Capítulo 5. Inmune.

En la cúpula del ángel sanador todo es sobre sanación y curación, tanto heridas profundas como heridas del alma y la esencia, es muy difícil curar su esencia y sobre todo que esta tenga efecto, el ángel sanador es muy potencial en su trabajo, durante siglos a buscado muchas plantas, junto con la inmortal de las flores al obtenido antídotos, curas y hasta elixir prohibidos.

Pero sobre todo estos medicamentos han sido modificados y perfeccionados por el mismo ángel sanador, es el mejor en su rango, anterior mente él tenía a su diosa de la naturaleza para brindarle conocimiento, ella es la única que puede crear plantas que tardarían milenios en crecer, además de que le dio el mismo don a la inmortal de las flores, pero solo la diosa tiene el efecto necesario que ocupa el ángel sanador.

Durante décadas este ángel no tiene contacto con los demás, siempre está creando nuevas recetas, medicamentos y antídotos, sobre todo a lo que él cree importante, aunque miles de inmortales lo visitan el solo recibe a los que cree dignos e incluso a neflim, hadas o elfos que cree que es justo tratarlos, todo depende del aura que cada quien tenga, debido a que este ángel puede descubrir el alma negra o pura.

En este momento él está dejando su principal regla de curar heridas a seres que realmente lo ocupen, debido a que los nefilim que combatieron al demonio hace un momento están con el saliendo y entrando, en general no está usando mucho poder, los nefilim son seres poderosos pero no ocupa mucho estudio del ángel sanador, sobre todo porque las heridas pueden curarse con el tiempo.

Sin embargo para que sus cuerpos se recuperen por si hay otro ataque ocupan la sanación del árbol sagrado, es un símbolo que pertenece al ángel, este fue otorgado a él cuándo este ángel fue creado, solo lo usa en situaciones que lo necesite, común mente este árbol solo está de adorno en su cúpula sagrada, es espectacular ya que solo se hace presencia con el llamado de ángel.

-Hermano – El ángel sabio saluda con su respeto – Un honor verlo después de milenios.

-Que terrible situación estamos viviendo, ese demonio fue sellado y mi sorpresa fue que nos atacó – Responde abrumado del ángel – Como fue posible que dejaran de vigilar los demonios sellados, fue un error confiar en el reino demoniaco.

-No sabemos qué fue lo que ocurrió pero pronto iremos a averiguar, mande unos nefilim de incognito – El ángel sabio responde – Solo queremos tu sanación para poder destruir al demonio.

-Sabes que eso es imposible, ese demonio no pudo ser destruido por nuestro dios supremo en las épocas de guerras sanguíneas y ahora lo peor es que fue liberado – Dice – Vamos dile a los inmortales y ángeles que vengan.

El ángel sabio sabe que esto puede ser una catástrofe para el mundo celestial y cada uno de los reinos que lo conforman pero no se darán por vencidos, si una vez sellaron a ese demonio lo podrán hacer, pero aún no a encontrado el arma correcta, después ira a hacer memorias en su propia cúpula ya que el posee un objeto sin igual, que solo lo usa para su conocimiento.

-Vamos entremos para poder dejar descansar al ángel sanador – Les informa el ángel sabio – Esta igual de sorprendido que nosotros.

-Ya sabes cómo es el hermano sobre todo se pone de un mal humor cuando muchos lo visitan – El ángel fuerza – Vamos.

Detrás de los ángeles fuerza, tranquilidad, sabio, premonición, entra los inmortales e Iris, aún no saben a qué especie pertenece pero saben que no es humana y la mayoría creen que es inmortal, pero eso solo lo sabrán cuando el sello que tiene se desvanezca y para eso ocupan a la persona que lo puso en su esencia.

-Angel sanador, es un honor – Dicen los inmortales y presentan su respeto.

-Es magnífico este lugar – Iris se queda asombrada por la cantidad de plantas y objetos que se encuentran en la cúpula, sobre todo el árbol sagrado – Que es lo que está arriba, es hermoso.

-Tú lo puedes ver – El ángel sanador se muestra abrumado – Quien eres tú y porque siento que te conozco.

-Ella es humana – Dice la inmortal Aosaginohi – O más bien ella vivió entre humanos.

El ángel sanador ve a Iris tan asombrado que aún no tiene la menor idea del porque es tan familiar, sobre todo no sabe por qué puede ver su árbol sagrado, solo lo pueden ver cuando él lo invoca o lo hace presente para sus invitados, las únicas personas que lo pueden ver son dos la diosa de la naturaleza y la inmortal de las flores, debido a sus dones.

-De todas maneras, nadie aquí en este lugar puede ver mi árbol sagrado a excepción de mí claro – El ángel sanador no quita su mirada de Iris – Eres diferente y además tiene veneno del demonio en tu interior.

-Puede que te asombre hermano pero ella puede soportarlo – Informa el ángel premonición – Mientras más rápido nos cures, más rápido nos iremos.