M A L D I T A S

La Persecución de Paula de Eguiluz

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Paula de Eguiluz nació en la ciudad de Cartagena de Indias, en la actual Colombia, a principios del siglo XVII. Era hija de esclavos africanos, traídos a América por los españoles. A pesar de las duras condiciones de la esclavitud, Paula de Eguiluz se convirtió en una destacada curandera y profesional de la salud en su comunidad.

La vida de Paula de Eguiluz estuvo marcada por la resistencia y la supervivencia. Como esclava, enfrentó la crueldad y la opresión de los colonizadores españoles. Sin embargo, también encontró formas de preservar su cultura y su identidad africana. La medicina tradicional africana, que había aprendido de su madre y sus abuelas, se convirtió en una herramienta poderosa para su supervivencia y su éxito.

Paula de Eguiluz se convirtió en una figura respetada en su comunidad, conocida por su sabiduría y su habilidad para curar enfermedades. Su práctica médica se basaba en la combinación de técnicas africanas y europeas, lo que le permitió desarrollar un enfoque único y efectivo para tratar a sus pacientes.

A medida que su reputación crecía, Paula de Eguiluz también se convirtió en una líder en su comunidad. Ayudó a organizar a las mujeres esclavas y a las comunidades afrodescendientes para luchar por sus derechos y su libertad.

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En la década de 1620, la Inquisición española llegó a Cartagena de Indias, y con ella, la persecución de las personas acusadas de brujería y herejía. Paula de Eguiluz, como curandera y líder en su comunidad, se convirtió en un blanco fácil para los inquisidores.

LA PRIMERA acusación contra Paula de Eguiluz llegó en 1622, cuando una mujer española la denunció por practicar la brujería y curar a personas con "remedios diabólicos". La Inquisición abrió una investigación y Paula de Eguiluz fue llamada a declarar.

A pesar de que no se encontraron pruebas contra ella, Paula de Eguiluz fue sometida a tortura y presión para que confesara sus supuestos crímenes. Sin embargo, ella se negó a admitir cualquier culpa y mantuvo su inocencia.

LA SEGUNDA acusación llegó en 1625, cuando un grupo de esclavos africanos la denunció por practicar la brujería y hacer pactos con el diablo. La Inquisición volvió a abrir una investigación y Paula de Eguiluz fue arrestada y encarcelada.

LA TERCERA y última acusación llegó en 1630, cuando una mujer española la denunció por curar a personas con "remedios diabólicos" y hacer pactos con el diablo. La Inquisición condenó a Paula de Eguiluz a muerte, y ella fue ejecutada en la hoguera en 1630.

La tortura de Paula de Eguiluz fue un proceso brutal y deshumanizante. Los inquisidores utilizaron various métodos para intentar obtener una confesión de ella, incluyendo:

- EL POTRO: Un dispositivo que consistía en una tabla con cuerdas y poleas que se utilizaba para estirar y descoyuntar los miembros del cuerpo.

- LA CARRUCHA: Un dispositivo que consistía en una polea y una cuerda que se utilizaba para levantar y colgar al prisionero, causando un dolor intenso en los hombros y las articulaciones.

- EL AGUA: Se le vertió agua en la nariz y la boca para simular la sensación de ahogamiento.

- LA FLAGELACION: Se le azotó con látigos y varas para causarle dolor y humillación.

A pesar de la tortura, Paula de Eguiluz se negó a confesar cualquier crimen y mantuvo su inocencia. Su valentía y resistencia en frente de la tortura son un testimonio de su fuerza y determinación.

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