Al despertar veo que todo a mi alrededor está oscuro siento como mi cuerpo está en una superficie blanda por lo que asemejo a una cama intento jalar una de mis manos para arreglarme un mechón de cabello que me cae por el rostro.
Pero en ese instante me doy cuenta que mis muñecas han sido sujetadas por esposas al igual que mis tobillos.
No sé dónde estoy, tengo mucho miedo.
Tantas preguntas que surgen en mi cabeza sin nadie que las pueda responder.
El miedo que siento no se asemeja a nada más que la oscuridad de una habitación que no sé si cuando encienda la luz seguiré siendo la misma.
Papá, perdón, ven por mí.
Escucho como la puerta se abre y el miedo más fuerte vuelve a mí.
Seguro pronto publicaré un nuevo capítulo, espero y sea pronto, ya saben lo mismo de siempre en mi vida, nos seguimos leyendo, besos 💋