Cap 9
—Morana, escucha, debo irme, el vecino del que te comentaba está fuera de mi casa, Dios está mirando muy directamente hacia la puerta de casa… Si no regreso pronto… Llama a la policía —dice Reiman mientras se desconecta de la llamada y yo me quedo muda todavía pensando en lo que ocurrió en la cocina.
A veces mi familia puede ser un tanto extraña y no tener sentido en absolutamente nada, pero es mi familia y la amo como es, aunque no me dirijan la mirada ni la palabra, aunque me ignoren e imaginen que yo no existo, mientras crean eso, yo seré feliz de saber que de cierta manera y muy en el fondo del corazón de ellos, me aman aunque sea un poco…
Me quedé pensando un largo rato, mirando a la nada, tratando de saber si creerle o no a las mucamas, algo muy dentro de mí se encendió, como si una pequeña llama me quemara, pero tan pequeña, se va extendiendo por todo mi cuerpo, quemándome, haciendo que mis ojos ardan y mis manos comenzaran a temblar…
``Respira´´
Escucho que alguien me dice…
—¿Quién eres?
``Cálmate, niña´´
Me giro de manera rápida para encontrar al responsable de esa voz tan áspera y grave, pero no encontré a nadie.
Otra vez las alucinaciones.
—Ya basta, Morana —me digo a mí misma mientras me dirijo al baño de mi habitación. Me miro en el espejo sin comprender bien qué es lo que sucede conmigo; tapo mi rostro con frustración y enojo; el hecho de no comprenderme a mí misma es una tortura constante.
Odio el sentimiento de desconocerme.
De manera inconsciente tapo el lado derecho de mi rostro para sonreír y luego descubrir mi lado izquierdo, mostrando mi frialdad, mi tristeza, mi dolor.
Cuando me alejo un poco del espejo pero algo se siente raro,Mi reflejo en el espejo,se siente como si no fuera mío,cuando quiero acercarme al espejo para comprobarlo,mi reflejo en el espejo me sonríe de manera cínica.
Esta situación,me traumo,me quedo pasmada por la situación y me alejo de a poco del espejo,viendo como este me sigue con la mirada.
Esto parece una película de terror.
Me dirijo hacia la puerta de mi habitación con rapidez,me acerco temblando por el miedo hacia la puerta, pero esta no abre.
¿Me encerraron?
Intento abrir mucho más fuerte la puerta; pero no abre.
¿En qué momento?
Esto comienza a desesperarme
Respira, te estás quemando por dentro.
Miro a mi alrededor y tapo mis oídos ante la desesperación que esto me genera, sin comprender de dónde vienen esas múltiples risas y esa voz tan áspera, con el miedo impregnado en mis huesos. Tomo mi laptop y escribo un mensaje para Reiman.
???
Mientras Morana espera una respuesta de Reiman, la ansiedad crece. La puerta sigue sin abrirse, y sus manos tiemblan con más fuerza. De repente, la voz grave vuelve a hablar:
"Ya no eres tú, Morana..."
El reflejo en el espejo se vuelve borroso, pero cuando se enfoca de nuevo, los ojos de Morana ya no son suyos. Son completamente negros, como pozos sin fondo que reflejan la desesperación que siente. Morana retrocede,su propio reflejo se acerca cada vez más al espejo para golpear el espejo,este comienza a agrietarse lentamente,como si el reflejo mismo estuviera intentando escapar,
Morana pensó en lo desesperante que se estaba volviendo la situación,podía escuchar como el espejo seguía quebrándose,quería que todo fuera un sueño pero se sentía tan real,pensó Morana.
Un ruido en su computadora hizo que ella se acercara corriendo,cerrando la puerta del baño detrás de ella,todavía escuchando golpes en el espejo,tomó su laptop y corrió cerca de la puerta,algo podía hacer,pero no sabía que.
Se dirigió a sus mails para ver que Reiman había contestado,pero el mismo mensaje era tan confuso para ella,ni siquiera podía leerlo,era como si las mismas palabras se desvanecen mientras más intentaba comprenderlas.
De repente algo se le ocurrió,cosa que tuvo que haberla pensado como primera opción,todavía con el ruido en el baño de su habitación,corrió buscando su celular,cuando por fin lo tenía en sus manos,pudo escuchar por fin el espejo hacerse añicos en el suelo del baño.
La respiración de Morana se detuvo por completo y se quedó quieta,sin respirar,sin saber qué hacer en esa situación,cada vez el miedo se tornaba más palpable.
Con sus manos temblando y el sudor bajando por su frente,desbloqueo su celular para hablarle a alguien que pueda ayudarla.
Pero,¿quién?
Pensó en un número cualquiera pero no lograba recordar nada y menos con los ruidos en su baño,esta vez venían de la puerta ya cerrada del baño.
Morana logró recordar un número y lo marco.
Primer pitido.
Segundo…
Tercero…
Que alguien me conteste por dios,pensó Morana apunto de sacar el celular de su oído,pero por fin la persona contestó.
—¿Hola?—Pregunto la persona desde la otra línea,Morana se quedó callada sin saber que decir,que le diría a un extraño,estoy encerrada en mi habitación ven y rescátame—.¿Hola?...¿Morana eres tú?
Luego de ese pequeño shock y que los golpes en la puerta se hicieran más fuertes,Morana pudo reconocer la voz de su hermano…
Emrys.
—Hay alguien en mi habitación…—Dijo casi en un susurro Morana mirando como la puerta se sacudía por los golpes—.Esta en el baño y yo…trate de salir de aquí pero la puerta está cerrada desde afuera.
Emrys desde la otra línea estaba confundido,podía jurar que la puerta de la habitación de Morana no se podía colocar seguro,de igual manera tenía un mal presentimiento,tomo sus cosas de la oficina y con voz calmada le pidió a Morana que se escondiera en su armario hasta que él llegara.
—Emrys—Lo llamó con la voz temblorosa Morana,haciendo que Emrys se detuviera de manera abrupta.
—Dime.
—La persona que está en el baño…es igual a mi.