En algún lugar de Hessun, 18 de agosto de 1931
Amada mía.
Sé que solo han pasado unas cuantas semanas desde que fui reclutado por el ejército, pero aún así ya te extraño demasiado por lo que no pude evitar mandarte una carta. Ahora mismo me encuentro en reserva lejos del frente de batalla, pero aun así en constante movimiento gracias a que nuestro ejército está avanzando rápidamente en territorio enemigo.
Es una carta muy corta, pero es lo que me alcanza de tiempo para decirte, en unos minutos nos tendremos que mover a otro lado que no puedo decirte.
Por cierto, hace unos días tuve la oportunidad de ver a un mago en persona, uno rubio, he oido que es un mago joven y prodigioso.
Tu Erick.
En el frente, agosto de 1931
A mi madre.
¿Cómo has estado madre? ¿Las cosas han estado como siempre en casa? No se cuando te llegará esta carta, según he escuchado tardan demasiado en llegar. De todas formas, te cuento una de mis experiencias que me permitieron escribir. El día de ayer pude ver en acción a uno de nuestros magos, fue impresionante, él sólo acabó con un escuadrón entero.
Amor y besos, tu hijo Friederich. Espero tu carta.
Editado: 09.12.2024