Recuerdos extraviados...
Mientras iba observando el cielo estrellado a través de la ventana de aquel auto, que conducía el chico que me había ayudado, no paraba de llorar por lo ilusa que fui con Emilio todo ese tiempo.
Llegamos a mi casa y antes de bajarme charlamos... ¡Charlar con el joven apuesto me hizo sentir un poco mejor!.
El día siguiente tocan a la puerta de mi casa era el chico que conocí la noche de la fiesta, quería saber como me encontraba... desde esa vez comienza a surgir una amistad que mas tarde se convertiría en amor.
Era invierno cuando perdí a Stefan y era un martes de invierno cuando Stefan y yo nos hicimos novios. El escogió los días martes para visitarme cuando yo había perdido la memoria, con la intensión de que yo la recuperara... Aunque con el paso de meses iba recordando poco a poco... Ahora comprendo porque mis sueños con él cuando aún no recordaba nada. Y al ver las fotos guardadas en el cofre termine de creer todo lo que él había escrito en la carta; escribió como nos conocimos, jamas se alejo de mí; siempre estuvo allí...
El joven psicólogo que me había ayudado la noche en la fiesta era Stefan, recuerdo la segunda vez que nos vimos... llamo a la puerta, en sus manos traía un libro de auto-ayuda, me dijo que era para mí con una linda sonrisa...
Y al cumplir tres años de amistad, nos encontrábamos en un restaurante cuando me pregunto si quería morir a su lado siendo ancianos.