Capitulo 11
Por fin habían terminado mis clases de hoy, recogí mis cosas para dirigirme a la biblioteca. Cómo siempre al llegar todo estaba tranquilo, incluso daba un poco de miedo.
— Buenos días Caroline, por cierto ¿ Y Evan? Dime por favor que hoy no vino al colegio.
— Buenos días señorita Harrison, el debe seguir en clase pero no creo que tarde mucho. Por cierto hoy haremos un informe de todos los libros que faltan por entregar, podrías comenzar en lo que vuelvo, tengo una reunión urgente con los directivos.
— Claro que si Caroline. Por cierto debe de ser alfabéticamente o como estén anotados.
— Dime Caro y debe ser alfabéticamente. No tardaré demasiado pero si llega Evan y no me encuentro por favor que te ayude. Quedas a cargo tú.
Caro salió de la biblioteca dejandome a mi a cargo, empecé a anotar los libros que por cierto eran demasiados no habían pasado ni 10 minutos cuántos mi peor pesadilla llegó.
— Hola ojitos de bosque.
— Otro nuevo apodo Evan.
— No te gusta.
— Tu siempre tan ocurrente.
— Si quieres, te dejo el primero.
Lo que necesitaba es cambiar de tema, dejándole claro que sus apodos eran de mal gusto, no quiero confundir las cosas, para despues terminar enamorada y al último todo termine mal por mis mentiras y ambos con el corazón roto.
— Caro dejo instrucciones de que cuando llegarás me ayudarás a elaborar un informe para ver cuántos libros faltan. Por cierto hoy estoy a cargo.
— Está bien Ojitos de Bosque.
Las próximas dos horas, ambos ya estábamos agotados y aún nos faltaban libros por anotar. Caroline aún no llegaba y mis amigas me habían enviado un mensaje preguntando si invitaría a Evan a almorzar con nosotras mañana.
— Ojitos de Bosque, descansa un poco tus ojos, yo lo termino.
— Gracias Evan pero yo puedo hacerlo.
— No seas testaruda, estás cansado más de lo normal tus ojos y después te van a arder.
— Está bien pero después yo acomodo los libros que acaban de dejar.
— Es un trato ojitos de Bosque. Por cierto aún sigue en pie tu respuesta para nuestra salida.
— Claro que si pero sería después. — y como por arte de magia la puerta es abierta.
— Hola chicos, una disculpa pero la reunión se alargó más de lo previsto. ¿ Ya terminaron ? — pregunta Caro con cansancio.
— Hola Caro, si. Ya todo está listo con los nombres de los libros que faltan y por cierto el profesor de Ciencias acaba de entregar unos libros.
— Está bien Señorita Harrison, ya pueden retirarse y nos vemos mañana.
— Usted me dió permiso para llamarla por su nombre, podría hacer lo mismo.
— Está bien Hannah, ahora vayan a descansar y gracias por ayudarme aquí.
— Gracias a ti Capitana por tenernos aqui— comenta Evan con amabilidad—. Ojitos de Bosque ¿ Podría hacerte compañía?.
— No tengo opción, insistiras hasta que acepte ¿ Cierto ?
— Estás en lo correcto Ojitos de Bosque.
Y sin más ambos salimos de la biblioteca, los pasillos estaban tan solitarios y como no si todos los alumnos ya estaban en casa, mientras yo estoy soportando a Evan y sus tontos apodos. Estábamos a principios de Octubre, tenemos un mes para el viaje por qué las chicas y yo debemos organizar el baile de Halloween. Necesitaba hablar urgentemente con el Director para que nos autorice una semana antes. Aún tengo que hablar con mis padres para obtener el permiso aunque sea de mi padre.
— Ojitos de Bosque has hablado con el director para el viaje a México.
— Deja de decirme todos esos tontos apodos, entiende de una vez ¡ No me gustan ! Ok, son infantiles y de mal gusto. Y con respecto al viaje, se los diré en el grupo, ahora sí me permites me tengo que ir.
— Lo siento Hannah ya no volveré a decirte así. Nos vemos después.
Sin más se encamina hacia el estacionamiento, no podía creer que me haya desquitado con él. Pero ya no soportaba, tenía que liberar todo lo que sentía, pero se que me pase con Evan, se que debo de pedirle disculpas. Empiezo a trotar hasta llega al estacionamiento con la esperanza de encontrarlo, por suerte apenas se estaba subiendo a su auto. Evitó que se vaya así, no quiero que piense que soy una persona que le encanta hacer sentir mal a las personas.
— Evannnnnn... — esto de gritar no es lo mío, espero no quedarme sin voz después.
— Evan, espera un segundo.
— Necesitas algo Hannah ¿ Quieres que te lleve a algún lado? ¿ Estás bien ?
— Lo que necesito es que guardes silencio y escuches lo que tengo que decirte. Lo siento Ok, tuve una mañana desagradable y tú fuiste el blanco para desquitarme, lamento si te lastime con mis palabras. Tus apodos no son infantiles por qué se que te nace del corazón escoger un apodo lindo para mí, te lo agradezco mucho. Y como son de paz te permito que me digas Ojitos de Bosque pero también te invito a almorzar mañana con las chicas y conmigo.
— No te disculpes Ojitos de Bosque, todos alguna vez tenemos días malos. También se que a veces soy insoportable, te prometo que ya no seré así. Acepto tu invitación, pero te advierto que no soy mucho de conversar ni de hacer amigos.
— Estamos en buenos términos, seguimos siendo amigos.
— Claro que si, no te libraras tan fácil de mi. Seguiremos siendo amigos hasta que seamos viejitos. ¿ Quieres que te llevé a tu casa o a cualquier otro lugar ?
— No gracias, vine en mi auto. Nos vemos mañana.
— Hasta mañana Ojitos de Bosque. Estaré esperando mi mensaje de buenas noches.
Sin más me dirijo a mi auto, dejando mi mochila en los asientos traseros. Me coloco unos lentes de Sol, pongo música y pongo en marcha para ir a casa, hoy ha sido un día muy estresante para mi. Se que todos me quieren proteger para que guarde silencio, no es verdad que se preocupen por mí. Por suerte no tarde ni media hora para llegar a la casa, afuera estaba Dylan.
— Dylan podrías llevar el auto al estacionamiento. De casualidad no sabes donde está mi Nana.