Mi amor onírico

Big bang (Parte dos)

En una habitación oscura, donde se ilumina una pantalla a la vista de un hombre encapuchado, se nota su edad avanzada y su mirada fija en la transmisión, con enojo apretaba los puños levantándose y tomando el objeto entre sus manos mirando fijamente la imagen antes de soltar para si mismo.

-Esos asquerosos engendros... Están en mi terreno... CA***O, quede con ese rey ignorante que su gentuza estaba prohibida en mi territorio, ni siquiera se como se ven, la alarma solo muestra su entrada al lugar y sus datos de edad... Son jóvenes algo raro tal vez... ¡Una declaración de guerra! Ese maldito... Le enseñare lo inútil que es encargándome de sus mocosos...-

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Dirigiéndonos a una habitación llena de mapas y pizarras una chica pálida, cabellos castaños y ojos verdes es interrumpida por una mujer quien con una voz tímida pero firme le dice que el señor quiere hablar con ella y sus hermanos lo que ella solo asiente y deja sus cosas para caminar hacia un patio, donde un joven con cabello largo y castaño, piel blanca algo bronceada, ojos azules y alto estaba entrenando.

-Hey, el viejo quiere vernos- Dice la chica con desinterés antes de que el joven se distraiga de su entrenamiento haciéndolo tropezar y caer -Cielos, levántate y vamos- Termina para darse la vuelta.

-¡Ay! C-claro hermanita ahora te sigo- Habla el chico sobando su cabeza y levantándose para seguir de cerca a la chica quien entra a una oficina.

En medio de la oficina llena de papeles se divisa un escritorio con una luz alumbrando algunos papeles y el rostro de un joven, tenia la piel blanca sin marcas y se notaba la pureza en esta, los ojos verde esmeralda que se escondían detrás de unos lentes mientras se centraban en los papeles frente a el, su cabello algo largo y castaño oscuro con pequeñas ondulaciones, su semblante imperturbable es distraído al oír la voz de su hermana quien le da el mismo aviso.

-Tonk, el tipo quiere vernos, dice que es importante, ya le avise a Town, ¿Estas muy ocupado?- Pregunta la chica antes de ver que el joven se levanta dejando sus lentes en la mesa.

-Voy con ustedes Linda, ¿Sabes que es lo que quiere?- Habla el joven con una voz suave pero firme -Nunca nos llama de imprevisto- Dice para caminar junto a sus hermanos por los pasillos hasta la oficina.

Los hermanos son recibidos por el misterioso hombre de semblante amenazante quien los esperaba con una expresión seria que solo era visible por sus ojos brillantes bajo la capucha que poseía.

-Saben ¿Por qué los llame? Esos asquerosos engendros del rey estúpido y negligente están en mi terreno, me esforcé demasiado para construir ese lugar para que vengan y destrocen mi trabajo, así que los enviare a que averigüen que demonios están haciendo en mi territorio.-

-Una pregunta- Interrumpe el mayor de los hermanos quien confundido y algo desinteresado en el tema dice -¿Por qué nosotros? De todos los demás...-

-Eso es facil de responder Tonk, eres alguien analista que puede ver a través de cada persona antes de saber sus intensiones, Linda es una estratega profesional capaz de idear un plan en solo minutos y Town tiene la fuerza... bruta...- Responde el hombre ante la pregunta del muchacho.

-¡UH! Fuerza bruta- Dice el ojiazul con interés en la misión.

-Así es, entonces, no hay nadie mas capaz para detener a tres mocosos que ustedes tres, solo deben averiguar quienes son, como lidiar con ellos y detenerlos, además tengo sospechas de que son de la familia real, por lo que deberán ver su rostro y cuello, esa rara familia tiene la costumbre de utilizar collares con símbolos raros como cosas relacionadas con el cielo o algo así arg... A menos de que no sean una amenaza y nos ahorramos el trabajo de devolverlos a su abismo-

-¿Cuanto tiempo tenemos para lo que nos pide señor?- Pregunta la chica planeando en su cabeza lo que necesitaran para encargarse de esos chicos.

-El que sea necesario para que todo salga al pie de la letra, en caso necesiten ayuda llámenme y me encargare de traerlos devuelta- Dice el viejo con desinterés pues no se atrevería a entrar a ese lugar por ellos el mismo.

-Y...¿Si nos negamos?- Pregunta Tonk inundando el lugar en un incomodo silencio que es roto rápidamente por una risa burlona que lo asusta un poco -Señor... ¿Esta...-

-Negarse ja, ja, ja buena esa Tonk, pero me temo que...- El hombre se levanta acercándose y sujetando el rostro del joven fuertemente mientras sus ojos miraban fijamente su rostro como si atravesara su alma -No es una opción negar ni fallar jovencito...-

El joven hipnotizado y paralizado por el miedo solo siente a sus hermanos esconderse detrás de el mientras el hombre los miraba con frialdad y suelta al chico quien queda en shock sobándose los ojos mientras ve la preocupación en el rostro de sus hermanos para suspirar.




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