continuación capitulo 1

Nadie sabía lo nuestro, lo mantuvimos en secreto, se preguntaran porque no existen los mates en los originales, y es porque no hay mates para ellos, los hombres lobos deciden con quien estar pero siempre y cuando sean de la misma raza, tampoco tienen un lobo en su interior, ellos mismos controlan su transformación, por lo que son diferentes a otros lobos de manadas, que si tienen mate y lobo interior que los hace transformarse. La Diosa Luna dividió la raza entre lobos, siendo la primera  Los Originals, Los Reales, Los Pura sangre, los dos últimos la Diosa si les concedió mates y amores fieles.

Estábamos en una temporada de calor, y el cielo se veía muy despejado y todo tranquilo, a lo que Adam llega y me arrastra con él hacia una cascada muy hermosa, pero esta tenía algo muy especial, su cascada descendía de manera que podías estar bajo de ella, sus piedras eran de color naranja con algunos roces negro, la llamaban “La Cascada del Jasper” por su preciosa vista en las piedras, te podías sentar y sentir lo cálida que era el rio.

--Ya es hora amor, he convocado a la Diosa Luna para que podamos tener una hermosa familia-. Decía feliz, pues su sueño era tener un bebe conmigo y no iba arruinar el momento por mucho que se desatara la guerra entre aldeanos y originales.

--¿Cómo la has convocado?-. la verdad no entendía como la podía convocar, pues se dice que solo ella aparece cuando piden con amor sus peticiones y si era necesario hacerlas cumplir, debido a que es una Diosa con mucho poder espiritual y no acepta ofensas a sus dones. Pero solo con un amor verdadero y puro.

--Yo te amo Amaral, y la Diosa luna sabe que es así, y que daría todo por ti.- se me salieron las lagrimas por tales sentimientos de su parte.

--Entonces hagámoslo-. Suspire con seguridad-- yo también te amo y anhelo tener una familia contigo-. Concluí a lo que él me beso con mucha pasión y sentí una corriente eléctrica por todo mi cuerpo, jamás alguien me había hecho sentir tan segura y tan amada en mi vida. Era mi primer amor, mi primera vez, y no tenía miedo de que fuera con él.

De repente, unas nieblas blanca aparecieron entre nosotros y nos rodeaba, era misterioso, y la verdad causaba miedo, Adam me agarro fuerte y estaba delante de mi protegiéndome con su espalda, nos vestimos rápido, ya que no sabíamos que se avecinaba.

--Si te digo que corras, corres Amaral, no te detengas por mi.- dijo el alerta, pues agudizo sus sentidos pero no escuchaba amenaza alguna, pero aun así estaba alerta y protegiéndome.

--¡estás loco! No te dejare aquí, si tenemos que luchar, luchamos juntos y si tenemos que morir lo haremos juntos-. dije con seguridad, y me vio con algo de molestia e iba a decirme algo por lo que había dicho pero una voz le fue interrumpida.

--No teman de mi, he visto el amor que emanan estos dos corazones y hed aquí aparecerme-. Su voz era tan neutral pero no emitía miedo, más bien la calidez de sus palabras transmitían amor.

--¿Quién eres?.- dijo Adam, pues no se apreciaba bien el cuerpo de aquella hermosa voz de mujer, pero en cuestión de segundo se fue acercando y pudimos observar lo hermosa que era, con un vestido azul cielo, una capa transparente con brillantina que descendía desde su cuello hasta el largo del vestido, alta y delgada, que dejaba en claro lo bien que lucía aquel atuendo, un cabello blanco nieve y su piel pálida pero con labios rosados y sus mejillas también eran color rosa.

--Soy la Diosa Luna, he aquí por vosotros, a cumplir su petición.- ambos quedamos sorprendidos, jamás imaginamos que se apareciera de tal manera, ya que para convocarla se tenía que hacer un ritual con palabras de sabiduría y si esta correspondía se aparecía entre las nieblas.