Matrimonio falso, amor verdadero

Capítulo 2

Me despierto en una cama, estoy desnuda y a mi lado hay un hombre muy guapo. Él es rubio y está completamente desnudo. Dios mío ¿ Qué he hecho? Esto es obra de Gloria y de Julia. Me levanto rápidamente y me visto, salgo del hotel corriendo, quiero llegar a mi casa lo antes posible. Así que tomó un taxi y me dirijo hasta allí. Después de veinte minutos de trayectoria, llegué hasta mi casa. Cuando entre por la puerta, mi adorado padre me lanzo un vaso a la cara, lo pude esquivar al tiempo. El señor García es moreno, tiene cuarenta años, se llama Diego. 

Diego — ¿SE PUEDE SABER DONDE ESTUVISTE TODA LA NOCHE? 

Kilye — Mm.... Me encontraba mal y estuve en la casa de una amiga. 

Julia — ¡ERES UNA ZORRA! El señor lucían te estuvo esperando y como no apareciste hemos pedido una oportunidad de hacer negocios con él. 

Kilye —¿ Cómo ? Sois unos desgraciados. 

Diego — ¡¡ Tú ERES UNA DESAGRADECIDA!! Te hemos educado, alimentado y vestido. Lo mínimo que podrías hacer era pasar la noche con el señor Lucían. 

Kilye — ... Jamás me acostaré con él. Me voy.

 Julia — ¿ Dónde vivirás? No tienes donde caerte muerta. Cariño y si¿La casamos con Scott? No, no, Scott es un viejo verde. Hay un rumor de que cuando se cansa de alguna la Mata y yo no quiero eso. Tengo que buscar una solución o acabaré muy mal.

 Diego — Imposible, a él no le gusta tan jóvenes. Él las prefieres un poco mayor que esta. Ya buscaré algo, pero mientras tanto, irás esta noche a la casa del señor Lucían y vas te vale de no mete la pata... 

No aguanto más en esta casa, me largo. Me dirijo hasta mi habitación que es el ático. Cuando me instalaron allí, no me dejaron sacar nada de allí, por eso solo tengo una cama y solo puedo guardar la ropa en cajas. Cuando entró al ático, lo primero que hago es cambiarme de ropa y una vez hecho cogí unas maletas y comienzo a meter mis cosas. Todavía no sé donde iré, lo más seguro es que le pida a Susana que me deje vivir con ella. Todavía no me creo que me drogarse para sus beneficios, sé que para ellos no valgo nada, pero hacerme eso es imperdonable. Cuando ya lo tengo todo, bajo con cuidado de no hacer ningún ruido, me dirijo hasta la puerta de la cocina y salgo por allí, le envió un mensaje a Susana para preguntar si me puedo quedar unos días con ella. No me contesta, creo que está trabajando. Llegué a la calle y cuando llevaba un rato caminando, una limusina se para a mi lado. Alguien baja la ventanilla, es el chico de anoche.

 Desconocido — Sube, tenemos que hablar. Dudo durante unos segundos. Desconocido He dicho que subas.

 — Eres un borde ¿ Los sabías ? Subo al coche, mientras que el chofer coger mis cosas y las mete en el maletero. 

Desconocido — Me llamó Cristián López. 

Kilye — Soy kilye García. 

Cristian —Toma estos documentos y firmarlos. 

Kilye — Esto ¿ Qué es? 

Cristian — Es un contrato de matrimonio.

 Kilye — ¿Matrimonio ? 

Cristian — Sí, estaremos casados durante dos años. Aunque es un matrimonio falso, no puedes tener ninguna relación con ningún hombre. También te pagaré generosamente y te daré una casa para que vivas. 

Kilye —¿Y tú ?

 Cristian — Yo tampoco tendré a nadie. 

Kilye — Pero ¿ Porque? 

Cristian — Es muy sencillo, te prometí hacerme responsable y además con esto me quitaré de encima a mi familia que quieren que me casé. Leo el contrato, me sorprende las cláusulas que tiene. Hay una que poner que durante el matrimonio él me ayudará con todo, siempre cuando no tenga ningún novio o amante durante el matrimonio. Después de leerlo durante un buen rato lo firmó. 

Cristian — Perfecto, ahora mismo iremos a la Oficina de asuntos civiles y nos casamos. 
 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.