Capítulo 23

Después de la cena, en la que la conversación sobre mis habilidades y su impacto en el clima ha sido un tema central, Lautaro me lleva hasta la universidad que ellos tienen y nos dirigimos a la oficina del rector. El edificio es impresionante, combinando un diseño moderno con elementos tradicionales y grandes ventanales que ofrecen vistas panorámicas del entorno natural. Mientras nos detenemos frente a una puerta de madera adornada con el escudo de la manada Lautaro habla.

Lautaro: llegamos, recuerda que el es un aliado.

Antes de que pueda tocar el timbre, la puerta se abre y un hombre de porte autoritario y amable aparece. Su mirada es penetrante, pero su sonrisa es cálida.

Alejandro: ¡Ah, por fin llegas! Soy el rector Alejandro Martínez, director de la universidad y el segundo al mando de la manada. Encantado de conocerte, Sasha Mabel Novoa

El uso de mi nombre completo, "Sasha Mabel Novoa", marca el inicio de una conversación formal.

—El gusto es mío, escuché mucho sobre este lugar y estoy ansiosa por integrarme y conocer mejor la dinámica de la manada.

El rector asiente y nos invita a pasar a su oficina, decorada con una mezcla de modernidad y tradición, con estanterías llenas de libros y trofeos que cuentan historias sobre la manada.

Alejandro: hemos estado esperando tu llegada y he sido informado sobre tu capacidad para controlar el agua y cómo, en momentos de gran furia, el clima puede verse afectado. Debo de avisarte de una cuestión que te afectará, durante la época de celo de los hombres lobos, tendrás que ya haber descubierto al menos algunos de los que inician los problemas en la manada. Ya que si completas el vínculo con Lautaro ya todo cambiará incluso veraz como te tratarán diferente sabiendo que si te dañan ellos podrán morir.

Mientras habla, el rector me entrega una carpeta.

Alejandro: También he revisado tus credenciales académicas y se te ha reconocido el 50% de las materias que ya cursaste en Argentina. Aquí tienes tu horario de clases y los detalles de los cursos restantes.

Agradezco la información y reviso los documentos con interés.

—Gracias, esto facilitará mi transición y organización.

El rector sonríe y agrega en tono confidencial:

Alejandro: Te recomiendo que prestes atención a mis hijos, Alejandro y Valeria Martínez. Son aliados valiosos dentro de la manada y conocerlos te será de gran ayuda para integrarte más rápidamente y navegar en este entorno.

—Lo tendré en cuenta, gracias por su apoyo y por la información. Me siento más preparada para lo que viene.

El rector asiente con satisfacción me levanto y salgo de la oficina al salir Lautaro me observa con una mezcla de preocupación y orgullo...

Lautaro: Ya te dio toda la información?

-Si, me comentó también de sus hijos y que ellos serían aliados en todo el plan que pusimos en marcha.

Lautaro: seguro que les habrá dicho de la señal para que se identifiquen, los profesores de mayor rango y de mayor confianza también saben de tu verdadero origen y no de la historia que inventamos.

-es bueno saber que son muchos los que quieren que la violencia pare.

Después de que Lautaro me acompañara hasta la puerta del salón, se despidió con un beso en la frente lo cual me provocó una sonrisa y me dejó entrar sola. Al entrar, sentí las miradas curiosas de mis compañeros, sin tener la agudeza auditiva de un licántropo escuché algunos susurros claramente intrigados por mi presencia y, probablemente, por mi conexión con Lautaro, después de todo no deja de ser uno de los futuros alfas de esta manada.

Mientras caminaba por el aula noté que algunos intentaban intimidarme con comentarios sutiles pero despectivos. Uno de ellos murmuró: "¿Quién es ella para estar aquí?"

Decidí ignorarlos y sentarme casi al fondo demostrando calma y seguridad, cuando ingresa el profesor y empieza a pasar lista cuando llega a mí apellido mira buscándome por lo cual levanto la mano.

Profesor: Novoa la señorita Novoa donde está?

- Acá estoy profesor

Al ubicarme asiente y hace un pequeño gesto de rascarse la frente con tres dedos, lo cual me dá la certeza de que es un profesor que está al tanto del plan y eso será de ayuda.

Profesor: Teniendo en cuenta que eres nueva y viene de otro país necesito que se presente.

-okey

Me levanto del asiento tomando una postura desafiante con las manos cruzadas en frente y la cabeza en alto.

- Soy Sasha Novoa, provengo de Argentina por eso el acento, vine a estudiar aquí gracias a la bondad del Alfa que me brindo refugio a pesar de no ser de alto rango y ser una simple hija de un mago.

Otro estudiante intervino con un tono burlón: "según lo que escuche es que son muy putas la latinas, seguro por eso ingreso"

Sonreí con confianza antes de responder a esas palabras que escuche la teminar de hablar

- Que nosotras la latinas no tengamos miedo a expresar nuestros sentimientos y si sepamos lo que queremos no quiere decir que seamos putas. Mis habilidades y mi determinación son las que demostraran lo que digo, lo que debo acotar es que me sorprende que sepas dónde está Argentina.

Dirijo mí mirada a la persona que hizo el comentario y para gracia mía tenía un estilo como los malos de la película cry baby, claramente no está ni cerca de la belleza del Adonis hermoso de johnny depp pero parecía querer tener esa actitud de macho malo.

-Suele ocurrir que seres de tu estilo que el cerebro es como la casas de la Barbie... Viene por separados

Mi respuesta pareció dejarlo desconcertado y causar gracia en algunos. Continué por sentarme y el profesor decidió comenzar la clase luego de ver con desaprobación a quien hizo el comentario y sonrió un poco por mí ocurrente comentario, el profesor comenzó la clase, enfocándose en la farmacología aplicada a las distintas especies dentro de la manada. A medida que hablaba sobre las dosis y los efectos de los medicamentos, resaltó lo crucial que era entender las diferencias entre especies para evitar complicaciones. Cada especie respondía de manera distinta a los tratamientos, y un error en la dosis podría ser fatal.