ORDEN CINCO: UNIDAD A1.

Después de la reunión con los altos oficiales, Kurosawa fue conducida a los dormitorios de la Unidad A1. Era un edificio imponente de varios pisos, con un diseño elegante y funcional. Al ingresar, se encontró con un vestíbulo amplio y bien iluminado, donde cadetes iban y venían en un constante flujo de actividad.

Un oficial de menor rango la guio por un largo pasillo hasta llegar a su habitación asignada. Era un cuarto pequeño pero ordenado, con una cama individual, un escritorio y un armario empotrado. Kurosawa dejó su maleta en el suelo y observó a su alrededor. A pesar de su sencillez, el lugar emanaba un aire de disciplina y eficiencia.

Después de desempacar sus pertenencias y colocar su nuevo uniforme en el armario, Kurosawa decidió explorar los alrededores. Salió de su habitación y recorrió los pasillos, familiarizándose con la disposición del edificio. Eventualmente, llegó a una sala común donde varios cadetes descansaban o estudiaban.

Al ingresar, captó varias miradas curiosas en su dirección. Era evidente que su reputación la precedía, y algunos cadetes la reconocieron de inmediato. Kurosawa decidió ignorar las miradas y se sentó en un rincón apartado, sacando un libro de estrategia militar para leer. El libro, una obra maestra escrita por uno de los estrategas más renombrados del Imperio, detallaba las alianzas y traiciones que habían moldeado el destino de la galaxia antes de que Kayn tomara el control. Mientras leía, su mente viajaba a esos tiempos de intriga y poder, donde los grupos imperiales competían por la supremacía en un juego mortal de astucia y fuerza.

Pasaron algunas horas hasta que se escuchó una voz resonar por los altavoces del edificio.

"Atención, Unidad A1. Se solicita su presencia en el Auditorio Principal en 30 minutos para una presentación formal. Repito, Unidad A1, preséntense en el Auditorio Principal en 30 minutos."

Kurosawa cerró su libro y se puso de pie, uniéndose al flujo de cadetes que se dirigían hacia el Auditorio. Al llegar, se encontró con una sala de grandes dimensiones, con filas de asientos dispuestas en semicírculo frente a un escenario principal.

Tomó asiento en una de las filas delanteras y esperó pacientemente. Poco a poco, el Auditorio se fue llenando con algunos jefes militares que expectantes tomaron asiento. Paso poco tiempo hasta que todos los asientos estuvieron ocupados.

De repente, Kurosawa escuchó una voz familiar que la hizo tensarse.

—¡Oye, Kurosawa! ¡Por aquí!

Se giró y, para su consternación, vio a Ren Takagi agitando la mano desde unas filas más atrás. El mismo recluta hiperactivo e irritante que había conocido en Cerullion estaba allí, sonriendo ampliamente como si fueran viejos amigos.

Kurosawa frunció el ceño, pero antes de que pudiera decir algo, un oficial de alto rango subió al escenario, captando la atención de todos los presentes. Era el momento de la presentación formal de la Unidad A1. Alrededor, varias camaras de intercomunicacion galactica. La gente estaba sumamente interesada en los reclutas, entre ellos, claramento los peces gordos de la potilica galactica. Entre los periodistas se encontraba Kaido, quien habia traido todo el equipo de comunicacion que tenian en Sorna.

En palabras del mismo Jacko "La propaganda es el arma mas poderosa en toda la galaxia. Con ella, podia mover masas y crear topicos de interes que dirigieran la atencion hacia la Military, fortaleciéndola aún más en el juego de poder que se avecinaba.

El oficial de alto rango tomó el podio y se aclaró la garganta mientras las luces del escenario se enfocaban en él. El silencio cayó sobre el auditorio cuando comenzó a hablar con una voz potente y firme.

—Damas y caballeros, reclutas y oficiales de la Magika Military. Es un honor darles la bienvenida a la presentación formal de la Unidad A1, la élite de nuestra academia.

Hizo una pausa dramática, recorriendo el auditorio con la mirada.

—En estos tiempos turbulentos que enfrenta nuestra Alianza, después de la trágica pérdida de Kayn, es más importante que nunca contar con guerreros excepcionales dispuestos a defender nuestra forma de vida.

La mención del nombre de Kayn provocó un murmullo entre los presentes. Kurosawa notó las miradas solemnes y algunos rostros sombríos entre los oficiales sentados en las primeras filas.

—La Unidad A1 representa lo mejor de lo mejor —prosiguió el oficial—. Estos jóvenes reclutas han demostrado tener el coraje, la disciplina y las habilidades necesarias para proteger a nuestra galaxia de las fuerzas oscuras que amenazan con destruirnos.

Las cámaras de comunicación intergaláctica se enfocaron en el escenario, transmitiendo las imágenes en directo por toda la Alianza. Kaido, apostado estratégicamente con su equipo de transmisión, observaba atentamente cada movimiento y expresión de los reclutas.

—Ahora, permítanme presentarles a los miembros de esta unidad de élite —anunció el oficial, haciendo un gesto hacia las filas de cadetes —. Kai Zamira.

Kai se puso de pie con una amplia sonrisa en su rostro. Era una joven esbelta y atlética, con un cabello castaño claro recogido en una coleta. Sus ojos avellana brillaban con confianza y determinación. Caminó hacia el escenario con pasos seguros y una postura erguida que denotaba orgullo.