Cap.    239   “El funeral de un Gran Heroe.”

(OCTUBRE 2,  2018, NUEVA ASGARD, NORUEGA.)

(Ahmanet)

            Es temprano cuando me voy a la cama, apenas pasan de las tres de la tarde. He comido en mi habitación, Inga ha traido a Thýa, mi hija esta hermosa, la he bañado conmigo y ahora esta dormida a mi lado. Estoy agotada, tanto física como mentalmente, aún no logro entender como es que el alma de mi amado Steve se perdió en el olvido. Como es que no llego al sendero de las almas para ser juzgado. Se bien que Zobek, Anukis y los demás, incluso la Gran Ma-at, me respetan y temen como para mentirme en cuanto al hecho de haberlo visto pasar por el juicio de la balanza.

-Steve porque me dejaste.- digo en un susurro viendo como mi hija suspira mientras duerme a mi lado.

            Cierro los ojos recordando todos los bellos momentos que pasamos juntos, incluso aquellos que no eran tan bellos como aquel en que lo conocí, llevando una apariencia enfermiza, vestida de negro mientras jugaba con Anubis. El se veía tan triste y solitario que me rompió el corazón. Recuerdo que me sentía fatal, agotada y enferma y como necesitaba recuperarme Anubis y yo salimos del escondite del parque, llevaba varios dias tratando de sanar a una chica con leucemia. Recuerdo que estuvimos conversando y hasta me sonrio. Esa bella sonrisa clara y franca, que le daba cara de niño.

            Recuerdo cuando los chitaury invadieron Nueva York, yo estaba tratando de ayudar y él me ordeno correr a refugiarme. No me había reconocido, bueno no habría podido de todos modos. Recuerdo aquel paseo por el parque en Washington y el como me vio cuando aquellos policías acudieron ante mis gritos de ayuda porque me estaba haciendo cosquillas. Recuerdo su mirada al verme con aquel bebe que salvamos del fondo del rio, recuerdo su rostro, sus caricias y sus besos, recuerda la primera vez que tuvimos intimidad; recuerdo sus risas cuando hacia algo fuera de lo normal que descolocaba a todos y su voz seria cuando hacia algo que no le gustaba por ser peligroso.

            Asi entre el mar de recuerdos me quedo dormida, sigo navegando entre el mar de la memoria hasta que llego a ese momento, en que siento como me besa mientras sujeta mi nuca, para después irse dejandome llena de tristeza.

            Mi sueño se ha transformado en pesadilla, pues me veo buscándolo en el sendero, llamándolo a gritos.

-STEVE.- pero él no esta ahí no lo encuentro, de pronto escucho como una voz suave me dice.

-Tranquila, todo esta bien, fue solo una pesadilla Ahmanet,  despierta.- siento unas manos fuertes sujetando mis muñecas, así que abro los ojos, todo esta oscuro solo la luz de mi mesa de noche y de una lámpara en mi salita privada esta encendida.

            Observo bien a mi alrededor y veo a Bucky sentado a mi lado en la cama, sujetándome

-Ahmanet, estas bien? Fue solo una pesadilla.- me dice soltándo mis manos, yo me siento en la cama y me abrazo a él

-Lo extraño Bucky, lo he perdido y me he quedado sola.- le digo ocultando mi cara en su pecho

-No estas sola Ahmanet, yo estare a tu lado, Steve siempre fue como un hermano para mí, aun cuando por mucho tiempo olvide quien era y hasta intente matarlo, a ambos. Se que él querria que cuidara de ti y de tu hija.

            Escucho moverse algo, creí que eran mis gatos y Thýa en mi cama, pero al buscarla no la encuentro.

-Inga se llevo a la niña hace horas para darle de cenar.- Me dice Nat a un lado de la cama

-No estas sola princesa, Pepper y yo estaremos a tu lado.- me dice Tony que tiene aun cara de agotamiento

-Te vez fatal Tony, has dormido?- le pregunto sonriendo tristemente

-Bueno en eso estaba cuando escuche tu grito.

-TONY.- lo regaña Pepper, lo que me hace reir.

-Lamento haberlos despertado.- les digo

-Linda te hemos estado cuidando toda la tarde, a pesar de que dormias estabas muy inquieta.- me dice Bruce

-Gracias por cuidarme, pero no lo pueden hacer siempre, tengo que acostumbrarme a la idea de que lo he perdido para siempre.- les digo

-Ahmanet, él esta en el mundo de los muertos, podrías traerlo como hiciste con los asgardianos.- me dice Nat.

-No puedo Nat lo he perdido, él no llego al sendero.

-Pero dijiste que había sido juzgado y que era luz.- me dice Pepper

-Pepper, Thýa estaba presente y comprende perfectamente todo lo que se dice, pero el nunca llego al sendero, su alma se desvio y se ha perdido en el olvido, de donde ni yo con todo mi poder puedo traerlo de regreso.

-Que quieres decir Ahmanet, él no regresara?- Pregunto Pepper

-No Pepper, su alma se a perdido, no renacerá ni puedo traerlo de regreso. Su hija y yo lo hemos perdido sin remedio.