Imaginativo.

De los cuentos cortos que a veces son largos y de los cuentos largos que a veces son cortos, se pueden decir y hablar muchas cosas.

Pero si hablas con un fantasma…

— ¡Hola Luis!

— ¿Qué tal? No he tardado mucho ¿Verdad?

— ¡Realmente si, un poco!

—Ven, siéntate aquí conmigo. Está hermosa la tarde y quiero comentarte algo muy importante para ambos.

— ¿Si, que sucede?

— He pensado que debemos dejar de vernos. ¡Perdona que te lo diga así, tan de golpe, pero no quiero arrepentirme, si tardo mucho en decírtelo!

— ¡No entiendo! ¿De qué estás hablando? ¿Sucede algo malo?

— Me temo que sí. Tengo que hacer un largo viaje y no sé cuándo volveré. No quiero que me esperes, quiero que seas feliz con alguien más.

— ¡Pero! ¿A dónde vas a ir? ¿Y qué será de todos nuestros planes?

¡Si yo solo quería...!

— ¡No llores por favor, lo haces más difícil para mí! No quiero lastimarte con mis palabras, solo quiero que sepas, que a donde quiera que yo vaya, tú serás siempre la mujer de mi vida.

— ¡Pero! ¿A dónde vas? ¡No entiendo nada de lo que me dices Luis!

— ¡Ya lo sé Angélica, pero esto que hago, lo hago porque te amo y espero que lo entiendas algún día!

— ¡Bonita forma de demostrar tu amor escogiste!

— ¡Siempre te he dicho que el amor se da y no se pide! Por eso, he venido a darte todo mi amor.

— ¿Con una despedida? ¡Mira, me estás haciendo enojar, si es una broma...

— ¡Bueno mi amor, ya tengo que irme, pero antes quiero pedirte algo que es muy importante para mí! Cuando quieras hablar conmigo, ven y siéntate en esta misma banca y hazlo, ¿De acuerdo?

— ¿Qué?

— ¡Ahora me voy!

— ¿Pero...?

— ¡Adiós!

Dos minutos después suena el teléfono.

— ¿Bueno?

— ¿Es usted Angélica, la prometida del joven Luís?

— Si, ¿Quién habla?

— ¡Soy el ingeniero Fernández, su prometido sufrió un infarto! ¡Tiene que venir aquí de inmediato!

De los cuentos cortos que a veces son largos y de los cuentos largos que a veces son cortos, se pueden decir y hablar muchas cosas.

No esperes a que un fantasma se despida de ti. Dile a esa persona cuanto la quieres ahora, para que esa persona o tú, no reciban una llamada, después de haber hablado con un ángel.

¡Hazlo ahora!