Melodía Disonante (colección: Caleidoscopio de Emociones #2)

Capítulo VII

Estaba intentando controlar mi mente, manteniéndola a raya para no imaginar que era yo quien la sostenía de aquella manera.

Fallé.

── May, si Lucas despierta…

── Estaré aquí, tranquilo. ──Le responde con una sonrisa algo triste, también está preocupada.

── Si nos necesitas, toca la puerta. ──Termina de decir, entonces me observa── Gracias, Mario.

── Yo de verdad…

── Nada es tu culpa, hombre. ──Dijo con una sonrisa── Gracias por cuidarla.

Sí bueno, cuidarla, déjame dudarlo. Rebeca está completamente adolorida.

Se la lleva a la habitación sin decir más.

── ¿Eso fue controlarse? ──Me pregunta May con algo de dureza.

La veo mal.

── Estoy muy bien, gracias por preguntar. ──Digo algo sarcástico.

── No te hagas el ofendido conmigo, estabas algo cerca de ella.

── Pero no estaba encima de ella o haciendo algo indebido. ──Contraataco.

── ¿Qué harías si tú descubres a Cristian así de cerca con tu esposa? ──Se cruza de brazos mientras se acerca── Sabiendo que tiene emociones ocultas.

Enloquecería.

La respuesta llego de forma automática y me sentí terrible, porque May tiene razón. Me estoy aprovechando de la confianza que me tiene López con todo esto, lo uso a mi favor para acercarme más a su esposa y eso está terriblemente mal.

Recuerdo mi comportamiento en el centro comercial y sentí vergüenza de nuevo de mí mismo, por cómo tomé su rostro como si fuera mía.

Ella no es mía.

Su corazón era de alguien más, y yo estaba aferrándome patéticamente a lo mínimo que podía de ella.

── Lo lamento, May. ──Digo con sinceridad── Pero no iba a hacer nada, te lo aseguro. Estaba y estoy bastante preocupado por haberla hecho caminar tanto.

Ella suspira, calmándose un poco al escucharme.

── No fuiste tú. ──Aseguró, sentándose a mi lado── Ella es bastante terca con querer demostrar que puede sola, puedo decir con seguridad que ella fue la que te insistió a ir por las escaleras.

Y sí, sí fue ella.

── Aun así…

── Ella es terca, lo digo en serio. ──Insiste── Cristian debe batallar cada día para que se lo tome con calma. No te culpes por lo de hoy.

Ella me toma de la mano y yo la veo, alzando las cejas.

── ¿Qué haces? ──Cuestiono algo incomodo.

── Te brindo mi consuelo. ──Responde como si fuera obvio.

── No quiero tu consuelo. ──Retiro mi mano de su agarre, ella entrecierra los ojos al verme hacer aquello.

── No tenías por qué ser tan grosero.

── Para darme consuelo no tienes que estarme tocando.

── Ah, ¿O sea que si Rebeca te toma de la mano también la apartarías? ──Me mira con clara burla.

── No te pases.

── Tú empezaste. ──Ríe bajito── Te lo ganas por ser un maleducado conmigo, solo he querido ayudarte.

Aquello me recuerda…

── Hablando de ayuda, que terrible consejo me diste la otra noche. ──Le recrimino de mala gana.

Ella hace un gesto lleno de diversión.

En definitiva, una pequeña demonio.

── ¿Qué consejo te di tan terrible?

── Que desviara mis sentimientos como si fuera un ataque de Anime o algo así.

── ¿Algo como el Kamehameha o el Rasengan?

Alzo las cejas, admito que eso me ha sorprendido, pero no pienso dejar que me distraiga con eso.

── Eso da igual. ──Le digo── Me metí con una mujer por tu culpa.

Entonces me mira con dureza.

── Espero que esa mujer no sea Rebeca.

── ¿Qué? ¡No!

Tapo mi boca, pero es demasiado tarde, Lucas se despierta y comienza a quejarse por su sueño interrumpido.

── Bien hecho, padrino. ──Espeta y se levanta, tomando a Lucas en brazos.

── Es tu culpa por las locuras que dices. ──Espeto de igual manera.

── No me has respondido.

── Claro que no haría nada con Rebeca, por mucho que te cueste creerlo, por encima de todo, la respeto y a mi amigo también.

── Me cuesta creerte luego de ver como la veías.

── ¿Por qué te importa tanto?

── Defiendo a mi mejor amiga y a mi primo. ──Gruñe── Tal vez no te hagas una idea de lo obvio que eres, tienes suerte de que Rebeca y Cristian sean inocentes.

Me muerdo el labio.

── Bueno, eres mi salvadora, ¿contenta?

── No. ──Escupe── No eres el único que se está jugando el cuello aquí, ¿sabes lo que me haría Cristian si se entera que yo lo sé?




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.