Del Amor Al Odio Solo Hay Un Paso.

- Tu hermana.- Decia Stefan.- ¿Yo conocía a otro vampiro Original?.

- ¿Tu y Rebekah tuvieron algo?.- Hice una una mueca de asco.

Klaus sonrió y se dirigió hacia un ataúd que estaba en todo el centro.

- Si no pueden con la verdad no pregunten.- Nos respondió.

Cuando llego hacia el ataúd lo abrió, y de curiosa me acerque.

- ¿Rebekah?.- Pregunte sorprendía.- Klaus ¿Que le hiciste?.

- No preguntes tanto Elizabeth.- Sonrió.- Ahora vamos a traer a Rebekah devuelta.- Respondió mientras acariciaba la cara de mi hermana.

Stefan se acerco y se detuvo a mirarla.- No la reconozco.

- No le digas eso, su temperamento es peor que el de Elizabeth.- Y le quito la daga.- Ya despierta hermanita.

Habían pasado ya quince minutos, si conté cada maldito minuto y Rebekah no despertaba.

- Cuando quieras Rebekah, el drama le fascina.- Klaus señalo con la cabeza a Stefan. 

- Por que no.- Stefan trato de tranquilizarse.- Me dices lo que esta ocurriendo es obvio que me quieres aquí por una razón.

- Pues tienes muchos talentos.

- Claro.- Stefan trataba de no perder la paciencia.

- De hecho algunos de mis trucos favoritos son tuyos.

- FlashBack -

- Entonces Stefan iluminame, ¿Que te hace digno de una Original como mi hermana?, ella es de sangre pura y tu sangre esta muy diluida.

- No lo escuches Stefan.- Le decia Rebekah.- El es elitista.

- ¿Y el resto de tu familia?.

- Veamos, mate a la mayoría.

- No a todos.- Rebekah interrumpió.- Elizabeth aun sigue con vida.

Stefan pensó.- Ese nombre se me hace conocido.

- No lo creo.- Klaus rió.- Elizabeth es muy inquieta, le gusta viajar a todos lados, pero jamas se acostumbra a uno.

Stefan asintió.- ¿Y eso no te molesta?.- Le pregunto a Rebekah.

- Pues todos tuvimos la opción de elegir, yo elegí el bando ganador al final.- Rebekah agarro la mano de Klaus.

Un hombre se acerco a ellos enojado.

- ¿Donde esta mis esposa?.- Pregunto el sujeto.

- No lo se, me rindo.- Hablaba Stefan.

- ¿Te crees muy rudo?, escondido en un bar, bebiendo licor, una llamada a la policía y se acabo.- Amenazo el hombre.

- Uhh.- Klaus miro a Stefan y comenzó a reír al igual  que los dos tortolitos.

- Laila.- Stefan llamo a una chica que iba subiendo la escaleras.- Laila ven aqui.

- Gracias a Dios, nos vamos.- El sujeto abrazo a la chica.

- No no no.- Detuvo al sujeto y comenzó a hipnotizarlo.- Te quedas.- El hombre obedeció y Stefan asintió.

El sujeto se sentó al lado de Klaus mientras la chica se sentaba al lado de Stefan, Stefan le habia quitado el guante a la chica y había sacado una pequeña navaja de su chaqueta.

- Stefan no seas malo.- Decia Rebekah con una sonrisa.

- ¿Que rayos estas haciendo?.

Sin esperar una respuesta Stefan le había hecho un corte a la muñeca de la chica, y su sangre la vertía en un vaso.

- Muchas gracias Laila, ¿Porque no vas vendarte un poco.- La chica obedeció y se fue de allí.- Quiero que me acompañes con un trago.- Stefan le extendió el vaso con sangre al sujeto, este estaba aterrado.

- ¿Que clase de maniáticos son?.- Estaba a la defensiva el hombre.

- Te dije, bebe.

El hombre agarro la copa y bebio un sorbo pero al sentir el sabor metalico y espeso de la sangre hizo una mueca y alejo el vaso de su boca.

- No dijiste tu nombre.

- Púdrete.

Klaus y Rebekah comenzaron a reír.

- ¿Quieres otro trago?.

- Liam, Liam Grant.

- Liam Grant, dale otro sorbo.

El sujeto bebió todo el vaso mientras los hermanos Originales se reían de el.

- Fin Del FlashBack -

- Era tu fan numero uno.- Klaus se alejaba.

- ¿Por que debería creerte?.- Le pregunto.

- Cuando despierte dile que vaya al bar de Gloria.- Klaus le daba las instrucciones  un guardia.- Luego ofrecele tu carótida y que beba hasta que mueras.- El hombre asintió.

- ¿A donde vamos?.- Pregunte.

- Stefan cree que miento, me confió uno de sus secretos y ahora te lo probare.

- ¿Como?.

- Iremos a tu departamento.

Stefan me miro y yo solo lo ignore.

Habia decidido ir a caminar un poco, estaba cansada de seguir a Klaus y a su intento fallido de regresar al Stefan de los años 20, patético lo se, estaba concentrada en lo mio hasta que mi celular comenzó a sonar.

- ¿Hola?.

- ¿Elizabeth?.

- ¿Que quieres Evan?.

- Esta vivo.