Una semana después
Lucía: todavía no sabes si ya llegaron mis padres. Esta será la primera vez que nos vamos a reunir después de que me encontraste y espero que lleguen muy pronto.
James: seguramente no tardaran en llegar. Además, es demasiado temprano y solo necesitaras esperar un tiempo para que lo hagan.
Lucía: tienes razón. Ahora necesito cambiarte y estar lista cuando ellos lleguen, pero no tengo nada en especial que ponerme este día.
James: eso ya está solucionado, mi hermosa luna. Porque mande a que te hicieran un hermoso vestido, así que por eso no hay ningún problema
Lucía: muchas gracias, James. Siempre te agradeceré por tener estos detalles conmigo, ya que eso significa que piensas únicamente en mí.
James: sabes que para mí es un gusto hacerlo. Solamente que también quiero que te sientas amada y sé que soy un hombre lobo frío que le cuesta mostrar sus sentimientos y solo tú sacas lo mejor de mi alma.
Lucía: no eres así y eso me lo demostrarte al no rechazarme cuanto tuviste la oportunidad de hacerlo. Nada más que esta semana a tú lado ha sido la mejor de mi vida.
James: necesito decirte que te amo tanto y algo que no soportaría nunca en la vida es perderte ahora que al fin te encontré. Espero que lo entiendas si alguna vez me comporto de una manera distinta contigo.
Lucía: nunca me vas a perder. Por que muy pronto voy a ser tú esposa, además no tendrás ninguna razón para comportarte conmigo como lo hacías antes de encontrarme.
James: siempre tienes el poder de tranquilizarme. Sera mejor que me vaya para que Mariana te ayude arreglarte y sobre todo para que cambias.
Él sale de la recámara para hacerlo y a los pocos minutos entra con el vestido de su luna en las manos para decirle que había traído su vestido y ella le da las gracias, pero Lucía le pide que se acerque para tocar su vestido para que de esa manera se lo pueda imaginar y cuando lo hace él toma su mano para que ella se lo pudiera imaginar
Lucía: es hermoso y también por el simple hecho que tú me lo regalaste. Ahora te puedas salir para que pueda empezar a cambiar, por favor.
James: eso quiere decir que estoy cumpliendo mi deber como tú mate, ¿Que es hacerte feliz? Pero necesito dejarte ya que Mariana llego y recuerda que te voy a estar esperando.
Lucía: está bien y espero estar lista a tiempo para poder para recibir a mis padres y también a mi hermano. Solamente que siento una emoción demasiado fuerte en mi corazón al sentir que están cerca.
Él sale nuevamente de su recámara y no le gustaba la idea de estar tanto tiempo separado de su luna. Primero necesitaba controlar a su lobo para evitar que tomara el control, ya que si eso pasara podría ser peligro para ella.
Mariana: buenos días, mi luna. Seguramente debe sentirse feliz porque van a venir sus padres y sobre todo esta sería su primera visita a la manada.
Lucía: tienes razón, Mariana. Además, la llegada de ellos me hace muy feliz, pero siempre me van a ser mucha falta mis padres, ya que son mi familia.
Mariana: ahora necesito que me diga en que la puedo ayudar. Nada más quiero que me lo diga para poder empezar hacerlo, porque el alfa no es demasiado paciente y más tratándose de su luna.
Lucía: entiendo perfectamente lo que me estas tratas de decir y eso lo he comprobado todo este tiempo. Él seguramente debe de estar controlando a su lobo y eso lo hace solo por mí.
Mariana ayuda a su luna arreglarse y para ella era un gusto acompañarla mientras que el alfa no estaba, ya que se encargaba de cuidarla para que no le pasara nada
Lucía: muchas gracias por ayudarme, Mariana. Eres la única amiga que he tenido y sobre todo cada vez que hablas conmigo te siento demasiado sincera.
Mariana: me siento feliz de que me considere su amiga. Solamente que al fin hemos terminado y ahora debemos de bajar por que el alfa está esperando por usted.
Lucía: necesito estar a su lado antes de que lleguen mis padres. Porque quiero que se den cuenta que soy feliz a su lado por si tenían dudas sobre nosotros.