Cap 73: La Cumbre

Narrador omnisciente .

​—¿Ya firmaron los comunicados? —preguntó Alexander, regresando a su despacho. En el escritorio, Dae-Hyun y Félix, que habían llegado hacía un rato, ya estaban terminando de estampar sus sellos.

​—Todo listo —confirmó Félix, deslizando el último documento. —Las firmas de los cuatro están en orden.

​—Llévense uno extra para que se lo entreguen a Zhao Xia. El lugar y la hora ya fueron acordados —informó Gabriel, acercándose con una tablet. —Deben verse en una hora en el piso ejecutivo del Hotel Impery.

​—Bien. Entonces iremos ya —dijo Oliver, ajustándose el puño de la camisa.

Se había arreglado bajo las estrictas órdenes de Dae-Hyun, quien le había insistido: "Ahora representas a la Umbra. Vístete para imponer respeto".

Llevaba un traje hecho a medida, pulcro y oscuro, que ocultaba a medias el emblema de la organización en su antebrazo. El cambio de vestuario, de guardaespaldas a Líder, era drástico y le daba un aura imponente.

​—Por cierto, Alex... ¿Alison sigue enojada? —preguntó Oliver, su voz teñida de preocupación.

​—No. Ya se tranquilizó —respondió Alexander, forzando una sonrisa. —Está en la habitación. Tranquilo, ya pasó lo peor.

​—Qué bueno —soltó Oliver un profundo suspiro de alivio.

​Los cinco salieron del despacho, dirigiéndose a la salida de la mansión. Mientras caminaban por el gran vestíbulo, se encontraron con Hana.

​—Hola, chicos. ¿A dónde van tan elegantes? —preguntó Hana, curiosa. Su sonrisa se amplió al mirar a Oliver.

​—¿A ti qué te importa, florecita? —la molestó Dae-Hyun con cariño, despeinándole el cabello.

​—¡Oppa! No hagas eso —lo regañó ella, aplanándose el pelo.

​Hana regresó su atención a Oliver, quien la miraba con una sonrisa.

​—Te ves... muy guapo. Te sienta bien ese traje—dijo Hana, inclinando la cabeza con una sonrisa sincera.—¿A qué de debe?

​Oliver sonrió timido pero despues se puso nervioso.

¿Cómo le diria que ahora era el tercero al mando?.

—Gracias, nena. Esto es culpa de tu hermano —murmuró. —Dae-Hyun dijo que ahora debo estar a la moda...

Dijo inseguro.

—Pero si te arreglas bien —dijo.

—Ya ya ya florecita.

—Tu shh. Aún estoy molesta contigo— Hana volvio a recordar que estaba molesta con él.

Por un momento lo habia olvidado.

—Iremos a una reunión. Regresamos luego.

​—Bien. Vayan con cuidado —respondió ella, despidiéndose con un gesto. Luego se dirigió a la habitación de Estrella.

Una vez que estuvieron en la entrada de la mansión, un auto negro y blindado se detuvo. Artemis bajó la ventanilla, su rostro inmutable. Su rol se ampliaba drásticamente: sería el chofer, guardaespaldas principal, y a partir de ese instante, la sombra designada de Oliver en su nueva posición.

​La cúpula de la Umbra mantenía una estructura de soporte dual, esencial para operar tanto en la luz corporativa como en la sombra.

​Alexander Williams, contaba con Félix Larey como su Mano Derecha Operacional, el ejecutor principal de las órdenes de alto riesgo, responsable directo de la seguridad y la estrategia pura de la organización.

​Jung Dae-Hyun, el Segundo al Mando, tenía a Gabriel como su Mano Derecha Administrativa. La función de Gabriel era ser el cerebro financiero y logístico que ligaba la fachada legal de la Umbra con sus operaciones clandestinas, una labor invisible pero fundamental.

Gabriel era el principal gestor y figura de autoridad operativa de las empresas fachada: CapitalElite Investments (CEI) y ShadowCorp. Si bien ostentaba el título formal de Asistente, sus responsabilidades iban mucho más allá. De hecho, tanto Alexander como Dae-Hyun habían insistido en otorgarle el cargo de CEO de CEI, pero él se había negado rotundamente.

​Su rechazo se basaba en la estrategia de pasar desapercibido, alegando que un título tan visible solo atraería una atención innecesaria. Además, creía que, debido a su edad, nadie lo tomaría en serio si era nombrado CEO de una corporación de esa magnitud. Por lo tanto, estaba mejor siendo solo el "asistente", aun cuando en la práctica ejercía las funciones de un director ejecutivo.

​No obstante, en el ecosistema corporativo de la Umbra, no había confusión sobre su verdadero poder: tanto en CEI como en ShadowCorp, todos sabían que las decisiones y órdenes de Gabriel debían cumplirse sin cuestionamientos, pues estaban respaldadas por la autoridad absoluta del mismísimo jefe: Alexander Williams.
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Su destreza era tal que incluso asistía directamente a Alexander en la administración y protección legal de W&H.

Para muchos en la Umbra, resultaba casi ilógico que Gabriel ostentara el título de Mano Derecha del Segundo al Mando. Su participación no era visible en las operaciones de campo, a diferencia de Félix, cuya lealtad y labor como ejecutor de Alexander eran palpables y, a menudo, sangrientas.

​La percepción interna era clara: algunos en la organización susurraban que el título de Gabriel era solo una fachada, un simple reconocimiento para darle poder corporativo. La creencia popular era que ese puesto había sido concedido por preferencia personal de Dae-Hyun y no por mérito. Después de todo, Gabriel no solo era amigo íntimo de Dae-Hyun, Alexander y Félix, sino, crucialmente, el mejor amigo de Jung Hana, la hermana de Dae-Hyun.

​Sentían que el puesto, el excelente sueldo y los beneficios que disfrutaba eran un resultado directo de su círculo social en la cúpula.

​Gabriel era perfectamente consciente de estos murmullos, tanto dentro de la Umbra como entre los miembros de otras organizaciones. Había umbraes de bajo rango que hablaban a sus espaldas, cuestionando su autoridad y capacidad.
​Esta constante necesidad de validación alimentaba su rechazo a aceptar el cargo de CEO de CEI, a pesar de las insistencias de Alexander y Dae-Hyun. Mantenerse como un "asistente" le permitía trabajar arduamente en la sombra, esforzándose al límite para demostrar que su contribución a la organización no se basaba en el favoritismo, sino en una capacidad y una dedicación que lo hacían más que capacitado para sostener la estabilidad empresarial del imperio.