¿me darías un último beso?

6. Clan Ivanok

“Si hay algo que sé que es cierto, es que no importa cuán grande se vuelva tu imperio, no es nada, si no tienes a tu familia a tu lado. La familia es para siempre hasta el último de tus alientos.”

 

El día de hoy sabría que comenzara algo difícil ya que al despertar había visto un mensaje de mi padre que había reunión familiar, no sabía de qué se trataba ya que solamente pasaba en momentos necesarios la última vez había sido por el comportamiento inapropiado de Alina.

 

Respondí el aviso de mi padre con un simple “claro, nos vemos”. Me fui al chat con mis hermanos para poder preguntar si tenían idea sobre la reunión familiar

 

The Ivanok

 

“Kimberly”

 

Hola, ¿Saben sobre qué va la reunión? ¿Alguno hizo algo de lo que no esté enterada?

 

“Alina”

 

Tengo un par de ideas, pero no sé si es sobre eso me he comportado bien dentro de lo posible.

 

“Viktor”

 

Ni puta ideas, tampoco es como que me fuera a interesar en ello.

 

Al no tener más información suspire, a veces no eran de mucha ayuda realmente. Me destape para sentarme en la cama y estirarme un poco. Me coloque mis pantuflas para ir al baño y darme una buena ducha matutina.

 

Al acabar mi ducha comencé a arreglarme ya que me había levantado algo tarde y no tenía tiempo de hacer ejercicio sino llegaría tarde y era algo que realmente no deseaba. Me vestí con un vestido floreado que llegaba hasta mis rodillas junto unos tacones negros a juego me coloqué unos aretes pequeños y un collar el cual poseía un dije pequeño de corona.

 

 Al bajar me encontré en la sala con mis padres, pero sin rastro alguno de mis hermanos. Mi padre se acercó a mí dejando un beso en mi frente. —Kim, mi vida ¿Cómo te encuentras? Tu madre me ha contado sobre su discusión del día de ayer — Rodé mis ojos mirando a mi madre de reojos quien poseía una sonrisa— Espero que no vuelva a ocurrir una cosa como esas Emily, Kimberly no tiene porqué pedirle disculpas — Mi padre se volteó en dirección de mi madre quien frunció el ceño cruzándose de brazos.

 

—Esto debe ser una broma Adam, tienes que ponerle un alto a Kimberly no a mí, ella es nuestra hija me parece una falta de respeto, debe aprender límites se está convirtiendo más bien ya es una niña malcriada, mimada, berrinchuda, superficial y ya ni corazón tiene aún tenemos tiempo de hacer las cosas bien con Kimberly como lo hice con Viktor y Alina ellos son bondadosos, amorosos, educados y son las personas más buenas que puedo conocer — Mi madre estaba más que furiosa realmente se había creído al comienzo que mi padre me iba a regañar a mi cosa que era evidente que no, yo no era la equivocada.

 

—Emily, ella no está equivocada Kimberly no tiene porqué pedirle perdón a una empleada ¿Porque debería hacerlo? Esta casa está a su nombre y así no lo fuera no tiene por qué rebajarse con la servidumbre. — Mi padre dio un paso al frente dejándome detrás de él mientras le mantenía la mirada a mi madre, parecía que iban a salir chispas de odio de los mayores.

 

—Buenas, Madre, Señor— La presencia de Alina de cierta forma hizo que dejarán de discutir y se enfocarán en la del medio del clan. 

 

Mire a mi padre quien inspeccionaba a su hija claro que en eso íbamos estar de acuerdo usaba ropa muy vulgar nada de clase tenía ella era la oveja negra de la familia.

 

—Hola, Hola ¿Qué pasa? — Viktor entró como si nada comiendo una dona llena de azúcar mi mirada bajó hacia su camiseta que había rastros de labial lo cual no era sorpresa para nadie, la otra oveja negra de la familia ahora que lo pensaba definitivamente era la única con clase.

 

—¿Esas son formas de saludar? Tu hablas de educar a Kimberly y mira cómo son tus hijos. Mi niña es la más educada del mundo y como dije es la única. Pero no estamos aquí para hablar de la educación de ellos sino de otro tema.

 

—Son tus hijos también Adam, Kimberly no es la única — Rodó sus ojos sentándose en el sofá de la sala. A cada uno de sus lados se sentaron Alina y Viktor, mientras que mi padre y yo nos sentamos en el sofá de enfrente juntos.

 

—Esta mañana tuve una reunión con los Levis y luego de haber visto algunas cosas que no me parecían adecuadas hemos terminado el compromiso de William y Kim, encontraremos alguien digno de ti princesa. — Sus palabras tomaron por sorpresa a todos los que estaban en la sala, si bien se lo había pedido no esperaba una respuesta tan rápida ni mucho menos que todo estuviera tranquilo. 

 

—¿A qué se debe eso? El vato me cae mal, pero me sorprende que estés tomando está elección digo cuando yo quise me dijiste que no hasta hace poco — Alina parecía confundida aún que entendía ella por meses había intentado romper su compromiso y luego de varios escándalos de su parte la familia Marshall había roto el compromiso por el bien de su imagen.

 

—¿Qué fue lo que hizo el cretino ese? Puedo ir a romperle la cara si te hizo algo malo Kimby.

 

—Simplemente se lo pedí a papá y creo que comprobó que él y yo no éramos la mejor opción para mí felicidad ni podría proporcionarme todo lo que merezco. — Me encogí de hombros no tenía ganas de explicar todo lo que había sucedido especialmente porque sucedía que quería tener ciertos secretos aún para mí.

 

—No me molesta el hecho que se acabará su compromiso, me molesta la diferencia que haces entre los tres. Alina y Vik se cansaron de decirte que no eran felices y que no querían estar con sus compromisos, pero sinceramente no te importo se salvaron por cosas que escapaban de tus manos y claro mucho tiempo después, pero como Kim te lo pide tú no dudas en cumplir cada uno de sus caprichos.

 

Mis hermanos asintieron en silencio, ambos estaban de acuerdo con ello en parte era así, Viktor había estado comprometido con Samantha de ahí había nacido nuestra rivalidad entre ambas. Por su parte Alina había estado comprometida con Marcus Marshall mejor amigo de William. 




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