíamos ver discutir pero cuando eso llegaba a pasar parecía que se iba a armar una Tercera Guerra Mundial―. Todo empezó porque a Sasha le desapareció su libro favorita y culpaba a Greg por ello, así que como venganza Sasha le quitó su juguete preferido y empezó el chantajearlo con que le iba a hacer daño al juguete sino le devolvía su libro favorito. 

“Madre mía, no sé cómo podéis estar en medio de esos dos cuando se pelean, parece que el fin de mundo está apunto de llegar”

Yo no podría imaginarme en un futuro donde mis hijos se pelearán, y eso que apenas tengo uno, pero en el futuro me gustaría tener dos más.

“Ya ves, es como estar en un campo de batalla ―ambos nos reímos de eso, porque sabíamos que era la pura verdad. Alguna vez pasé un día entero con ellos y vamos, viví una batalla campal por una tonteria―. Bueno, ahora ya puedes abrir el sobre.”

Hice lo que Erick me pidió, agarré el sobre y lo empecé abrir con mucha cautela ―no quería estropearlo porque me parecía muy lindo y una gran recuerdo que podría guardar―. Me sorprendí cuando vi una carta y un pendrive.

“La carta es mejor que la leas a solas, es algo íntimo aunque me gustaría ver tu reacción prefiero que lo leas a solas ―asentí con la cabeza y dejé el sobre y la carta a mi izquierda―. Ahora sí, has de mirar lo que contiene el pendrive, esperamos que te guste.”

Hice lo que me pidió, habían muchos documentos y un video; hice un click en el video ya que los demás documentos prefería mirarlos en privado.