Más allá de las apariencias.

Capítulo 1: La rosa tiene espinas.

Abrí mis ojos lentamente sintiendo como las manos y los broches de maquillaje se retiraban de mí cara. Observé mí rostro en el reflejo del espejo y luego sonreí levantando un poco mí cabeza. Me veía muy bonita con el trabajo que habían hecho.

—Chicas, esto me queda espectacular. Se superaron, —dije agarrándome de los posadores de la silla.

—Todo le queda bonito porque usted es bonita, —dijo la maquillista como toda una lamebotas.

—Lo sé nena, —respondí indiferente.

Agarré mí celular y abrí la red social que más frecuentaba, instagram. No pasó mucho que entró la estilista con un carrito lleno de perchas y ropas. Por alguna razón no la soporto, es muy gritona y se cree dueña de la empresa.

—A ver niñas, acá está el vestuario para las dos que salen en la portada Alessia y Wada, —gritó con esa voz chillona.

Se suponía que debía salir yo sola en la portada de la revista, pero si o si necesitaban a alguien más y como Wada es... De piel oscura, decidieron ponernos juntas. Tuve muchas objeciones por muchos motivos, pero me negaron todo como una acusada por robo en una corte.

Nos vistieron con ropas brillantes de rojo y unos que otros accesorios. Fuimos a la sección fotográfica y nos sentamos como el fotógrafo decía sobre una tela roja, sosteniendo en la mano el producto que promocionaban este mês. Un labial en tres tonos de rojos. El fotógrafo pidió que apoyara mí cabeza sobre las piernas de Wada, lo cual era totalmente normal para nosotras. Estábamos acostumbradas a todo tipo de poses, maquillajes y vestuarios. Solo quería terminar para tomar algo fresco y ver cómo salí en las fotos.

—Bien muchachas, descansen, —dijo el fotógrafo apretando su cuello.

Me levanté y caminé hacia mí lugar de descanso, pero no había ninguna botella de agua fría esperando por mí sobre la mesita.

—Serena, ¿Por qué no hay agua en mí mesa? —pregunté confundida.

—No lo sé, —dijo mí compañera volviendo a lo suyo.

—Mataré a Eric.

Terminé de decir esa frase y Eric se paró frente a mí.

—Renuncio. Es por eso que no le traje su agua.

—¿Qué? —dije sorprendida.

Eric había sido mí asistente desde hace tres años, no entiendo porque ahora renunciaba a su trabajo como si se tratase de nada. Él apretó su mandíbula, se dió la vuelta y se fue. Dejando a todos con la boca abierta.

—¿Y a este que le pasó? —Miré a Sere con una ceja levantada y después no pude evitar reírme entre dientes.

—Bueh, déjalo ya va a volver llorando, —dijo ella levantando los hombros.

Me senté en mí silla y me miré al espejo, estaba pensando en que le pasaba a Eric para salir corriendo de ese modo cuando algo frío tocó mí brazo e hizo que me exaltará.

—Disculpa, no quise molestarla. Le traje una botella de agua fría señorita.

Levanté mí vista y miré el rostro de aquel hombre.

¿Nuevo modelo?

Me paré de mí silla para quedar frente a él y observé detenidamente sus ojos oscuros que tampoco se apartaron de mí, aunque él parecía estar lleno de confusión.

—Disculpa señorita, ¿Está usted bien?

—¡¿Estás loco?! —grité saliendo de mí distracción—. ¿Qué tal si me caía del susto?

—Pero usted ni reaccionó...

—Ya entiendo lo que sucede.

—¿Qué?

—Querías acercarte para que la gente malinterprete la situación y piensen que tenemos un interés romántico. Por eso hiciste todo esto, pero no va a funcionar. No juegues conmigo, conozco muy bien a los tipos como tu.

Él se quedó atónito, sin decirme nada, negaba con la cabeza repetitivamente, tanto así que quería reírme en su cara.

—Era una broma. Nadie se creería eso. Muchas gracias por el agua, —dije agarrando la botella y tomando asiento. Él todavía seguía parado sin poder reaccionar así que me volteé a mirarlo y le hice señas con la mano para que se fuera—. ¿Algo más?

—No, no, —dijo marchándose casi corriendo.

—Eres cruel Ales, —dijo Serena con una mano en el pecho.

—No te hagas la inocente, lo dije bromeando. Tu lo harías de verdad.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.