Lucía: no puedo creer que Mariana sea tu pareja eterna. Está sí que es una verdadera sorpresa y sabia que tarde o temprano también ibas a encontrar a tu pareja eterna.
Leonardo: es que la diosa luna así lo quiso y yo no soy nadie para poder evitar sus designios, sino que se que debo de aceptar mi destino a su lado.
Lucía: siempre será mejor aceptarlo. Porque solo con nuestra pareja podemos ser realmente felices y nosotros sabemos eso por ser seres sobrenaturales.
Leonardo: nosotros entendemos perfectamente nuestra verdadera naturaleza. Ahora nuestros padres tienen que organizar dos bodas y la tuya será la primera.
Lucía: me imagino que te vas a llevar a Mariana contigo cuando te vayas de esta manada. Solamente que la extrañare, ya que es mi única amiga.
Mariana: yo también la voy a extrañar. Estoy segura de que nos veremos demasiado seguido y sobre todo su familia nunca la dejaría sola en su nueva vida.
Lucía: mi hermano te hará feliz y eso te lo aseguro. Nada más que su único defecto es que no es paciente y tendrás que enseñarle hacerlo.
Mariana: no tenia que decírmelo. Porque eso ya lo sé y también tiene el comportamiento de todos los alfas y jamás me imagine que la diosa luna me elegiría a uno como ellos.
Lucía: te recuerdo que ella sabe lo que hace. Eso significa que mis padres estarán felices por nosotros, ya que estarán viendo la felicidad de sus hijos.
Helena: la felicidad de un hijo es lo más importante para nosotros. Porque ustedes eran los únicos que nos faltaba para hacerlo y es demasiado hermoso verlos de esa manera.
Sebastián: tiene razón, tu madre. Debemos de subir a nuestras recámaras a tomar un descanso para poder vernos en la cena, ya que mi niña debe de estar cansada.
Ellos se levantan de sus asientos para poder despedirse y cada quien se dirige a sus recámaras. James carga a su luna, porque era la única manera de seguir evitando que se cansara, ellos a los pocos minutos llegan y cuando lo hacen la acuesta en su cama y él también lo hace
Lucía: me siento feliz al tener a mi familia en este lugar. Además, siempre me haces sentir amada por ti, pero no es fácil tener una pareja que es ciega.
James: sabes perfectamente lo que pienso sobre tu ceguera. Necesitas evitar recordar que viviste en la obscuridad, aunque sé que eso sería imposible.
Lucía: por supuesto que lo sé y como tu siempre me dices que mi ceguera jamás ha sido un impedimento para que podamos estar juntos.
James: ninguna discapacidad puede ser un impedimento para que estemos juntos. Ahora quiero que escuches mi corazón decirte cuanto te ama.
Lucía: lo estoy escuchando y me gusta demasiado hacerlo. Pero no sabes cómo espero a que se llegue el día de nuestra boda, ya que eso significara otro cambio para nosotros.
James: ya te presenté como mi luna y lo único que nos falta es casarnos. Nada más que yo también estoy esperando a que se llegue ese hermoso día.
Lucía: me gustaría que me dieras un beso en este mismo instante y siento que eso lo podemos hacer. Porque nadie esta a nuestro lado.
James: eso significa que nadie podrá impedírmelo. Sera mejor que lo haga y cuando termine de hacerlo necesitaras dormirte por unas cuantas horas.
Lucía: falta muy poco tiempo para que bajemos a cenar. Solamente que si quieres me lo puedas dar más tarde y yo por lo mientras me dormiré.
James: no te dormirás sin antes que te lo de. Debes de prepararte para que lo puedas recibir y te recuerdo que tu misma me dijiste que lo hiciera.
El se acerca a su luna para poder besarla y cuando termina de hacerlo se separa de ella, Lucía se queda dormida a los pocos minutos y el solo la observa, pero de esa manera el tiempo siguió su curso hasta que al fin se llega el día de su boda