Los Hijos de Anac y las Marcas Sagradas

capitulo 53

El padre Jorge no tenía conciencia de cuánto tiempo había pasado encerrado en medio de la oscuridad, cuando no puedes ver el nacimiento y el ocaso del sol tampoco puedes determinar si han pasados horas, días o meses. Se encontraba muy cansado y débil pero seguía luchando por mantenerse consiente, tenía que estarlo porque aunque no sabía cuánto tiempo llevaba encerrado sabía que no podía pasar mucho antes de que lo fueran a buscar para el ritual.

La puerta de su encierro se abrió por primera vez desde la visita de Metatron, la luz se filtró por la gran puerta encegueciéndolo, tuvo que entrecerrar los ojos y colocar su mano sobre sus ojos para poder distinguir las siluetas de dos personas acercándose a él. La puerta se volvió a cerrar y el Santo cerro los ojos para volver a acostumbra sus ojos a la oscuridad.

_ ¡Padre Jorge!_ El santo reconoció la voz de la joven que había visto crecer y convertirse en una hermosa mujer.

Caeli se lanzó de rodillas al suelo y abrazo al viejo Santo con todas sus fuerzas, estaba tan feliz de verle, de saber que estaba vivo.

_ ¿Se encuentra bien?

El padre Jorge abrió los ojos y reconoció el rostro de Caeli en medio de la oscuridad, sonrió levemente para tranquilizarla y hacerle saber que se encontraba bien. Levanto el rostro y se encontró con la mirada curiosa de Niall, también le sonrió al reconocer en él al segundo hijo de Meatron. Entonces su corazón se contrajo, apretó la mano de Caeli y la miro con amargura. El que ella estuviera a su lado en ese momento solo significaba que el final estaba cerca y que ella solo estaba ahí a su lado para pedirle lo único que él no quería darle.

Caeli supo al instante en lo que el Santo pensaba y sintió miedo de que se negara a ayudarla._ Lo necesito._ Le dijo convencida._ De verdad necesito que me ayude.

_ ¿Estas lista?_ Le pregunto el Santo.

No, no estaba lista pero tenía que hacerlo.

Negó con pesar.

_ No lo estoy pero lo hare de todas maneras.

El padre Jorge pensó en todas las veces que la vio correr por los pasillos del castillo, las mil veces que desobedeció las normas y Kayden junto con Owen tuvieron que correr para ayudarla a salir de los problemas. Siempre fue testaruda y caminaba de acuerdo a sus propias normas, no seguía a nadie y eso siempre le coloco en medio de situaciones conflictivas. Se crio como la hija de Mikael pero toda su actitud siempre fue la de Metatron, ahora no era la excepción.

_ Está bien.

Caeli le sonrió.

_ Pero hay algo más en lo que necesito su ayuda._ El Santo inclino su cabeza a un lado para poder verla mejor._ Es sobre Clío._ El santo sintió como Niall se removía con incomodidad a su lado. _ Quiero algo para que sepa que siempre estaré a su lado, yo jamás podre conocerla realmente así que…

El padre Jorge coloco un dedo sobre sus labios comprendiendo lo que ella estaba pidiendo._ Lo tendrás.

***

Los Jӓger se movieron con suma rapidez, aseguraron las puertas y ventanas del edificio y se encargaron de mover a los hijos de Adán hasta el sótano, ese era el único lugar que tenía puerta de acero que se abría únicamente desde adentro. Para Kadar no era la mejor opción, habría querido desplazar a todas las personas fuera de la ciudad lo más lejos del peligro pero no estaban en condiciones y tampoco tenían el tiempo necesario.

_ Todo está listo._ Aseguro Dirar parándose a su lado._ Quizás no es lo más adecuado pero es lo mejor que podemos hacer.

Kadar apretó sus manos en puños a sus costados, podía sentir como el peligro se acercaba cada vez más rápido, estaba casi sobre ellos y el hecho que la niebla se filtrara por las rendijas del viejo edificio solo le ratificaba que era cuestión de minutos antes de que los Faoladh y Dearg-due les sitiaran.

_ Si morimos… _ Dirar trago el nudo en su garganta._ quiero que sepas que eres mi mejor amigo.

_ Eres más que eso, Dirar, eres mi hermano.

***

El portal se abrió frente a Kavi como una pequeña huella de luz y después se convirtió en una gran abertura suspendida en el aire. Kavi miro sobre su hombro al gran grupo de guerreros que permanecían tras él, Jӓger, Gurkis, Fuath y Zíngaros; todos preparados para darle la cara al peligro y luchar por los que necesitaban ser protegidos.

_ Es hora._ Dijo en voz alta Tristán._ Nuestra vocación es su protección.

Todos elevaron sus puños al cielo y gritaron en respuesta.

***

Los siete Arcángeles marchaban frente a su ejército de ángeles guiándolos con pasos firmes hacia la última batalla. Pronto estarían frente a frente con su hermano, con el que una vez lucho a su lado y demostró ser digno de toda la confianza. Pronto volverían a encontrarse con la mirada ambarina y feroz de su gran hermano Metatron el que una vez fue el lucero de la mañana.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.