Steve

Ultimamente estoy de muy mal humor, todo me sale mal desde que dejé mi vida pasada, todavía siguen llegando las amenazas, quieren que vuelva al mando de la mafia pero no quiero ya ésa vida, no es para mí, ahora solo quiero conocer el amor de mi vida y tener una familia, éso es todo lo que quiero. Estoy de vuelta en Miami y me gustaría visitar un viejo amigo, Arthur, fue más que un amigo cuando más necesité, nunca tuve esa figura paterna con quien contar pero el señor Arthur fue mucho más que éso para mí. Le pedí a James que me llevara a casa de Arthur, es lo primero que quiero resolver, luego iré a mi empresa. Al llegar el viejo me esperaba en la puerta con mucha emoción, bajé y caminé hasta él 

-Hijo mío bienvenido a Miami 

-Gracias padre, ¿como has estado Arthur?

-Bien Steve ya sabes 

-Me alegra eso 

-Vamos entremos 

Entramos y mamá Bella estaba en la cocina 

-Mamá Bella

-Steve hijo, ¿como estas?

-Bien, ¿y tú?

-Bien hijo 

-Me alegra eso mamá 

Le dí un beso en la frente y seguí con el viejo hasta su estudio. Ellos son como si fueran mis padres por eso les digo mamá y papá, ellos hicieron mucho por mí. Entramos y el viejo me dijo que tomara asiento 

-Y dime hijo, cuéntame lo que tienes pensado 

-Bueno viejo he venido hasta Miami ya sabes por que y tambié me gustaría que tu hija trabajara para mí, sus trabajos son perfectos 

-Me gusta la idea, lo hablaremos con ella cuando llegue 

-Me parece bien 

Hablamos de todo un poco hasta que escuchamos dos toques en la puerta, el viejo dijo "pase" y una hermosa mujer entró y valla que mujer, me observó luego fue hasta el viejo se sentó en sus piernas él la abrazó y ella le dió un beso 

-Hola mi niña- ahora comprendo, ésta hermosa mujer es la famosa hija del viejo 

-Hola papi 

-¿Como estas?

-Bien padre, ¿y tú?

-Bien hija, te quiero presentar a Steve Rodriguez, es el dueño de varias empresas y quiere montar un pequeño negocio aquí en Miami- ella me miró y me sonrió

-Hola, mucho gusto señor Rodriguez, me llamo Perla Hoffman- hasta el nombre la define, es la perla más hermosa que he visto 

-El gusto es mío señorita Hoffman, su padre me ha hablado mucho de usted 

-Me alegra escuchar eso 

-Mi niña es la mejor diseñadora de todo Miami- habla el viejo, y no lo dudo 

-Si viejo eso me han dicho y me encantaría hacer negocios con ella si tú estás de acuerdo 

-Claro, después que mi hija quiera no tengo ningún problema, ¿que dices hija?

-Me gustaría hacer negocios con usted señor Rodriguez 

-Perfecto, ¿que te parece si mañana vamos a almorzar y hablamos de mi proyecto y lo que tengo pensado?

-Me parece bien 

-Perfecto, mañana a las 11:00 a.m. 

-Hasta mañana señor Rodriguez 

-Hasta mañana señorita Hoffman, Arthur un placer volver a verte 

-El placer fue mío hijo