La biblioteca magica

El segundo día en la Academia de Magia de Eldoria comenzó con la misma emoción que el primero. Lira se despertó temprano y se dirigió al comedor para el desayuno, donde se encontró con Liora y otros estudiantes de primer año. Después de compartir una comida llena de animadas conversaciones sobre sus clases y experiencias, los estudiantes se dirigieron a sus respectivas aulas.

La primera clase del día para Lira y Liora era Historia de la Magia. La profesora, una mujer sabia llamada Serenia, tenía una presencia imponente y unos ojos que parecían ver más allá de lo visible.

"Buenos días, estudiantes," comenzó la profesora Serenia. "Hoy vamos a explorar los antiguos orígenes de la magia y cómo se ha desarrollado a lo largo de los siglos. La magia es tanto un don como una responsabilidad, y es esencial comprender su historia para usarla sabiamente."

Mientras Serenia narraba fascinantes historias sobre magos legendarios y antiguos artefactos mágicos, Lira no podía evitar sentirse inspirada por el rico legado de la magia. Al final de la clase, la profesora les asignó una tarea: investigar sobre un mago o una hechicera histórica y presentar sus descubrimientos en la siguiente clase.

"Creo que deberíamos ir a la biblioteca," sugirió Liora mientras salían del aula. "Es el mejor lugar para encontrar información sobre magos históricos."

Lira asintió con entusiasmo y siguió a su amiga por los pasillos del castillo hasta la gran biblioteca. La biblioteca de la academia era un lugar vasto y majestuoso, con estanterías que se extendían hasta el techo, llenas de libros de todos los tamaños y colores. El aire estaba impregnado de un aroma a pergamino antiguo y magia.

"Wow," murmuró Lira, maravillada ante la vista. "Este lugar es increíble."

Liora sonrió. "Lo sé, es mi lugar favorito en toda la academia. Vamos, vamos a buscar algunos libros sobre magos históricos."

Las dos amigas comenzaron a explorar las estanterías, buscando libros que les llamaran la atención. Lira encontró un viejo tomo con el título "Grandes Hechiceros de la Edad Antigua" y se sentó en una de las mesas de lectura para examinarlo. Liora, por su parte, encontró un libro sobre hechiceras legendarias y se unió a Lira en la mesa.

Mientras leía sobre los grandes hechiceros del pasado, Lira se encontró con la historia de una hechicera llamada Elara, que había vivido hace siglos y era conocida por su valentía y su poder elemental. La historia de Elara resonó con Lira de una manera especial, y decidió que sería el tema de su investigación.

"Voy a investigar sobre Elara," anunció Lira a Liora. "Parece una hechicera increíble."

Liora asintió, sonriendo. "Buena elección. Yo voy a investigar sobre Morgana, una hechicera famosa por sus habilidades en la magia de transformación."

Pasaron el resto de la tarde sumergidas en sus investigaciones, tomando notas y discutiendo sus hallazgos. La biblioteca estaba en silencio, interrumpido solo por el suave susurro de las páginas de los libros.

Al caer la noche, Lira y Liora se sintieron satisfechas con sus avances y decidieron regresar a sus dormitorios. Mientras caminaban por los pasillos, se encontraron con el Maestro Alaric, quien les dirigió una mirada amable.

"Espero que hayan encontrado lo que buscaban en la biblioteca," dijo Alaric.

"Sí, Maestro Alaric," respondió Lira. "La biblioteca es increíble, y hemos aprendido mucho sobre magos históricos."

"Me alegra oír eso," respondió Alaric. "La biblioteca es un tesoro de conocimiento y un lugar perfecto para descubrir los secretos de la magia. Recuerden que la magia no es solo poder, sino también sabiduría y responsabilidad."

Lira asintió, sintiendo el peso de las palabras de Alaric. Sabía que tenía mucho que aprender y muchas responsabilidades por delante, pero estaba decidida a convertirse en una hechicera sabia y poderosa.

Esa noche, mientras se preparaba para dormir, Lira reflexionó sobre su día en la biblioteca y las historias inspiradoras que había leído. Estaba emocionada por compartir sus descubrimientos en la clase de Historia de la Magia y por seguir explorando los misterios de la academia.

Con una sonrisa en los labios y el corazón lleno de esperanza, Lira se quedó dormida, soñando con las aventuras y los desafíos que le esperaban en su camino hacia convertirse en una gran hechicera.