Luna bajo la sombra

Capítulo 2 Después de la guerra

Novela registrada ante derechos de autor, reservados todos los derechos. Código de registro: 2405057877106

Si pensaban que su mundo era completamente loco y fuera de realidad, los invito a entrar en mi mundo. Uno que cambió radicalmente hace más de 1200 años... cuando la humanidad se enteró de que existían los hombres lobo, los vampiros, las sirenas y toda clase de seres que la humanidad pensaba que eran solamente mitos y fantasía.

Ahora el mundo se rige bajo reinados únicos en cada continente. La antigua Antártida ahora es el continente oscuro, donde habitan en su mayoría vampiros y demonios (estos últimos a veces salen de su tierra rompiendo el protocolo internacional, por lo que las otras razas siempre están en guardia).

Europa se convirtió en la tierra de los hombres lobo, misma a la que ahora se le conoce como Luna vital. También están vital pura magicae, la tierra de las hadas, Mysticum vital, la tierra de los magos y las brujas. Vital infinita sapientia, de los elfos y duendes, y, por último, mi continente: el de los humanos. Vital solae. Cada continente desde la gran guerra lleva la palabra vital para recordarle a todos los seres vivos del planeta que todos somos de vital importancia para cuidar el delicado equilibrio de la vida, aunque el actual rey de mi tierra considere que la vida humana es la única especie vital del planeta...

Mis padres decidieron darme el nombre de Serena Orquydi porque cuando mi madre se enteró de que estaba embarazada de mí, en su patio comenzaron a nacer de la nada hermosas orquídeas blancas y moradas. 

Mi nombre completo debería ser Serena Orquydi Black Fire Moon pero no puedo llevar el apellido de mi padre debido a que mi nacimiento no debió darse. Mi padre es el beta del Rey de los hombres lobo y debido a su puesto tiene que viajar entre continentes constantemente. Así fue como conoció a mi madre, una humana que trabajaba en el Solae Imperial Ministry. 

Que se amaran fue inevitable, porque en ellos se dio algo inusual: mi madre resultó ser la destinada por la diosa de la luna para mi padre, un hecho sin igual, porque desde la gran guerra se prohibió la mezcla de razas por acuerdo de los grandes guerreros que pusieron paz en tierra y agua.

Fue por esa razón que no los mataron. Nadie, ni humanos ni alguna otra especie, puede negarse al llamado de la diosa cuando ella te manda a tu destinado o destinada.

Pero nadie entiende que la diosa que actúa de manera misteriosa y confusa para muchos. Por ello, y para no desafiar a las leyes naturales y a los dioses, se aprobó un acuerdo en el que solamente reyes y reinas podrían desposar a alguien de otras razas; y por ser la primera vez, perdonaron a mis padres y se me permitió nacer bajo la estricta orden de no ver ni contactar a mi padre, la misma orden se aplicó para mi madre. 

Así, mis padres fueron separados y yo crecí como única hija, aunque sé que mi padre me ama, porque jamás dejó de enviar dinero a mi madre y, en secreto, ella cada dos años le envía fotografías mías.

No podría decir que me falta algo material porque mi madre, aunque no conservó su trabajo anterior (de gran prestigio), sí pudo poner una cafetería/pastelería que se ganó gran popularidad en mi territorio y ahora tiene cinco sucursales. Además, está el dinero mensual que manda mi padre, ese al que tanto añoro conocer.

Pero mi vida no es fácil. Soy una mestiza que, si bien no es loba, dado que hasta la fecha no me ha llegado el llamado para transformarme en (algo que las autoridades en mi continente temen), tampoco soy completamente humana.

Mi apariencia llama mucho la atención. Soy de complexión pequeña, delgada y blanca como la leche y ni hablar de mi cabello color rubio casi blanco, mi nariz pequeña y mis ojos de un raro tono gris con morado, que, si bien me gusta, suele resultar mucho entre todos los humanos.

Así que para bien o para mal (sobre todo lo último porque siempre llamo la atención). Y esta semana no será la excepción, porque se anunció que luego de 20 años, la Asamblea Internacional de Especies se llevará a cabo justamente en mi continente y la capital está a solo dos horas de mi hogar... El rey de los hombres lobo tendrá que venir y tal vez con él traiga a su beta... mi padre.

 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.