Un San Valentín Especial.
Otro año más es San Valentín y yo sin pareja, esto me deprime, pero bueno, que le voy a hacer.
Siempre he sido una persona muy romántica, por eso, creo que es el motivo por el que estoy sola, ya que, espero demasiado de los hombres.
Son las 9h de la noche y ya estoy casi lista para ir a la fiesta que han celebrado en la facultad, con mis mejores amigos, Emma y Tom.
Emma es mi mejor amiga desde que íbamos a la guarderia y a Tom lo conocí en secundaria, todos se reían de él porque era afeminado y gay, pero yo no aguanto las injusticias y lo defendí y desde aquel día no nos hemos separado, es como una chica más.
Llaman al timbre, serán ellos que han llegado a recogerme, cojo mi bolso y salgo corriendo hacia la puerta de la calle para abrirla.
Hola chicos - les digo con la voz apagada.
Hola Lili! ¿Pero que te pasa? Anímate mujer, que nos vamos de parranda!!! - dice Tom eufórico como una loca.
-Si, lo sé, pero este día me deprime mucho, me recuerda que no tengo pareja, no lo puedo evitar - digo cerrando la puerta de casa.
Vivo sola en un apartamento cerca de la facultad. Mi padre y yo hicimos un trato, si iba a la facultad, él me pagaría un alquiler, económico claro! para que fuera independiente y pudiera concentrarme en los estudios, ya que, en casa somos siete personas, mis padres, mis 4 hermanos y claro, parece una selva.
-Animate, nosotros también estamos solteros y no vamos como alma en pena - dice Emma mientras me da un abrazo.
-Lo sé, pero yo soy muy romántica, espero a mi príncipe azul - digo un poco ñoña, mientras nos montamos en el coche.
-Si y por eso te he dicho muchas veces que dejes de leer tantas novelas románticas, eso solo pasa en las películas -Dice Tom en modo regañadientes.
-Vale, no me mareeis, ya cambio de actitud, ¡¡venga vamos de marcha!! - Digo para que dejen de agobiarme.
Después de 10 minutos llegamos a la fiesta, está a tope de gente, me agobia un poco la multitud, pero en cuanto me beba dos copas se me pasará.
Saludamos a algunos compañeros de clase y nos dirigimos a la barra a pedir nuestras copas, antes de ir a la pista a bailar.
-Hola, ¿que te pongo? - Me dice el camarero que va todo trajeado de negro y una camisa blanca, la verdad que no está nada mal.
-Ponme tres cubatas de JB con cola - le gritó a todo pulmón para que me oiga.
El chico nos pone los cubatas y vamos hacia la pista a bailar. Empezamos a movernos como locos al ritmo de Beyoncé, nos gusta mucho esta canción y lo doy todo en el escenario, ya me he terminado el cubata, y les digo a mis colegas que voy a pillarme otro.
Ya estando devuelta en la barra y esperando mi turno, veo a lo lejos, al hombre de mis sueños, alto, moreno, musculoso... Y lo mejor de todo, se está acercando a mi!! Soy bastante tímida y aunque ya me he bebido mi primera copa, aún no voy lo suficiente achispada para hablar con un extraño y menos con ese monumento.
Hola preciosa, te he visto a lo lejos y me has impresionado - dice con una voz fuerte y seductora. Me guiña un ojo y sonríe.
Te invito a una copa, ¿que quieres? - Me pregunta mientras se pega a mi, cada vez hay más gente y estamos un poco apretados. Lo miro a los ojos, los tiene del color del mar, me encanta, siento muy fuerte los latidos de mi corazon y me cuesta respirar, nunca me había sentido así.
-Si...hem...JB con coca cola. - Le digo casi sin poder hablar. Me pone tan nerviosa que parece que no sepa hablar.
Nos trae las copas el camarero y el chico que no se como se llama la coge y me la da. La agarro como puedo, sigo en trance, mirando esos ojos como el mar, que hacen que me pierda en ellos.
¿Me escuchas?- dice el desconocido que tengo delante, pero me gustaría que no lo fuera.
Si, perdona, ¿que decías?- digo volviendo un poco a la tierra.
Te decía, que me llamo Ian y ¿tú ?- me pregunta mientras me da el cubata que había dejado el camarero.
-Si...he...me llamo Lili, ¡encantada! Y gracias por la copa, pero me tengo que ir con mis amigos.-digo nerviosa y temblando.
-vale, pero dame tu número de teléfono por lo menos.-dice con una sonrisa atrayente. No se qué me pasa, pero no me puedo resistir, siento como si lo conociera de toda la vida y no quiero separarme de él, pero me da un poco de miedo esta sensación.
si...claro...686557523... Lo siento me tengo que ir, ¡hasta luego!-digo mientras me voy pitando hacia la pista donde están mis amigos.
En cuanto me ven mis amigos me cogen del brazo y me llevan a fuera para poder hablar, nos apoyamos en nuestro coche, bueno en realidad es de Emma, pero es como si fuera de los tres. Me miran los dos fijamente.
-¿Que pasa? - pregunto desconcertada.
-Vale, chica suéltalo-dice tom con tono acusador.
¿que suelte que? - digo ya sin entender nada.
-si, no te hagas la tonta, te hemos visto hablar con un tremendo monumento, cuenta.... Cuenta....-dice Emma más curiosa de lo normal.
¡ha! Eso...que susto me habéis dado...ahora os lo iba a contar, se llama Ian, dice que le he impresionado, me ha invitado a la copa y me ha pedido el número de teléfono.-digo emocionada.
-¿Enserio? ¡¡Que pasada!! Esta como un tren, que envidia me das.- dice Tom todo envidioso.
-Si, ¿pero habéis quedado o algo? - dice Emma cómo una detective, cuando empieza ya no para.
-No, lo acabo de conocer, ya he corrido bastante con darle el teléfono, nunca lo doy. - digo
-Si, lo sabemos, por eso se que este si que te ha gustado, pero mucho.- dice Tom, me conoce demasiado bien, no se le escapa ni una.
no lo sé, solo sé que cuando lo he visto venir hacia mi, me ha parecido el chico de mis sueños y cuando estaba hablando con él, me latía muy rápido el corazón y me costaba hasta respirar, nunca me había pasado.- digo con la voz un poco ñoña.
-ay!!! Que guay, Lili se nos a enamorado.-dice Emma eufórica.
-Si, para cuando la boda!!.-dice Tom bromeando.