Epílogo

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Siento tu ausencia, notable realidad. En las noches, en el día, en aquellas más de cuarenta canciones dedicadas, que guardo en una playlist con tu nombre. En toda mi habitación…

Me río de llorar, quizá sea yo la única que lloré, quizá no le importe… quizá sí, te extraño... Y el brillo de una estrella sigue intacto, día a día le pido el mismo deseo, no sé si llega a tu habitación.  O si cuando estás viendo algo me recuerdes… o si ya me odias.

Quisimos ser más que un amor de secundaria, pero no pudimos llegar, fuimos un futuro dibujado en un lienzo, hermosa cada idea, cada trazo de pintura en el cual encerrábamos planes, sin embargo, solo será eso… un dibujo… Una música dedicada que encerraba grandes palabras que quedaran en nosotros, pero que no será realidad que viviremos. ¿Una razón para ir por ti? No existe razón para amar, pero no puedo ir por ti, lo quiero pero no puedo. Tal vez esto fue algo que teníamos que vivir que nos servirá más adelante.

Me dijiste que nuestro libro se llamaría -Un Mundo Perfecto Pero Mentiroso-

Nuestro mundo no fue mentiroso, fue perfecto con cada pelea, problema o discusión, con cada alegría y bueno momentos juntos. Nuestro no fue falso. Sabes que nombre le pondría a nuestro mundo… ese que encerraba un árbol, un avión y un libro… Tu y Yo. Dos chicos de trece años platicando una tarde, sin saber que escribiríamos una gran historia juntos mas tarde.

Aprendimos mucho estando juntos. Y vivimos primeras experiencias que serán inolvidables, que recordaré siempre con una sonrisa. Nos llevaremos mucho uno del otro, no hay duda. Conocimos, vivimos y sentimos muchas cosas juntos.

Antes de irme hay algo que debo decirte.

Recuerdas aquella tarjeta que te regalé en nuestro primer mes de novios, aquella que recordamos en una llamada y mencionabas que dije decirte algo justo cuando cumpliéramos un año, pensaste que lo olvidé, pero no. No lo olvidé. Pero me daba temor o pena decírtelo…

Además de considerarte mi amigo el cual confíe muchas cosas de mí y mi familia, además de ser mi pareja, el chico del cual me enamoré… te consideré mucho más allá. No era capaz de decirlo porque como te mencioné sentía un pequeño temor, o de como lo tomarías, o fuese pronto pero no…

Te consideré parte de mi familia. Eras tan importante para mí, te amé tanto y te quiero tanto. Ocupaste un espacio muy grande en mi corazón. Será muy difícil olvidarte amor, te llevaré marcado en mi corazón, y el inmenso amor… bueno de ello no decide más solo que mi corazón. Quizá… es curioso, pero creo que es hora de solo pensar en mi presente y tratar de seguir adelante, sin embargo, te regalaré una sonrisa muy sincera si te vuelvo a ver.

Duele mucho esto y te extrañaré. Pero, tal vez debíamos pasar esto… no lo sé en realidad.

Recuerdas la vez que discutimos, y me ignoraste, pero te busqué para hablar. Pero cuando hablamos te llegaron a buscar al colegio, te abracé muy fuerte y te pedí que no te fueras. Quiero que recuerdes ese abrazo, tanto como los demás, cada uno de ellos fue muy sincero, pero sobre todo recuerda el último. Deseamos repetirlo muchas veces y lo hicimos, en nuestras mentes, en nuestros mundos, en nuestro mundo, en nuestros corazones.

Te despediste y te entiendo. No te juzgo porque hayas pensado ello de mí, quizá no te demostré completamente lo que sentía por ti o mi pasado influyó, no lo sé… Pero te entiendo, y quiero que sepas, por favor se que tu corazón sabe que te amé, que te amo. Ojalá pudiese verte y que me miraras a los ojos, dijiste una vez que podrías ver mucho en ellos, encontrarías la verdad. Pero ...este fue… nuestro… ¿final? …uno que no merecíamos, pero el destino o vida así lo quiso. Gracias por llegar a mi vida, cada momento a tu lado, cada sonrisa, cada, beso, cada abrazo, cada mirada, cada palabra, cada conversación, quedarán en mí. Me hiciste muy feliz. Como me dijiste… y como dice Jay Wheeler, Me enamoré de ti. Lo hice.

Y oye… ni pienses que iré por Criss sola… se que no es un buen momento, y quizá no te vuelva a ver. Pero si algún día te llega alguna foto de una tortuga al lado de un cactucito, sabrás que soy yo.

Cuídate mucho. Te quiero. Te envío un fuerte abrazo psicológico, muy, muy fuerte. Siempre estaré para ti, no lo dudes. Te deseo lo mejor, sé que te irá muy bien en todos tus planes, eres un gran chico. Y no dudes que si Dios quiere y puedo ir a la NASA y subir al espacio te cortaré la señal. Es broma, te enviaré más.

El rey se marchó… ¿recuerdas?... el problema es que la reina no tuvo ningún medio al irse del castillo. Creo que… los leones no migran ¿o sí?... recuerda que soy extraña.

GOOD BYE — 2:06 a.m

El libro es un regalo de mí parte...

Quedará en ti:

Itzel