El sol ya comenzaba a ocultarse y aún no llegábamos al pueblo.
-Mueve más rápido esos pies Armand- Ram estaba alterada, en el camino volvimos a encontrar a otro lobo bestia a quien asesinamos, sin embargo nos tomó tiempo lograrlo
-estoy avanzando los más rápido posible - le contesté mientras presionaba con fuerza el corte en mi pierna derecha producto de la batalla qué tuvimos
-Eres un descuidado, como pudiste permitir que ese maldito animal te haga daño teniendo al sol a nuestro favor- me recriminó mientras veía mi herida con algo de preocupación.
Ram se detuvo y me pidió que hiciera lo mismo. El corte era profundo, las garras de aquel lobo me habían provocado una enorme herida. rompió parte de su atuendo con sus manos y lo coloco como vendaje en mi lastimada pierna
-Esto ayudará de momento, falta poco para llegar al pueblo, los curanderos te atenderán y estarás bien en unos días-
-Gracias, será mejor que te adelantes, estamos a diez minutos de llegar- le sugerí
-¿estas bromeando? Como se te ocurre que te voy a dejar aquí en ese estado. Tendré que llevarte-
Ella dio vuelta y agachó su cuerpo para que yo me trepara a su espalda. Me sentí avergonzado, mi absurdo machismo me exigía no aceptar su ayuda
-¿Que carajos estás esperando Armand? , ¡sube de una vez! -
Sin embargo su carácter era más fuerte. Accedí a su exigencia y me acomodé en su dorso. Comenzó a caminar con pasos acelerados, mientras sostenía el ligero peso de mi delgado cuerpo, seguramente para alguien con un cuerpo muy voluptuoso y con un estatura de 1.78 metros como el de mi amiga, llevar como "mochila" a alguien como yo, no es tan dificultoso.
Llegamos en pocos minutos e ingresamos al pueblo con mucha prisa. Todo a nuestro alrededor era un alboroto, los pobladores corrían de un lugar a otro, llevando más madera hacia las murallas para fortalecerlas. A lo lejos Stum nos observó y se acercó con pasos acelerados
-¿porqué tanta demora soldados? - dio un vistaso a mi pierna - ¡joder! Vaya rápido a buscar a algún curandero, no hay tiempo que perder, lo más probable es que esta noche nos invadan-
-Capitán Stunk - intervino Ram- necesito hablar con Jhonson, ¿donde lo puedo ubicar? -
-está en la plaza, junto con los demás líderes de cada grupo, solo falta usted señorita Ram, necesitamos que nos informe de lo ocurrido-
Ram se dirigió rápidamente a la plaza junto con Stunk, estaba más preocupada en saber como se encontraba Frank que en dar detalles de lo ocurrido. El dolor en mi pierna se volvía más intenso, sin embargo quería saber como se encontraba mi amigo, me dirigí hacia su cabaña con la esperanza de hallarlo ahí, siempre que hay una posible invasión él se queda rezando por un largo tiempo.
Ingresé a su vivienda y para mi sorpresa, Tania que es una de las integrantes del grupo de Jhonson estaba sentada en la cama, sabía que eran muy cercanos pero no pensé que tanto
-¿Frank eres tu? - se levanto del mueble como un resorte al verme ingresar- ah, hola ¿eres su amigo verdad? ¿Donde está Frank? - la sonrisa que se había formado en su rostro, se desdibujo al ver mi pierna
-¿no esta con ustedes?, el fue a darles el alcance pensando que un lobo los había atacado- le pregunté angustiado
-¡¿que?!, me estas bromiando, como es posible que lo hayan dejado ir solo- me reclamó exaltada mientras se tomaba el vientre con las manos
De pronto Ram ingresó a la vivienda con brusquedad y comenzó a observar cada rincón. La desesperación la invadía y lo manifestaba en su rostro, luego nos dio la mala noticia
-Ya está oscureciendo y ¡Frank no ha regresado!