Los Magos de la Gran Guerra

Cartas II

En un lugar de Allmania, agosto.

Para mi padre.

Padre, espero que todavía sigas con vida para cuando te llegue esta carta, quisiera estar contigo, pero me llamaron a las filas del ejército. La vida en la guerra está siendo complicada para alguien como yo, pero, pese a todo, nuestro ejército ha estado avanzando dentro del Imperio Allmanés, quien sabe, puede que la guerra sea corta.

Algo que te quiero contar es que he estado conociendo a varios soldados de Caliria, aunque hablan nuestro mismo idioma tienen un acento un tanto peculiar y gracioso. Aun así son muy amables y educados.

Rezaré porque tenga la oportunidad de verte.

Elias Bosch.

24 de agosto de 1931.

Hoy pude volver a donde era mi antiguo hogar, que hace una semana la habían tomado los lanqueses. Recorrí todas las calles, vi las casas destruidas, irreconocibles. Fue triste, casi lloro al ver mi antiguo hogar, donde algún día fui niño y me crié aquí. Son unos malditos, lo mismo hicieron hace diez años. Por desgracia nos dijeron que mañana en la mañana tendremos que replegarnos a otra posición. Juro por mi vida que volveré aquí y quitaré la bandera de Lancois que pusieron.

En las montañas de Karkinia, 25 de agosto.

Para mi mujer.

No se cuando esta carta te podrá llegar, o si lo hará, solo quiero que sepas que te extraño mucho y la situación del frente parece que pronto se estabilizará. Los allmaneses están agotados y sus ataques disminuyeron considerablemente, las montañas de Karkinia protegen la capital y el norte del país, esos bastardos no lograran derrotarnos. También la ayuda de la República de Lancois y el Reino de Caliria ayudó a reducir la presión del frente.

Bueno, aunque quiera verlas no creo que nos podamos ver en navidad, el trabajo de un oficial es duro.

Atte: Tu esposo.

En las faldas de las montañas de Karkinia, agosto de 1931.

A mi madre.

Hola madre, recibí tu carta justamente el día de ayer, me alegra que todo esté bien allá. Aquí la vida es dura, pero hemos estado avanzando varios kilómetros, los campos de flores aquí son muy hermosos y las montañas son magníficas, todo esto es ahora de nuestra gran nación.

Tengo noticias de que el ejército del oeste está defendiendo al país del ataque de los lanqueses y calirios, así que todo irá bien madre. Espero y nos podamos ver pronto. Te extraño.

Amor y besos, tu hijo Friederich. Sígueme enviando cartas.



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En el texto hay: magos, misterio, guerra entre bandos

Editado: 09.12.2024

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