Mi ángel de la guarda

Steve

Me senté frente al lago que había en la casa y me quedé allí pensando en las consecuencias que podría traer esto. A las 3:00 p.m. me cambié de ropa y fuí a casa del viejo, debía hablar con él sobre todo ésto, bajé y entré 

-Hola hijo 

-Hola mamá Bella 

-Pasa 

-Vine a ver al viejo y a hablar con él 

-Está arriba hijo sube 

-Gracias 

Subí y lo ví sentado en la biblioteca, entré y me senté a su lado 

-Ay hijo se como te sientes, te sientes culpable 

-Que bien me conoces viejo, si no fuera por que Perla es igualita a tí juraría que nos cambiaron en el hospital 

-Steve no te sientas así, no es tu culpa, no elegiste ésto, sin embargo, la vida y el destino se encargaron de ponerte estos obstáculos para saber si eres o no capaz de pasarlos 

-Ese es el problema viejo que no sé si pueda más, siento que cada día que pasa voy muriendo lentamente como muere una rosa sin ser cuidada 

-Ven hijo vallamos por un buen tequila 

Pasé toda la noche con el viejo ahogando mis malditas penas y maldición todas las cosas que me han tocado vivir, aveces desearía haber nacido con familia rica y así nunca hubíera tenido que matar ni robar ni mucho menos traficar drogas armas y mujeres. 

         

 



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En el texto hay: narcotrafico, amor, muerte

Editado: 26.11.2019

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