Despedidas

En la sala de espera de la zona de urgencias del hospital se encuentra Viktor en compañía de su abuelo, Charles se siente sumamente preocupado por su nieto y por el estado de su hijo quien después de hablar con Viktor ha tenido un ataque al corazón que continua siendo atendido. El joven no ha dicho palabra alguna desde que salió de la habitación de Adrian por indicación de los médicos que ingresaron para atender al hombre.

– ¡Abuelo!–exclama una pequeña voz.

Al escuchar esa voz Viktor reacciona, dirige su atención hacia el niño que avanza hacia donde se encuentran de la mano de Leily. Lo que menos desea Viktor en ese momento es ver a esa criatura cerca de él por lo que una gran molestia comienza a invadirlo, rápidamente se pone de pie y avanza hasta donde se encuentra la joven en compañía de esa criatura.

– ¡¿Por qué has traído a ese niño?! ¡Llévatelo ahora mismo, no es un lugar para él; además, no quiero verlo!– indica con suma molestia evitando que continúen avanzando.

–Lo he traído porque quiere saber de sus padres, entiéndelo, se encuentra muy preocupado.

– ¡No lo quiero ver, llévatelo! –ordena con poca delicadeza mirando al niño de manera fría.

– ¡Mamá tenía razón, eres muy malo!–exclama el niño liberándose del agarre de Leily y corriendo hasta donde se encuentra Charles que lo envuelve en un abrazo afectuoso.

Sintiendo la ira aumentar en su interior por la manera en que le ha hablado esa criatura, Viktor gira para avanzar donde se encuentra su abuelo que ha recibido al niño con un abrazo y hecho que tome asiento a su lado. Leily toma del brazo a Viktor para evitar que haga algo más pero de manera brusca se libera del agarre de la joven y se encamina hasta donde se encuentra el niño sentado al lado Charles.

– ¡¿Quién piensas que eres para hablarme de esa manera?! ¡He dicho que te iras de aquí y es lo que harás!–señala tomando al niño de la mano y haciéndolo ponerse de pie para avanzar a donde se encuentra Leily.

– ¡Déjame!–exclama el pequeño intentando liberarse con lágrimas en sus ojos.

– ¡Guarda silencio, niño mimado, ni pienses que puedes conseguir lo que deseas con caprichos, no tienes nada que hacer aquí!

– ¡Viktor, es suficiente, déjalo tranquilo!–ordena Charles poniéndose de pie.

–No intervengas, abuelo, no lo voy a permitir–responde haciendo evidente lo alterado que se encuentra razón por la cual actúa de esa manera tan desconsiderada.

– ¡Te odio, Viktor, te odio, eres muy malo!–expresa el niño golpeando al joven.

–Y peor que seré si continúas gritando y golpeando, además, para tu información yo también te odio.

– ¡No más, Viktor, suéltalo ahora mismo!–interviene Leily tomando la mano del joven haciendo que libere de su agarre a Marcus que enseguida se abraza a ella sumamente asustado, la joven se coloca a la altura de niño que llora de manera incontrolable y lo abraza–. Tranquilo, nadie te llevará a ningún lugar si no deseas hacerlo, ve con tu abuelo.

Marcus corre hasta donde se encuentra Charles que lo recibe y lo abraza, con paciencia trata de conseguir que el niño se tranquilice. Leily se pone de pie y enfrenta a Viktor que permanece de pie observándola lleno de ira, su mirada se encuentra con la del joven, «No puedo creer que te comportes de esta manera, Viktor.» piensa llena de decepción ante la actitud del joven.

– ¿Por qué tienes que intervenir en todo? Es sencillo lo que tenías que hacer, solo llevártelo de aquí.

–Viktor, ya te lo he dicho, no puedes ser tan duro, es un niño que además es tu hermano, ¿Por qué te encuentras tan molesto? Él no te ha hecho nada.

–Simplemente no lo quiero cerca de mi–replica con molestia sin dar más explicaciones al respecto.

–No te perdonaré esto que has hecho, es un niño, tratarlo de esa manera es inhumano y no es el Viktor que yo conozco, no sé qué es lo que te sucede pero no justifica esto–indica sin ocultar molestia y decepción que siente, para después intentar avanzar hasta donde se encuentra Charles.

–Lo siento– musita sujetándola para que no se aleje.

–No es a mí a quien le debes una disculpa, cambia ya esa actitud, en lugar de ser solo un niño parecen dos y él es mucho más maduro que tú–indica liberándose del agarre y alejándose molesta.

Viktor permanece quieto en su sitio, el dolor de su cabeza empeora a cada momento, « No puedo asimilar todo esto, menos aun cuando ese niño se encuentra tan cerca, estoy actuado como un incivilizado.» piensa con seriedad. De pronto, se percata de que uno de los médicos que se encuentran a cargo de Adrian y Keira se aproxima.

–Familiares de Keira Grant– los llaman, Viktor y Charles se aproximan mientras Leily permanece al lado de Marcus–. Lo lamento mucho, la señora, no ha resistido las cirugías.

Charles retrocede hasta tomar asiento en uno de los lugares, Viktor permanece de pie asimilando la noticia, « ¿Qué más puede suceder? Ahora realmente ese niño se ha quedado sin madre.» piensa sintiendo como las paredes del hospital comienzan a cernirse sobre él. De pronto, una de las enfermeras llama al médico, este se aproxima a ella dejando al joven perdido en sus pensamientos, sin tener reacción alguna avanza hasta uno de los lugares disponibles y toma asiento.

El tiempo avanza y Charles abrazando a Marcus trata de mantenerse fuerte para poder cuidar del pequeño que no termina de comprender lo que ha sucedido, lo peor de todo para él es que nadie le dice nada. Al menos tiene a su abuelo a un lado y eso lo hace sentir mejor, más seguro, Viktor ve aparecer nuevamente al médico a cargo y de inmediato se pone de pie y se aproxima a él.

–Señor, se que se encuentran muy afectados por lo que les he comunicado hace poco pero debo ser portador nuevamente de estas noticias, lamentablemente el paciente Adrian Grant ha fallecido, habíamos logrado hacerlo reaccionar y estábamos tratando de estabilizarlo; sin embargo, tuvo un segundo infarto y resultó imposible hacer algo mas, lamento mucho sus pérdidas.